Arte Etrusco: Arquitectura, Pintura y Escultura
El Arte Etrusco
Antecedentes
En el siglo VIII a. C., Italia no era un estado unificado, sino un mosaico de pueblos. En la zona norte, entre los ríos Po, Arno y Tíber, vivían los etruscos, bajo un sistema monárquico. En la zona de la actual Roma, existía un conjunto de aldeas de pastores situadas alrededor de una colina. Los etruscos conquistaron estos pueblos y los unieron, creando así la ciudad de Roma, amurallada y bajo la monarquía etrusca.
La cultura etrusca se desarrolló entre el 700 y el 90 a. C., alcanzando su apogeo en los siglos VI y V a. C. Tras la conquista romana del imperio etrusco, estos se integraron como una clase social (augures) en la base de la sociedad.
Religión
La religión etrusca era politeísta, con dioses agrupados en tríadas. La más importante era la Tríada Capitolina, formada por Tinia (antecedente de Zeus y equivalente a Júpiter), Uni (Juno) y Menrva (Minerva). Por esta razón, la cella de los templos se dividía en tres partes. Practicaban sacrificios humanos, que posteriormente dieron origen a las luchas de gladiadores. Los etruscos creían que la muerte era una continuación agradable de la vida.
Urbanismo y Arquitectura
Las ciudades etruscas (Volterra, Cerveteri…) se situaban en zonas elevadas, con monumentales murallas de ladrillo. En el interior, una zona especialmente amurallada (ciudadela) albergaba la ciudad. Contaban con cuatro puertas, una en cada punto cardinal, que conectaban con las calzadas. Además del plano en damero, dos vías principales se destacaban: el cardo (norte-sur) y el decumanus (oeste-este). En su intersección se ubicaba el foro. Las ciudades también contaban con cloacas. Para las casas, utilizaban madera y, posteriormente, adobe; para las murallas, ladrillo y piedra. En cuanto al estilo arquitectónico, en casas y templos empleaban el arco de medio punto (especialmente en murallas), la bóveda de cañón y la falsa cúpula.
Tipos de Edificio
Casa
Antecedente de la domus romana, se accedía a través del atrio (pórtico). Las habitaciones se organizaban alrededor de un patio descubierto y porticado, con columnas de orden toscano. Estas columnas, derivadas del orden dórico, presentaban una basa compuesta por un paralelepípedo y un toro (moldura convexa) sobre el fuste, sin éntasis. El tejado inclinado permitía que el agua de lluvia se recogiera en un estanque central en el patio, llamado impluvium. La habitación principal, el tablinum (salón), se situaba al fondo, y detrás de este, el jardín, como espacio más íntimo. También existían las ínsulas, bloques de edificios.
Templos
Antecedentes de los templos romanos, de arquitectura arquitrabada. Inicialmente construidos en madera, luego en madera y adobe, y posteriormente en piedra. Con una notable influencia griega, presentaban planta rectangular sobre una plataforma con escalinatas en uno de los lados cortos. La pronaos, muy alargada, contaba con columnas. La naos se dividía en tres partes y carecía de opistódomos. El tejado a dos aguas tenía una cornisa muy saliente y acróteras. El Panteón, un templo dedicado a todos los dioses, combina la planta circular con la rectangular, cubierto por una cúpula semiesférica con un óculo central para la entrada de luz. Combina arco y dintel, alternando espacios cóncavos y adintelados en su interior, y utiliza casetones para aligerar el peso.
Tumbas
Con una organización interior similar a la de las casas, en el siglo VII a. C. las tumbas etruscas adoptaban la forma de túmulo. También existían tumbas similares a hipogeos. A partir del siglo VI a. C., se ubicaban en la prolongación de las calles, excavadas en las paredes como nichos. En ellas se depositaban comida, bebida y joyas para la vida del difunto en el más allá. Decoradas y organizadas como ciudades, formaban la necrópolis o “ciudad de los muertos”, situada en una loma visible desde la ciudad.
Pintura Etrusca
En la pintura etrusca, el dibujo predomina sobre el color. Con influencias griegas y egipcias, de estas últimas adoptan la convención de representar la piel del hombre más oscura que la de la mujer. La pintura etrusca está principalmente ligada a las tumbas.
Escultura Etrusca
Ligada a los templos, la escultura etrusca muestra una fuerte influencia griega. Utilizaban materiales como terracota, piedra arenisca o volcánica, e incluso bronce. Realizaban representaciones funerarias en grandes vasijas que contenían los órganos del difunto (influencia egipcia). Un ejemplo es el Apolo de Vulca (500 a. C.), una acrótera jónica de bronce. Las obras no se firmaban, ya que los autores eran considerados funcionarios. De la misma época son los sepulcros de terracota policromada, que representan a los difuntos. Del siglo V a. C. destacan la Loba Capitolina, en bronce, y la Quimera de Arezzo, también en bronce y de gran realismo. Ambas muestran una clara influencia oriental.