La Revolución Industrial: De la máquina de vapor a la era digital
1. La Industrialización en Estados Unidos y Alemania
1.1. Estados Unidos: Un gigante industrial en ascenso
La industrialización de Estados Unidos comenzó a principios del siglo XIX, aunque su despegue no se afianzó hasta el fin de la Guerra de Secesión. En vísperas de la Primera Guerra Mundial, ya era el primer país industrial del mundo. Esta rápida industrialización fue posible gracias a varios factores:
- Rápida adopción de la tecnología inglesa.
- Aumento de la población y, con ella, de la demanda interna.
- Abundantes recursos naturales.
- Desarrollo tecnológico (en 1840, ya contaba con un importante nivel tecnológico).
- Escasez de mano de obra y grandes extensiones de tierra, que impulsaron la búsqueda de avances en maquinaria.
- Cadena de montaje de Henry Ford.
- Impulso al sector siderúrgico por la demanda del ferrocarril y, más tarde, del automóvil.
Sectores clave:
En 1815, el sector agrícola era predominante. Entre 1820 y 1830, despuntó el sector textil. De 1850 a 1890, el protagonismo recayó en el sector ferroviario y siderúrgico. En el siglo XX, el sector automovilístico tomó el relevo.
Núcleo de expansión:
El Nordeste del país fue el principal núcleo de expansión industrial.
Estructura empresarial:
En 1850, predominaban las pequeñas empresas. En vísperas de la Primera Guerra Mundial, surgieron los oligopolios y la formación de grandes trusts. Las empresas se organizaban de forma vertical u horizontal. Los intentos de monopolización fueron frenados mediante legislación y la opinión pública. El Fordismo (aplicando el Taylorismo) y la publicidad sistemática marcaron esta época.
1.2. Alemania: Un desarrollo industrial con diferencias regionales
Las diferencias regionales en los Estados Alemanes dificultan la realización de un análisis global. Sajonia y Renania contaban con buenas conexiones internacionales.
Factores de la industrialización alemana:
A) Potencial demográfico elevado y en aumento: 25 millones en 1800, 67 millones en 1913 (vísperas de la guerra).
B) Importancia del sector agrícola: En el oeste, predominaba la pequeña propiedad agrícola, mientras que en el este se encontraba la aristocracia o junkers, que controlaban el “granero de Alemania”.
C) Disponibilidad de recursos minerales: regiones como Silesia, El Sarre o Suhr eran ricas en carbón y hierro, abasteciendo a las industrias locales.
D) Transporte: Alemania contaba con una extensa red fluvial (Rhin, Elba, Oder). La infraestructura de comunicaciones se amplió y diversificó con la introducción del ferrocarril (décadas de 1840, 1850 y 1860). En 1840, se estableció una red ferroviaria. En 1850, se implementó una política de protección arancelaria y se impulsó el progreso tecnológico. El ferrocarril contribuyó a establecer las bases del modelo industrializador alemán: estrecha relación entre la banca y la industria, y nacionalización de las compañías ferroviarias.
E) Influencia de la tecnología británica.
F) Estructura empresarial: Las empresas establecían acuerdos temporales (cartels) para maximizar beneficios, evitar la sobreproducción, repartirse el mercado y controlar los precios. En el sector eléctrico, dos empresas (Siemens y AEG) controlaban el mercado desde el siglo XX, formando un oligopolio que no encontraba oposición por parte del Estado.
G) Apoyo financiero de la banca: En 1875, se fundó en Berlín un banco central que obtuvo el monopolio en la emisión de billetes.
H) Actividad exterior: Importación de materias primas (algodón y alimentos) y exportación de productos químicos y farmacéuticos.
2. Las tres Revoluciones Industriales
2.1. La Primera Revolución Industrial
Se inició en Inglaterra en la segunda mitad del siglo XVIII.
Cambios técnicos:
- Energía: Máquina de vapor (James Watt, 1769).
- Combustible: Carbón mineral (hulla).
- Sectores punteros: Siderúrgico y textil algodonero. Importantes innovaciones tecnológicas en el sector textil.
- Medios de transporte: Carreteras de peaje, canales y ferrocarril (locomotora a vapor).
Características de la estructura empresarial:
- Empresas de pequeño o mediano tamaño, con escasa diferenciación entre propiedad y gestión.
- Predominio de la empresa industrial (sector secundario).
Cambios sociales:
- Ruptura de la jerarquía social tradicional.
- Lucha de clases y aparición de una nueva clase social: el proletariado industrial (con dificultades para acceder a niveles mínimos de renta y bienestar).
2.2. La Segunda Revolución Industrial
Se desarrolló a finales del siglo XIX y comienzos del siglo XX. Alemania fue uno de los países pioneros. Se extendió por Europa occidental, Estados Unidos y Japón.
Cambios técnicos:
- Energía: Electricidad y motor de combustión interna (automóvil).
- Combustible: Carbón y petróleo.
- Sectores punteros: Acero, hidroeléctrico, químico (sosa, fertilizantes artificiales, caucho, plástico), farmacéutico, imagen y sonido (telecomunicaciones).
Medios de transporte:
- Ferrocarril: Sustitución del vapor por la tracción eléctrica y diésel, mayor velocidad y menor coste.
- Navegación a vapor: Sustitución de la vela, cascos de hierro y hélice para la propulsión.
- Automóvil: Motor de explosión interna (Karl Benz, 1885).
- Aviación: Sustitución de globos y dirigibles. Desarrollo en Estados Unidos.
Cambios en la estructura empresarial:
- Auge de la gran empresa.
- Desarrollo de conglomerados y asociaciones de empresas (cartel, trust, holding).
- Aparición de grandes corporaciones multinacionales.
- Separación entre propiedad y gestión (gestores profesionales).
- Nuevas formas de organización del trabajo (producción en cadena, piezas intercambiables, especialización – Taylorismo).
Cambios sociales:
- Mayor movilidad social.
- Creciente especialización de la mano de obra.
- Primeros pasos hacia una mínima cobertura social por parte del Estado.
- Desarrollo del sindicalismo de clase y de partidos políticos obreros.
2.3. La Tercera Revolución Industrial
Se inició tras la Segunda Guerra Mundial, en la segunda mitad del siglo XX, en los países del primer mundo (Europa Occidental, Norteamérica y Japón).
Cambios técnicos:
- Energía y combustible: Carbón, petróleo, electricidad, gas y energía nuclear.
- Sectores punteros: Industria siderúrgica (mini acerías), sector químico (nuevos plásticos y fibras artificiales), imagen y sonido (televisión vía satélite, vídeo doméstico, sonido de alta fidelidad), telecomunicaciones (teléfonos, internet, fax, correo electrónico), sector informático y robótico.
Medios de transporte:
- Navegación: El tráfico de pasajeros disminuyó tras la Segunda Guerra Mundial debido a la competencia de la aviación, pero se mantuvo para el transporte de mercancías.
- Ferrocarril: Desarrollo del tren de alta velocidad (Japón, década de 1960).
- Automóvil: Mayor fiabilidad y menor consumo.
- Aviación: Turborreactores y turbohélices (medio habitual para viajes largos).
Cambios en la estructura empresarial:
- Auge de las multinacionales.
- Predominio del sector terciario (servicios, finanzas, ocio).
- Empresas de tecnología punta (tecnología, informática).
Cambios sociales:
- Necesidad creciente de capital humano y mano de obra cualificada y flexible.
- Desarrollo del consumo masivo.
- Importancia del ocio y la cultura.