Edad Media

Escuela de Traductores de Toledo

La Escuela de Traductores de Toledo fue una institución fundamental en la transmisión del conocimiento durante la Edad Media. Facilitó la traducción de textos clásicos greco-latinos al latín y castellano desde el árabe y hebreo, abarcando una gran diversidad temática como filosofía, teología, astronomía y medicina. Su labor contribuyó a la preservación de textos clásicos y actuó como puente cultural entre Oriente y Occidente.

Mesta

La Mesta fue una asociación de ganaderos de la Corona de Castilla instaurada por Alfonso X. Gozó de enormes privilegios, como las cañadas reales, debido a la importancia económica de la ganadería ovina, especialmente la oveja merina, cuya lana de excelente calidad se exportaba en su mayoría al resto de Europa.

Edad Moderna

Paz de Utrecht (1713)

La Paz de Utrecht puso fin a la Guerra de Sucesión Española. Felipe V fue reconocido como rey de España, pero renunció a cualquier derecho al trono francés. España sufrió importantes pérdidas territoriales en Europa: cedió territorios a Austria y a la casa de Saboya, y entregó Gibraltar y Menorca a Inglaterra. Además, Inglaterra obtuvo la venta de esclavos en las colonias españolas (Navío de Permiso).

Despotismo Ilustrado

El Despotismo Ilustrado representó la evolución del absolutismo monárquico. Los monarcas, influenciados por la Ilustración, implementaron reformas que beneficiaban al pueblo sin menoscabar la autoridad real. Se resume en la frase “Todo para el pueblo pero sin el pueblo”. En España, su máximo representante fue Carlos III.

Decretos de Nueva Planta (1707-1716)

Los Decretos de Nueva Planta, promulgados por Felipe V, abolieron los fueros, privilegios y leyes particulares de los territorios de la Corona de Aragón, que pasaron a depender de las leyes de Castilla. Con esta medida, Felipe V buscaba la unificación administrativa bajo el modelo castellano y castigar a los territorios de la Corona de Aragón por su apoyo al candidato austriaco durante la Guerra de Sucesión.

Afrancesados

Los afrancesados eran intelectuales, altos funcionarios y sectores de la alta nobleza que aceptaron a José I como rey e incluso participaron en su gobierno. Provenían en su mayoría del Despotismo Ilustrado y apoyaban las reformas propuestas por José I.

Edad Contemporánea

Desamortización de Mendizábal (1836)

La desamortización fue un proceso recurrente durante los siglos XVIII y XIX para obtener recursos para el Estado mediante la venta de bienes expropiados a la Iglesia o a los ayuntamientos. En el siglo XIX, formó parte de la reforma agraria, buscando una distribución más equitativa de la tierra y la obtención de recursos para la Hacienda, la guerra carlista y la construcción del ferrocarril.

Moderados y Progresistas

Moderados

Los moderados defendían una soberanía compartida entre las Cortes y el Rey, otorgando a este último poderes como la designación de ministros y la disolución de las Cortes. Restringían derechos individuales como la libertad de prensa, asociación, reunión y opinión, y defendían el papel central de la Iglesia católica.

Progresistas

Los progresistas defendían la soberanía nacional y el poder de las Cortes, limitando la intervención política de la Corona. Promovían la elección libre de los ayuntamientos y defendían los derechos de prensa, reunión y asociación. Proponían un sufragio más amplio que los moderados y contaban con apoyo popular por su postura en la reforma agraria y la reducción de la influencia eclesiástica.

Minorías Cristianas en Al-Ándalus

La sociedad andalusí era compleja y diversa, con una gran variedad de culturas, religiones y categorías sociales. La población musulmana se dividía en árabes, bereberes y muladíes. Entre los no musulmanes se encontraban los mozárabes y los judíos.

Restauración (1874-1923)

La Restauración, iniciada con el pronunciamiento de Martínez Campos en 1874 y finalizada con el golpe de Estado de Primo de Rivera en 1923, se caracterizó por la estabilidad política, aunque conseguida mediante la falsificación electoral. Se divide en dos etapas: desde 1874 hasta el Desastre del 98, y desde 1898 hasta 1923.

Paz de Zanjón (1878) y Guerra Hispano-Estadounidense (1898)

Tras la Paz de Zanjón, que puso fin a la Guerra de los Diez Años en Cuba, España perdió la oportunidad de abordar las demandas autonomistas cubanas. La intervención de Estados Unidos en 1898, tras el hundimiento del acorazado Maine en La Habana, condujo a la pérdida de los últimos territorios del Imperio español en América: Cuba, Puerto Rico y Filipinas.