Exploración de la Literatura Medieval Española: Contexto, Cultura y Creaciones Literarias
Concepto y Límites Temporales de la Edad Media
En Occidente, la Edad Media abarca el período comprendido entre la caída del Imperio Romano en 476 y la del Imperio Bizantino en 1453.
En España, se abre con el lento asentamiento del reino visigodo entre los siglos V y VI y se cierra en torno a 1469, año en que los Reyes Católicos sientan con su matrimonio las bases para la futura configuración política de España.
La Edad Media en España
El final del reino visigodo en el año 711 provoca la instalación del Islam en la península Ibérica. Córdoba se erige entonces en el centro político de la España musulmana, que recibe el nombre de Al-Ándalus, y se convierte en la capital cultural de Occidente entre los siglos IX y XI. La reacción de los reinos cristianos se hace notar ya a lo largo del siglo IX. La llegada de los almorávides, en 1086, y los reinos de taifas marcan el comienzo de la decadencia musulmana.
La toma de Toledo, siglo XI, por Alfonso VI y la expansión catalano-aragonesa por el este constituyen el avance de los cristianos.
Durante el siglo XIV, el reino de Aragón y Cataluña empieza a mirar hacia el Mediterráneo. Bajo el reinado de los Reyes Católicos, en 1492, cae el reino nazarí de Granada. El descubrimiento de América y la expulsión de los judíos se llevan a cabo al tiempo que se cierra la Edad Media y comienza la Edad Moderna.
Religiones, Culturas y Mentalidad Medieval
Las tres grandes religiones monoteístas que coexisten en la España medieval (cristiana, hebrea y musulmana) están en el origen de unas culturas que muestran permeabilidad entre sí. Se ha entendido la España medieval como un crisol de culturas. Obras de arte y de literatura son fruto de esta raíz multicultural que recibe el nombre de mudejarismo. La escuela de traductores de Toledo constituye el mejor exponente que se dio entre cristianos, musulmanes y judíos.
La influencia europea también se deja sentir en la España medieval. A partir del siglo XI, las peregrinaciones a Santiago de Compostela por el Camino de Santiago, la fundación de monasterios por los monjes de Císter y de Cluny, y la repoblación de la meseta central, en la que intervienen los francos, se convierten en los principales agentes del intenso influjo cultural francés sobre la Península.
Al final del siglo XIV y en el siglo XV se producen los primeros contactos con Italia.
En la mentalidad de la Edad Media cumple una función importantísima la religiosidad popular, mezcla de elementos mágicos, creencias paganas y ritos cristianos.
Focos de Cultura y de Creación Literaria
Los monasterios, las escuelas catedralicias y las universidades son los centros culturales y literarios durante la Edad Media. En los monasterios, los clérigos copiaban pacientemente el legado del pasado, al mismo tiempo que se entregaban a la creación de nuevas obras, en latín o en lengua romance. Las escuelas catedralicias brillan a partir del siglo XI, hasta que, en el siglo XIII, se dan las primeras universidades. Otros focos generadores de cultura son los castillos y palacios, del camino de Santiago.
Primeras Manifestaciones de la Literatura Medieval
La Literatura en Al-Ándalus
La brillante literatura medieval de Al-Ándalus tiene sus antecedentes en la literatura islámica clásica.
La Prosa
Desde el siglo X, Al-Ándalus cuenta con importantes prosistas, entre los que sobresale Ibn Hazm, cuya obra *El collar de la paloma* (un tratado sobre la naturaleza del amor) influirá posteriormente en la creación del *Libro de Buen Amor*. Uno de los géneros más importantes es la maqamat (serie de cuentos cortos).
La Lírica
La producción lírica de Al-Ándalus fue más importante y abundante que la prosística. La lírica andalusí trata los temas de la poesía árabe en general y toma como modelo poético la qasidah, una oda o canción de tema amoroso y tono melancólico.
Hacia el siglo X aparecen en la lírica andalusí nuevas formas poéticas populares como el zéjel y la moaxaja, centradas en la exaltación de la vida y del amor, acompañado de elementos musicales.
El cordobés Ibn Quzman es el más importante de la tradición zejelesca. Su *Diwan* o *Cancionero* nos ha legado una espléndida colección de 149 zéjeles.
Buena parte de la producción de zéjeles y moaxajas puede ser calificada de erótica y sensual; otra gran proporción expresa una imagen espiritual del amor y de la mujer, inspirada en el misticismo sufí. En esta corriente poética, el amor se concibe como una relación de vasallaje: el hombre aparece subordinado a la mujer. El amor como servicio a la amada recibe el nombre de udrí, equivalente al amor cortés de la lírica europea trovadoresca.
El zéjel es una composición que mezcla el árabe vulgar con expresiones no árabes. La moaxaja, casi de idéntica forma y contenido al zéjel, gozó del privilegio de la escritura y estaba considerada como más artística, ya que emplea únicamente la lengua árabe culta.
Primeras Muestras de Literatura en Lengua Romance: Las Jarchas y el Poema de Mío Cid
La jarcha es una breve canción en la que una joven se lamenta por la ausencia o el abandono del amado. Escrita en lengua mozárabe, consta de un número de versos de arte menor. Nacida en el ámbito de la lírica popular de Al-Ándalus, en el siglo X, la jarcha florece entre los siglos XI y XIII.
La Literatura en los Reinos Cristianos: Los Cantares de Gesta
Al igual que en otros países europeos como Francia, Inglaterra y Alemania, España también contó en la Edad Media con una larga tradición de poesía épica. Fue en Castilla donde más se cultivó este género literario, conocido como cantar de gesta.
El cantar de gesta es un relato histórico escrito en verso que tiene por objetivo la exaltación de las hazañas de un héroe, cuyo ideal es la consecución y mantenimiento del honor por medio del riesgo y el esfuerzo. Arte literario, propaganda política y entretenimiento del público constituyen tres aspectos inseparables del cantar de gesta.
Origen de los Cantares de Gesta
En España, el origen de los cantares de gesta se ha relacionado con distintas fuentes: los *Carmina maiorum* (cantos de los visigodos sobre sus antepasados germánicos), la épica francesa, la épica arábigo-andaluza y el folclore popular.
Se inscriben en la tradición literaria del mester de juglaría o arte de los juglares; de ahí que sean anónimos. Se ignora si es resultado de un trabajo individual o colectivo, y si se debe a poetas cultos o a los propios juglares, que eran los que se encargaban de transmitirlos oralmente al público.
En España, salvo el *Poema de Mío Cid*, se han perdido casi todos los cantares de gesta, por su transmisión oral. Tenemos noticia de muchos cantares gracias al romancero y a los cronistas medievales.
Ciclos de los Cantares de Gesta
Los cantares de gesta se agrupan en torno a tres ciclos principales: el de los condes de Castilla, el del Cid, y el de Carlomagno. El primero incluye el *Cantar de Fernán González*. El segundo, el *Poema de Mío Cid*, y el tercero, el *Cantar de Roncesvalles*.
Literatura y Clerecía
En los siglos XIII y XIV se van produciendo una serie de cambios que afectan no solo a la vida política, económica y social, sino también a la artística y cultural. Adquieren especial relevancia la llegada del arte gótico, la creación de las primeras universidades y el quehacer poético del mester de clerecía.
El mester de clerecía es el arte u oficio propio.
Métrica
Los del mester de clerecía exhiben el dominio de la regularidad métrica, emplean mayoritariamente el tetrástrofo monorrimo o cuaderna vía, estrofa formada por versos alejandrinos divididos en dos hemistiquios con rima consonante.
Temas
Los poetas del mester son más cultos que los de juglaría, toman los temas de diversas fuentes. Las más importantes son: la Biblia, las literaturas francesa, castellana, árabe y hebrea. De estos textos proceden los temas religiosos, épico-novelescos profanos y didácticos.
Lengua y Estilo
A la expresión coloquial, llana y sencilla se añade una voluntad de estilo en una contenida ornamentación. Buscan un estilo entre popular y culto.
El Mester de Clerecía en el Siglo XIII
Gonzalo de Berceo era un hombre de amplia cultura, es el primer poeta de nuestra literatura que renuncia al anonimato y firma sus obras.
Características Generales de su Obra
- Cada obra aspiraba a convertirse en un poema sobre una figura religiosa.
- Lenguaje y estilo idénticos al de los cantares de gesta.
- Presentan también unos aspectos que los diferencian: tema religioso, cuaderna vía y el tono coloquial e intensamente afectivo.
Obras de Berceo
Se agrupan en tres apartados:
- Poemas marianos (en torno a la Virgen).
- Hagiográficos (vidas de santos).
- Doctrinales.
Su obra más importante es *Los milagros de nuestra señora*: Introducción alegórica que presenta la vida como una romería, 25 episodios independientes. Personajes: son devotos a la Virgen.
El Mester de Clerecía en el Siglo XIV
En sintonía con los cambios sociales y culturales habidos en Castilla por el surgimiento de una incipiente economía burguesa, en el siglo XIV el mester de clerecía experimenta una importante evolución. Se ensayan formas métricas novedosas que vienen a sumarse a la cuaderna vía, se incorporan nuevos temas al tiempo que se dejan de cultivar los épicos y se imprime a la literatura un fuerte contenido didáctico-moral.
Juan Ruiz: Nada sabemos con certeza de la vida de Juan Ruiz, más allá de los datos que él mismo nos proporciona en la única obra que conservamos, el *Libro de Buen Amor*.
Estructura del Libro del Buen Amor
Apareció en dos versiones distintas: la primera en 1330 y la segunda en 1343. La obra, esencialmente un tratado sobre el amor, se compone de 1728 estrofas heterogéneas, repartidas de la siguiente manera:
- Una narración autobiográfica ficticia de contenido erótico y moral.
- Una colección de 32 fábulas y ejemplos de origen latino, oriental y francés medieval.
- Digresiones o comentarios de tipo moral, ascético y satírico sobre el dinero, las propiedades de las mujeres y las armas que se ha de valer el cristiano.
- Una glosa del *Ars amandi* del poeta latino Ovidio, con los consejos que don Amor da al Arcipreste.
- Glosas de textos medievales en latín como la comedia humanística *Pamphilus*.
- Alegorías como la de don Carnal y doña Cuaresma.
- Composiciones varias de poemas juglarescos, religiosos…
Fuentes
Se hallan en la cultura occidental, musulmana y judía. La influencia occidental en el *Libro de Buen Amor* se debe principalmente a la Biblia, la patrística, la literatura canónica y jurídica. De fuente musulmana, tal vez de *El collar de la paloma* de Ibn Hazm, proceden la concepción del amor y del ideal femenino, la influencia de los astros y la alternancia de partes narrativas y líricas y el empleo de arabismos.
Métrica, Lenguaje y Estilo
El *Libro de Buen Amor* es un poema polimétrico. Aunque predomina en él la cuaderna vía, incluye composiciones de arte menor, como zéjeles y cantigas de serrana. El arte mayor se utiliza para la narración más solemne, y el menor para los temas juglarescos o cómicos. La sencillez y la naturalidad, la ironía y el humor, como reflejo de un habla real y viva, coloquial y refranera, además de la sátira.
Significado de la Obra
Si la intención literaria del *Libro de Buen Amor* está bastante clara (moralizar y divertir de manera que los locos amadores escarmienten en cabeza ajena) no ocurre lo mismo con su significado moral, cuya interpretación se vuelve problemática por la ambigüedad de sus mensajes.
Canciller Pedro López de Ayala
Obra menor si la comparamos con el *Libro de Buen Amor*, es el *Rimado de palacio* de Pedro López de Ayala, poeta, cronista y político vasco de las cortes de Enrique III y Juan II de Castilla. Esta obra, escrita en cuaderna vía y dividida en cuatro partes, trata asuntos morales, religiosos y políticos de la época cuyos vicios censura.
La Prosa Medieval Castellana en el Siglo XIII
Las primeras manifestaciones de la prosa castellana con importancia literaria son algo más tardías que las poéticas y surgen en el siglo XIII bajo el reinado de Alfonso X el Sabio. El uso creciente de la lengua romance obedece tanto a razones prácticas como literarias. La lengua vulgar ha alcanzado ya un grado de desarrollo tal, que la hace apta para expresar por escrito determinados contenidos. La alta cultura se sigue difundiendo en latín, leyes e importantes obras científicas se redactan ya en lengua vulgar.
La Lengua Castellana y Alfonso X el Sabio
El rey consagra el uso de la lengua castellana en la redacción de textos legales y prosa científica, partiendo del habla de Toledo. El proyecto del rey es hacer del castellano la lengua de comunicación de las tres comunidades que convivían.
La Escuela de Traductores de Toledo
La escuela de traductores alcanza su apogeo bajo el reinado de Alfonso X. Un equipo de filólogos y estudiosos cristianos, judíos y musulmanes compila y traduce, del latín, árabe y hebreo al castellano.
La Obra de Alfonso X el Sabio
Obras históricas son las dos crónicas renovadoras del género. La obra científica comprende tratados de astronomía como las *Tablas alfonsíes* y los *Siete libros del saber de astronomía*. Las obras jurídicas, el código legislativo de las *Siete Partidas*, es la más importante, inspirada básicamente en el derecho romano y llevada a cabo entre 1256 y 1265.
Lírica
Obra lírica galaico-portuguesa que abarca todos los géneros con 44 cantigas profanas y 426 religiosas: *Las Cantigas de Santa María*.
La Prosa Medieval Castellana en el Siglo XIV
En este siglo se experimentan notables cambios sociales y económicos, la producción en prosa se incrementa con nuevas tradiciones árabes y crónicas históricas con la aparición del nuevo género de las novelas de caballerías, los libros de aventuras y la obra de Don Juan Manuel.
El auge del género histórico tiene su reflejo en las crónicas más importantes de este período: *Gran crónica de Alfonso XI*.
Se va perdiendo el gusto por los viejos cantares de gesta, a favor de un tipo de relato en prosa más idealista y lírico, conocido como *roman courtois* o *materia de Bretaña*, llamada así por estar protagonizada en sus orígenes por caballeros bretones próximos a la corte del rey Arturo. El protagonista de estos relatos es el famoso caballero andante que llegará hasta Don Quijote, un paradigma de virtudes, valor, fidelidad amorosa a su dama, destreza guerrera y ascetismo románico, que ha de enfrentarse a todo tipo de dificultades y peligros en defensa de sus ideales de honor y deber.
Don Juan Manuel
Don Juan Manuel es el primer autor literario en castellano que muestra plena conciencia de su condición de escritor.
Lenguaje y Estilo
Se caracteriza por una expresión sobria y concisa, procurando siempre una claridad y un realismo acordes con la intención didáctico-moral. La adjetivación exacta, las simetrías morfosintácticas, el encadenamiento lógico de las oraciones, la variedad léxica, la digresión con fines aclaratorios, el gusto por el detalle y la economía de recursos ornamentales.
La Obra de Don Juan Manuel
*El conde Lucanor*, *El libro del cavallero et del escudero*. *El libro de los enxiemplos del conde Lucanor et de Patronio* consta de dos prólogos y cinco partes. La primera está formada por una colección de 51 cuentos que reelabora literariamente los *exempla* de diversas fuentes, con el propósito de transmitir una determinada enseñanza moral.
Si cada cuento trata un tema diferente, sin embargo, la misma estructura: el marco narrativo, el ejemplo y los versos finales.
Dos Narradores Europeos del Siglo XIV: Boccaccio y Chaucer
Boccaccio
La obra de Boccaccio más significativa es el *Decamerón*, colección de cien relatos, contados durante diez días por diez jóvenes refugiados en una villa, a la espera de que pase la peste negra en la Florencia de 1348. Los cuentos no son originales, proceden de fuentes latinas.
El *Decamerón* constituye un retablo gótico de cuadros naturalistas y vivos animados por una prosa sencilla, expresiva y realista, muy del gusto burgués.
Chaucer eleva el inglés a lengua literaria con los *Cuentos de Canterbury*. Se trata de un largo poema narrativo en verso, sigue el modelo y el tono vitalista e irónico del *Decamerón*. En el prólogo establece el marco narrativo, presentando al lector a un grupo de peregrinos reunidos en la posada del Tabardo que se dirige al santuario de Canterbury para venerar la tumba de Santo Tomás de Beckett.