La expansión económica que experimentó Argentina a partir de la década de 1880 se debió a la combinación de tres elementos:

Los cambios institucionales

1880 trajo consigo la posibilidad de afianzar un proceso económico que registraría importantes avances. Recién a partir de esta fecha se pudo lograr, a través del establecimiento definitivo de una autoridad nacional, el marco político necesario que salvaguardara y promoviera la expansión económica de este período.

El mejoramiento de los servicios

Era imprescindible crear las condiciones mínimas de infraestructura física que garantizaran el crecimiento de la agroexportación. Para la economía era crucial el tema del transporte. Para ello, a partir de entonces se inicia la construcción de nuevos puertos y la remodelación de los existentes. También influyó la construcción de vías y ferrocarriles.

La expansión agro-ganadera

En la agricultura, durante la década de 1880, la superficie cultivada aumentó un 50% gracias a la expansión ferroviaria y la incorporación de maquinaria agrícola. Argentina se convirtió en uno de los más importantes exportadores mundiales de trigo y harina. Con respecto a la ganadería, fue muy importante el proceso de mejoramiento de la producción. Este proceso de refinamiento implicaba la aplicación de una tecnología nueva y de avanzada procedente de Gran Bretaña. Las mejoras técnicas que se introdujeron mediante la radicación de frigoríficos y el uso de buques mercantes con cámaras de frío permitieron la exportación de carne congelada y enfriada.