La Segunda República Española (1931-1939)

El gobierno radical-cedista (1933-1935)

El gobierno radical-cedista (1933-1935) se caracterizó por la coalición de las fuerzas de derecha, liderada por los Radicales y la CEDA, que obtuvieron una victoria electoral favorecida por la disgregación de los partidos de izquierda y la abstención anarquista. Con el liderazgo de Lerroux, este periodo inicial estuvo marcado por tensiones y conflictividad.

La CEDA se consolidó como fuerza política dominante, especialmente ante el aumento de la conflictividad laboral. Simultáneamente, la Falange Española se fortaleció y se fusionó con las JONS, lideradas por Ramiro Ledesma, adoptando tácticas violentas para alcanzar sus objetivos políticos.

En respuesta a las tendencias más radicales, los republicanos se unieron en un nuevo partido: Izquierda Republicana, bajo la dirección de Manuel Azaña, mientras que la UGT y el PSOE se radicalizaron por temor al avance del fascismo.

El nuevo gobierno implementó reformas para revertir las medidas más revolucionarias del periodo anterior:

  • Se detuvo la Reforma Agraria y se devolvieron tierras a los expropiados.
  • Se incorporó al clero en la asignación de los presupuestos del Estado.
  • Se ralentizó la construcción de escuelas.
  • Se decretó una amnistía para los militares implicados en el golpe de 1932.
  • Se frenó la reforma militar y se nombró a militares sospechosos de ser contrarios a la república en puestos clave, como Mola, Franco y Goded.
  • Se suspendió el estatuto de autonomía para el País Vasco.

La Revolución de Asturias (1934)

La Revolución de Asturias, ocurrida en 1934, fue el resultado de una alianza obrera que buscaba combatir el avance del fascismo y promover la creación de una república federal socialista. Sin embargo, la CNT optó por no unirse a esta coalición. Ante esta situación, la CEDA exigió entrar en el gobierno con tres ministros, lo que fue interpretado por las izquierdas como un intento de romper la república de manera legal. Esta demanda fue vista como una señal por parte de los socialistas para iniciar un levantamiento.

La revolución tuvo éxito únicamente en Asturias, donde los comités obreros y la milicia del ejército rojo mantuvieron el control durante 15 días. Sin embargo, la intervención del ejército de Marruecos, liderada por el general Franco, provocó un enfrentamiento de proporciones similares a una guerra civil en la región, con un saldo de aproximadamente 4.000 muertos y cerca de 30.000 detenidos. En Barcelona, la insurrección tomó un carácter independentista, liderada por el presidente de la Generalitat, Companys, aunque fue rápidamente reprimida por el ejército, lo que resultó en la suspensión temporal de la autonomía de Cataluña.

Estos eventos provocaron una fuerte polarización política en España. Calvo Sotelo fundó el Bloque Nacional, que abogaba por instaurar una monarquía tradicional basada en una autoridad fuerte.

El Frente Popular y el camino hacia la Guerra Civil (1936)

El Frente Popular surgió como una coalición de toda la izquierda, que incluía a republicanos, socialistas, comunistas e incluso contaba con el apoyo de los anarquistas. Su programa se basaba en la amnistía para los implicados en la Revolución de Octubre, la extensión de la Reforma Agraria y la promulgación de Estatutos de Autonomía. Mientras tanto, la derecha no logró mantener la alianza de 1933 y se presentó dividida en las elecciones de febrero de 1936.

El Frente Popular ganó la mayoría en estas elecciones, con 4.8 millones de votos, aunque la derecha obtuvo un considerable respaldo, con 3.9 millones de votos. La derecha predominó en las zonas rurales, donde había una gran cantidad de pequeños y medianos propietarios, como en Navarra y Castilla y León, mientras que la izquierda se impuso en las grandes ciudades industriales y en regiones donde había una alta población de jornaleros, como Andalucía o Extremadura, además de en territorios partidarios de la autonomía, como Cataluña o el País Vasco.

Hasta el alzamiento de julio de 1936, la República estuvo gobernada por Azaña como presidente, sucediendo a Alcalá Zamora, y Casares Quiroga como jefe del gobierno. Sin embargo, los socialistas estaban divididos, ya que mientras un sector quería colaborar con los partidos republicanos, otro sector abogaba por una revolución en alianza con la CNT.

Durante estos meses previos al alzamiento, la tensión en las calles fue aumentando y los actos de violencia se hicieron más frecuentes por parte de ambos bandos, con asesinatos, incendios, huelgas y ocupaciones de tierras. Parte del ejército consideraba que la revolución era inminente y que el gobierno era incapaz de controlarla, lo que llevó a una conspiración para poner fin a la República.

El 12 de julio de 1936, el teniente republicano Del Castillo fue asesinado, seguido al día siguiente por el asesinato del diputado José Calvo Sotelo por parte de un grupo de guardias de asalto. Estos eventos sirvieron como pretexto para el alzamiento militar dirigido por los generales Mola, Sanjurjo, Franco y Goded, con el apoyo de una parte de la derecha. El 17, el ejército de Marruecos se sublevó, y aunque inicialmente se pensó que el alzamiento estaba condenado al fracaso, el 18 muchas regiones se unieron a la rebelión mientras otras permanecían fieles al gobierno de la República. La guerra civil era inevitable.

La Dictadura de Franco (1939-1975)

Etapas de la dictadura

1er Franquismo (1939-1959):

  • Influencia de militares germanófilos y ministros falangistas.
  • Promulgación de Leyes Fundamentales para aparentar un estado de derecho.
  • Intensa represión con miles de ejecuciones.
  • España se alinea con las potencias del Eje, pero no participa en la II Guerra Mundial.
  • Dificultades económicas y política de autarquía.
  • Transición hacia la liberalización económica a finales de los años 50 con la llegada de tecnócratas y el Plan de Estabilización Económica de 1959.

Apogeo del Franquismo (1959-1973):

  • Consolidación del régimen gracias al fin del aislamiento internacional y al crecimiento económico.
  • Promulgación de la Ley de Principios del Movimiento Nacional en 1958.
  • Creación de nuevas instituciones y reformas con cierta apertura, pero manteniendo el autoritarismo.
  • Búsqueda de la integración internacional, con la solicitud para unirse a la CEE en 1962.
  • Finalización del periodo con el escándalo MATESA y el proceso de Burgos, que revelaron la corrupción y la represión.

Crisis de la dictadura (1973-1975):

  • División interna del régimen entre partidarios de reformas e inmovilistas.
  • Asesinato de Carrero Blanco en 1973.
  • Intentos de reforma como el “espíritu del 12 de febrero”.
  • Aumento de la represión, aislamiento internacional y conflictividad social.
  • Muerte de Franco en noviembre de 1975.
  • Juan Carlos I asume la jefatura del Estado, iniciando la transición democrática.

Transformaciones sociales y económicas

Política económica

Autarquía (1939-1959):

  • Modelo económico autárquico inspirado en los regímenes fascistas.
  • Rígido intervencionismo estatal.
  • Aislamiento internacional, escasez y estancamiento económico.

Desarrollismo (1959-1973):

  • Reformas hacia una economía más liberal impulsadas por tecnócratas.
  • Plan de Estabilización de 1959 para liberalizar la economía, controlar la inflación y estabilizar precios y salarios.
  • Expansión económica basada en la industria, el turismo, las inversiones extranjeras y la emigración.
  • Crecimiento económico alto y constante entre 1961 y 1973.
  • Crisis del petróleo de 1973.

Transformaciones sociales

Años 40 y 50:

  • Atraso, pobreza y ruralización.
  • Sistema educativo con adoctrinamiento y censura.

Años 60:

  • Crecimiento económico que provoca cambios importantes.
  • Emigración del campo a las ciudades y concentración urbana.
  • Crecimiento de los sectores industrial y de servicios.
  • Apertura al exterior a través del turismo.
  • “Baby boom” que impulsa la expansión de la educación pública.
  • Acceso de la mujer al trabajo y a la educación superior.
  • Aumento del nivel de vida y acceso a bienes de consumo.
  • Aparición de la televisión.
  • Protesta estudiantil.

Etapa final del Franquismo:

  • Ruptura entre la cultura y los valores del régimen.
  • Elecciones de 1977 que reflejan un rechazo masivo al franquismo.

Oposición al régimen franquista

Oposición en el exilio:

  • Gobierno republicano en el exilio.
  • Gobiernos autonómicos vasco y catalán en el exilio.

Resistencia interna:

  • Guerrillas internas (maquis) lideradas por el PCE y la CNT en los años 40.
  • Acciones pacíficas de masas (huelgas y protestas).

Crecimiento de la oposición en los años 60:

  • Desarrollo del movimiento obrero con sindicatos clandestinos como CCOO.
  • Movimiento estudiantil.
  • Sectores de la Iglesia Católica próximos a la izquierda.
  • Oposición política moderada.
  • Grupos nacionalistas como ETA.

Oposición en la etapa final del franquismo:

  • Militares en torno a la UMD.
  • Distanciamiento de la Iglesia del régimen.
  • Grupos terroristas de extrema izquierda como el FRAP y el GRAPO.

Reclamaciones de la oposición:

  • Reconciliación nacional.
  • Amnistía política.
  • Régimen democrático descentralizado.

Cultura durante el franquismo

Exilio de intelectuales:

  • Artistas, filósofos, científicos e historiadores.

Cultura de masas promovida por el régimen:

  • Cine, literatura popular, toros y fútbol.

Cultura no oficial:

  • Intelectuales como Luis Rosales y Torrente Ballester.
  • Nuevas vanguardias en la pintura (arte abstracto y figurativo).
  • Artistas como Chillida, Saura y Tàpies.

La Transición Española (1975-1982) y la Consolidación de la Democracia

La Constitución de 1978

La Constitución de 1978 fue un hito crucial en el proceso de democratización de España. Aprobada por un amplio margen en referéndum, definió a España como un Estado social y democrático de derecho, estableciendo la monarquía parlamentaria y la separación de poderes. El Rey asumió funciones como jefe de Estado, representante de España y sancionador de leyes, mientras que el poder legislativo quedó en manos de las Cortes Generales, bicamerales y elegidas por sufragio universal. El Congreso de los Diputados elabora leyes y controla al ejecutivo, mientras que el Senado refrenda las leyes sin capacidad de bloqueo.

El gobierno del PSOE (1982-1996)

Durante el período en que el PSOE, bajo la dirección de Felipe González, estuvo en el poder entre 1982 y 1996, España experimentó una serie de reformas significativas tanto en política interior como exterior.

Política interior:

  • Combate contra ETA y disminución de los atentados gracias a la colaboración con Francia y al Pacto de Ajuria Enea de 1988.
  • Polémica de la guerra sucia de los GAL.
  • Descentralización con la aprobación de estatutos de autonomía.
  • Modernización del Ejército para prevenir golpes de Estado.
  • Promoción de leyes de educación, sanidad, desempleo y pensiones.

Política exterior:

  • Ratificación de la permanencia en la OTAN.
  • Integración en la Comunidad Económica Europea (CEE) en 1986.
  • Firma del Tratado de Maastricht en 1992.
  • Participación en la Guerra del Golfo.
  • Organización de eventos como la Expo de Sevilla y los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992.

Economía:

  • Medidas de ajuste en 1983.
  • Reconversión industrial y privatizaciones de empresas públicas.
  • Crecimiento económico a partir de 1985.
  • Crisis económica en 1992.
  • Programas de promoción del empleo y flexibilización del mercado laboral.
  • Huelga general en diciembre de 1988.

Sociedad:

  • Despenalización del aborto en 1985.
  • Sistema nacional de salud gratuito y universal.
  • Pactos de Toledo para sostener el sistema de pensiones en 1995.
  • Ley de Reforma Universitaria en 1983.
  • Ampliación de la enseñanza obligatoria hasta los 16 años en 1985.
  • Reforma del sistema educativo mediante la LOGSE.

Legislatura de 1993:

  • Crisis económica y casos de corrupción.
  • Retirada del apoyo parlamentario por parte de CiU en 1995.
  • Elecciones anticipadas ganadas por el PP liderado por Aznar.

El gobierno del PP (1996-2004)

El PP (refundado de AP) de Aznar gobernó durante dos legislaturas (1996-2004).

Política interior:

  • Lucha contra ETA.
  • Rechazo del Pacto de Lizarra.

Política exterior:

  • Alineamiento con Estados Unidos.
  • Participación en la II Guerra del Golfo.

Economía:

  • Políticas liberales.
  • Reducción del gasto público, privatizaciones y disminución de impuestos.
  • Crecimiento del PIB, la renta per cápita y el empleo.
  • Burbuja inmobiliaria.

Sociedad:

  • Reformas en la educación.
  • Acuerdo para garantizar las pensiones.
  • Reforma del sistema de protección del desempleo.
  • Ruptura del diálogo social y huelga general en 2002.

Elecciones de 2004:

  • Victoria del PSOE por mayoría simple.
  • Desgaste del PP por el hundimiento del Prestige, el trasvase del Ebro, la tragedia del Yak-42 y el apoyo a la II Guerra del Golfo.
  • Atentado terrorista del 11 de marzo de 2004 en Madrid.