La dictadura franquista en España

La larga dictadura que se instauró en España tras la finalización de la Guerra Civil y hasta el final de la década de los años cincuenta viene marcada por tres apartados que son los siguientes:

  • La política interior desplegada por el Régimen nacido de la Guerra Civil.
  • La autarquía económica, propuesta económica marcada por una etapa de carencias y necesidades de la sociedad española.
  • El aislamiento al que se someterá el Régimen por parte de las potencias vencedoras de la Segunda Guerra Mundial.


Política interior del Régimen

En lo político, el primer objetivo es eliminar la obra de la II República. Su constitución quedó abolida y se estableció un rígido control policial e ideológico de la sociedad española, donde se reprimía cualquier crítica al nuevo régimen o la defensa de los principios democráticos. Se llevó a cabo una progresiva concentración del poder: en 1939, Franco controlaba en su persona la Jefatura del Estado, la Jefatura del Gobierno, la del Partido único, la de las Fuerzas Armadas y el Poder Legislativo.

Los primeros años fueron de una represión especialmente dura sobre los vencidos. A partir de 1942 comenzaron a crearse las bases legales del Franquismo. Se constituyeron en ese año las Cortes Generales, aunque Franco seguía teniendo la potestad para dictar leyes. En 1945 se promulgaron el Fuero de los Españoles y la Ley de Referéndum Nacional y, en 1947, el Fuero del Trabajo. La Ley de Sucesión se promulgó en 1947 y determinaba que España era un reino, al mismo tiempo que realzaba el carácter vitalicio de la jefatura de Franco, quien además tenía la potestad de elegir a la persona que le sucedería.


La autarquía económica

En el ámbito económico, España vivió un periodo de miseria y atraso, que amplió las diferencias existentes con los países de Europa Occidental al quedar España fuera del Plan Marshall y de las ayudas de EE.UU. para la reconstrucción de la economía europea tras la finalización de la guerra mundial. La nueva política económica se caracterizó por la autarquía y el estatalismo:

  • Autarquía: porque Franco deseaba aumentar la producción de la economía española y reducir las importaciones para crear empleo.
  • Estatalismo: porque los sectores económicos importantes pasaron a manos del Estado.

En esta etapa, los alimentos básicos estuvieron racionados, favoreciendo la formación de un mercado negro, el famoso Estraperlo. A esto se unió la falta de capital y de tecnología, lo que lastró el desarrollo industrial, dejándola atrasada y limitada.


Aislamiento internacional

No obstante, también hay que tener en cuenta que, en cierto modo, la autarquía también estuvo impuesta por el aislamiento al que se sometió al país desde el extranjero. En estos años, concretamente en 1946, tras finalizar la Guerra Mundial, la ONU emitió una resolución que condenaba el régimen de Franco y proponía que los embajadores acreditados en Madrid abandonaran el país. La resolución de Naciones Unidas realzaba el carácter fascista del régimen y recomendaba su expulsión de todos los organismos internacionales.

Esta situación de aislacionismo hizo que desde el régimen franquista se intentara cambiar la imagen para hacerlo más presentable. De esta manera, se introdujeron pequeños cambios como la amnistía parcial para los detenidos políticos y la promulgación del llamado Fuero de los Españoles, que pretendía ser una declaración de los derechos cívicos, aunque eran tan limitados que no podían ser homologados como las libertades de cualquier país democrático.

Pero lo más importante para este cambio de imagen fue el nombramiento de un nuevo Gobierno, disminuyendo la presencia falangista. Estas pequeñas modificaciones se producen en un contexto internacional de polarización política. La Guerra Fría y el miedo al comunismo del bloque occidental hicieron que se cambiara el modo de ver al régimen, que ahora pasa a ser un aliado anticomunista. Esta situación facilitó la firma de acuerdos con los EE.UU. y los acuerdos con la Santa Sede, que marcaron un punto de inflexión, ya que España rompió su aislamiento y comenzó a recibir ayudas.


Mejoras sociales y económicas

En el terreno social, se procuró mejorar la situación de las clases trabajadoras con la introducción de los seguros sociales y estabilidad en el empleo, aunque se les siguieron negando las libertades sindicales y reprimiendo cualquier movimiento reivindicativo, del mismo modo que se les negaba a todos los españoles las libertades políticas.

Durante esta época, la producción mejoró con respecto al decenio anterior, superando la miseria de la década de los cuarenta. Sin embargo, existían importantes lagunas que provocaron la bancarrota y causaron un giro radical en la política franquista para superar la inflación y el déficit comercial con el exterior. Para combatirlos, se llevó a cabo una de las mayores novedades del Régimen: el Plan de Estabilización de 1959. Con él se inició una política económica encaminada a la apertura exterior y a la modernización que caracterizará al país en la década de los años sesenta.