La Segunda República (1931-1936) y la Guerra Civil

Tras el fracaso de la dictadura de Primo de Rivera, al rey Alfonso XIII no le quedó más remedio que convocar elecciones municipales para el 14 de abril de 1931. El triunfo de los partidos republicanos dejó claro que los españoles querían un cambio radical. Alfonso XIII así lo comprendió y abandonó España. Un gobierno provisional formado por partidos republicanos proclamó ese mismo día la Segunda República y convocó elecciones generales para elegir unas Cortes que elaboraran una nueva Constitución. La Segunda República despertó la ilusión de que España se podría modernizar, pero también el temor de algunos españoles que se resistían a perder privilegios. En los años siguientes, España se fue dividiendo en dos bandos que al final se enfrentaron en una guerra civil.

Partidos políticos de la época

  • Extrema derecha:
    • Renovación Española (partidarios de la vuelta a la monarquía): Calvo Sotelo
    • Falange Española (ideología similar al fascismo): José Antonio Primo de Rivera
  • Derecha republicana:
    • Derecha Liberal Republicana: Niceto Alcalá-Zamora
    • CEDA (partido que apoyaba a la Iglesia católica): Gil Robles
  • Centro:
    • Partido Radical: Alejandro Lerroux
  • Izquierda:
    • Izquierda Republicana: Manuel Azaña
    • PSOE con dos líderes: Indalecio Prieto (centrista) y Largo Caballero (izquierdista)
    • Esquerra Republicana (nacionalistas catalanes): Lluís Companys
  • Extrema izquierda:
    • Partido Comunista de España
    • Anarquistas

El Bienio Reformista (junio de 1931 – noviembre de 1933)

Niceto Alcalá-Zamora, un republicano moderado, fue elegido como presidente de la República. Las Cortes redactaron en 1931 una nueva Constitución que se aprobaría ese mismo año. Se formó un gobierno de coalición de republicanos y socialistas, presidido por Manuel Azaña, que emprendió una decidida política de reformas modernizadoras:

  • Reforma agraria: Se intentó solucionar el problema de la exagerada desigualdad en la distribución de la propiedad de las tierras. Se comenzó a expropiar tierras a los ricos terratenientes (con indemnización) para repartirlas.
  • Reforma educativa: Se emprendió una campaña de construcción de escuelas públicas y educación popular.
  • Reforma militar: Se tomaron medidas para reducir y modernizar el ejército, que pusieron a gran parte de los mandos militares en contra.
  • Reformas laborales: Que mejoraban las condiciones de los trabajadores. Los patronos se opusieron a ellas.

El primer gobierno republicano tuvo que enfrentarse a graves problemas, sufrió un intento de golpe de Estado y los socialistas decidieron abandonar la coalición.

Constitución de 1931

  • España quedaba organizada como una república democrática de trabajadores.
  • Parlamento de una sola cámara: el Congreso de los Diputados.
  • Se admitió la posibilidad de regímenes autonómicos para Cataluña, País Vasco y Galicia.
  • Se admitió el divorcio.
  • Amplia declaración de derechos y libertades.
  • Separación de la Iglesia católica y el Estado.

El Bienio Derechista (noviembre de 1933 – febrero de 1936)

En las elecciones de 1933, en las que pudieron votar por primera vez las mujeres, se impusieron los partidos de derecha y de centro. Se formó un gobierno centrista presidido por Alejandro Lerroux. Se anularon todas las reformas de la etapa anterior. El acontecimiento más importante de esta etapa fue la huelga general revolucionaria. En Asturias se produjeron los enfrentamientos más cruentos entre los mineros y el ejército. La coalición entre el Partido Radical y los partidos de derechas se vio afectada por escándalos de corrupción, y hubo que convocar elecciones anticipadas.

El Frente Popular (febrero de 1936 – 18 de julio de 1936)

En las elecciones del 16 de febrero de 1936, toda la izquierda se unió en el Frente Popular, que ganó las elecciones. Se concedió amnistía para los presos políticos y se aceleraron las reformas de la primera etapa republicana, pero la derecha se opuso. Los militares aceleraron los preparativos para un golpe de Estado. El 17 de julio de 1936, un sector del ejército dio un golpe de Estado contra el gobierno del Frente Popular. La reacción del pueblo en defensa de la República hizo que el golpe se convirtiera en una guerra civil que duró tres años.

La Guerra Civil Española (1936-1939)

1ª Etapa: Verano de 1936, España dividida en dos zonas

La sublevación militar encabezada por Franco empezó en Canarias y en las ciudades españolas de Marruecos. El 18 de julio se extendió a la península con resultados desiguales según las regiones. Allí donde los militares sublevados tomaron el mando se desencadenó una fuerte represión contra los republicanos e izquierdistas (“rojos”), como el asesinato de Federico García Lorca. La Sociedad de Naciones aprobó la no intervención, lo que significaba que los países democráticos no ayudarían a la República. Solo la URSS ayudó con armamento. Sin embargo, la República fue capaz de despertar la solidaridad de miles de voluntarios de países democráticos que formaron las Brigadas Internacionales y vinieron a España a luchar contra el fascismo. Desde el primer momento, Franco contó con la ayuda de Hitler y Mussolini.

2ª Etapa: Agosto – octubre / El avance franquista

El ejército de Marruecos cruzó hacia la península y avanzó rápidamente por Andalucía Occidental y Extremadura en dirección a Madrid.

3ª Etapa: Noviembre de 1936 – marzo de 1937 / El éxito republicano

El gobierno de la República se reorganizó, incluyendo a todos los partidos de izquierda y nacionalistas vascos y catalanes. El socialista Largo Caballero fue su presidente. La moral del ejército republicano aumentó y en los meses siguientes derrotó al bando nacionalista en las batallas del Jarama y Guadalajara. Madrid se resistió hasta el final de la guerra. Franco, al no poder conquistarla, dirigió sus esfuerzos a conquistar el norte de España, desde Asturias a Bilbao. En abril de 1937 se produjo el bombardeo de Guernica.

4ª Etapa: Mayo de 1937 – abril de 1939 / La derrota de la República

El ejército franquista tomó de nuevo la iniciativa. En marzo de 1938 avanzó por Teruel y consiguió aislar a Cataluña del resto de la España republicana, iniciándose la decisiva Batalla del Ebro. En enero de 1939, Franco avanzó por Cataluña y Barcelona cayó sin apenas resistencia. Miles de españoles huyeron a Francia. Madrid cayó el 29 de marzo de 1939.