La Unión de Castilla y Aragón y la Conquista de Granada

La consolidación de los reinos de Castilla y Aragón se produjo con la proclamación de Isabel como reina de Castilla en 1474, tras la muerte de su hermano Enrique IV. Su unión fue dinástica, manteniendo cada reino sus propias leyes y costumbres. Los Reyes Católicos (RRCC) implementaron un programa político para la pacificación interior, que incluyó:

  • Fin de la guerra civil castellana con el Tratado de Alcacovas.
  • Sometimiento de la nobleza.
  • Control de las órdenes militares.
  • Apoyo popular contra la aristocracia.

Tras la paz interior, se concentraron en la conquista del reino nazarí de Granada, que ocupaba las actuales provincias de Málaga, Granada y Almería, y zonas fronterizas. La conquista duró 10 años, culminando en 1492 con la toma de la Alhambra.

La economía castellana, basada en la exportación de lana y el oro de las parias de Granada, era fuerte, a diferencia de la aragonesa, en decadencia comercial.

El Renacimiento: Un Nuevo Amanecer

El Renacimiento, desde el siglo XV hasta la segunda mitad del XVI, marcó una profunda transformación del mundo medieval, sentando las bases de la Edad Moderna. Este periodo de cambios se inició en Italia y se extendió por Europa. Los primeros reyes españoles de esta etapa fueron los RRCC.

Aportaciones del Renacimiento y el Descubrimiento de América

El Renacimiento trajo consigo un cambio de mentalidad, con el surgimiento de los humanistas, que valoraban al hombre y la sociedad bajo nuevos criterios. Se desarrolló el conocimiento empírico, la libertad de opinión y la crítica. Los reyes afianzaron su poder, ejerciendo autoritarismo y centralismo.

Los avances en la navegación hicieron posible el descubrimiento de nuevas tierras. Cristóbal Colón descubrió América en 1492, aunque murió sin saber que era un nuevo continente. Américo Vespucio confirmó que no era Asia, y Núñez de Balboa descubrió el Océano Pacífico. Magallanes y Elcano demostraron la redondez de la Tierra.

Con los primeros Austrias, España formó un imperio en ultramar. Hernán Cortés conquistó el Imperio Azteca (1519-1521) y Francisco Pizarro el Imperio Inca (1531-1535). España llevó a América su cultura, pero explotó económicamente el territorio, especialmente las minas de plata. La sociedad americana se caracterizó por el mestizaje y el decrecimiento de la población indígena. Se crearon organismos para gobernar y administrar las nuevas tierras.

Los Primeros Austrias y el Arte Renacentista

La dinastía de los Austrias comenzó con Carlos I de España y V de Alemania, seguido por su hijo Felipe II. Carlos I concebía el Imperio como una liga de reinos independientes, mientras que Felipe II lo veía como un territorio regido desde España y de orientación católica.

El Arte Renacentista en España

Mientras Italia cultivaba el Renacimiento en el siglo XV, España seguía apegada al gótico. El plateresco fue un estilo de transición hacia el Renacimiento puro, visible en la fachada de la Universidad de Salamanca. La arquitectura renacentista priorizaba la estructura sobre la decoración, como el Palacio de Carlos V en Granada. El estilo herreriano, de Juan Herrera, se caracterizó por su sobriedad, como en El Escorial. El Greco fue un gran pintor del bajo Renacimiento, autor de El entierro del Conde de Orgaz. Hubo influencia de artistas italianos, como el escultor Pietro Torrigiano.