Literatura Española: Generaciones del 98 y 27, Vanguardias y Autores Destacados
Generación del 98
En una serie de artículos publicados en 1913, propone Azorín esta denominación para un amplio grupo de escritores en los que se encuentran Unamuno, Baroja, Valle-Inclán, Ramiro de Maeztu, Jacinto Benavente, Rubén Darío y él mismo.
Rasgos Generacionales
- La cuestión religiosa: La mayoría de estos escritores no son creyentes en sentido ortodoxo.
- El tema de España: Constituye la columna vertebral del grupo. A todos ellos les duele España, según la frase de Unamuno, aunque la amen profundamente.
- Crítica de la sociedad española de la época: En especial a los gobernantes, al tiempo que admiran la belleza de las tierras y los pueblos, cuyos paisajes se contemplan con emoción.
- Atención especial merece Castilla: Protagonista de innumerables poemarios, ensayos, novelas y libros de viajes.
- Visión crítica de la historia nacional: En la que encuentran el origen de la postración presente. Frente a ella, reivindican el concepto de intrahistoria.
- Lo mejor del espíritu se encuentra también en la tradición medieval.
- Distanciamiento con respecto a la generación realista y entronque con los maestros del irracionalismo y subjetivismo europeos, en especial algunos filósofos.
- Frente al poderoso artefacto verbal modernista, los del 98 cultivan un lenguaje natural y antirretórico, con predilección por las palabras apegadas a la tierra.
Integrantes de la Generación
Unamuno, Baroja, Ramón del Valle-Inclán, Antonio Machado, Azorín, Jacinto Benavente, Ramiro de Maeztu, Ramón Menéndez Pidal.
Antonio Machado
Vida y Personalidad
El sevillano Machado (1875-1939) es uno de los escasos poetas capaces de emocionar incluso a los poco familiarizados con la poesía. Educado en la Institución Libre de Enseñanza, pasó luego una larga temporada en París. En 1907 obtuvo la cátedra de francés en el Instituto de Soria; allí se casa con Leonor. La muerte de su mujer en 1912 lo impulsa a trasladarse a Baeza y luego a Segovia. A comienzos de los años 30, participa en actos a favor de la República. En enero de 1939 pasa al pueblecito francés de Colliure, donde falleció el 22 de febrero.
Trayectoria Poética
Aparece marcada por el itinerario del yo al nosotros.
- Soledades, galerías y otros poemas: Su primer poemario es una meditación sobre el paso del tiempo, la memoria, la juventud y la infancia perdidas, los sueños o el amor ausente, realizada por un yo poético taciturno y solitario que se expresa en un tono melancólico. Machado sigue la estética del modernismo simbolista.
- Campos de Castilla: Es el libro más famoso del autor.
- El paisaje castellano, soriano, descrito con imágenes memorables.
- El amor y el dolor por la pérdida de su esposa, cuyo recuerdo se asocia en numerosas ocasiones al paisaje.
- El interés en la generación de España.
- Nuevas canciones: La personalidad del poeta parece diluirse para expresar saberes objetivos en composiciones muy breves, de estructura cercana a la copla popular.
- Poesía de guerra: Durante el conflicto bélico, Machado escribe poemas de exaltación patriótica republicana cuya calidad no pasa de discreta, pero que marcan la definitiva conversación del poeta a la causa de la justicia y la solidaridad.
- Estilo: Expresa sus opiniones sobre variadas cuestiones del arte y de la vida. Busca dar testimonio a través de la poesía del acontecer de su tiempo y de su propia vida con la máxima claridad expresiva.
Movimientos de Vanguardia
Bajo este rótulo se engloban una serie de movimientos en toda Europa que reaccionan contra el subjetivismo romántico y el realismo tradicional.
- Futurismo: Propugnó el olvido de las cuestiones sentimentales, individuales y románticas para admirar sin reservas los avances técnicos del nuevo siglo: la velocidad, las máquinas, la industria, los deportes.
- Cubismo: En origen fue un movimiento pictórico que buscaba la descomposición de la imagen tradicional en diversos ángulos y perspectivas, para que el autor y el espectador la recrearan libremente. Su adaptador literario fue el poeta francés Guillaume Apollinaire, inventor de los caligramas, una poesía visual cuyos versos tratan de reproducir la realidad expresada mediante la tipografía.
- Dadaísmo: El nombre “dadá” alude al balbuceo de los niños pequeños, pues sus integrantes se proponían romper con el arte y la literatura de la corrompida sociedad burguesa, para recuperar la falta de lógica y la inocencia propias de la primera infancia.
- Surrealismo: Ofreció bastante más constancia que los movimientos anteriores. Lo dio a conocer el francés André Breton. El escritor intentaría liberar al individuo mediante su creación de las ataduras racionales, sociales, morales y estéticas que lo condicionan, impidiéndole manifestarse de forma espontánea. En el caso de la literatura se utiliza la escritura automática.
Generación del 27
Los poetas de la Generación del 27 crearon la más hermosa poesía de Europa, algo que apenas admite discusión, cuando la riquísima y variada creación de estos autores se compara con la de otros grupos poéticos de la literatura occidental que publicaron en el periodo de entreguerras. La denominación del grupo se debe a un acontecimiento generacional: casi todos sus miembros participaron activamente en los actos celebrados ese año con motivo del tercer centenario de la muerte de Góngora.
Rasgos Generacionales
- Lugar de encuentro en la Residencia de Estudiantes de Madrid, donde tuvieron ocasión de impregnarse del ambiente liberal, culto y europeo que allí se respiraba.
- Amplia formación literaria, a diferencia del autodidactismo. Luis Cernuda, Gerardo Diego, Dámaso Alonso, fueron profesores de literatura dentro o fuera de España y junto a su obra poética, publicaron también importantes ensayos de crítica literaria.
- Sólida amistad personal, lo que les llevó a colaborar en numerosas revistas y empresas culturales.
- Veneración por la figura de Juan Ramón Jiménez, de quien admiraban el ideal de la poesía pura, la profundidad de sus imágenes y su denodado esfuerzo por expresar las sensaciones.
Influencias Literarias
- Tradición literaria española:
- Los clásicos Siglos de Oro: Del poeta cordobés admiraron su capacidad metafórica, y sobre todo la concepción del lenguaje poético como algo diferente al lenguaje común. También tomaron de Quevedo el dominio del concepto. Y de Lope el amor por la poesía popular.
- Se declararon herederos también de la tradición poética cercana, en especial de Bécquer.
- Importantísima fue la influencia del Romancero y la lírica tradicional castellana.
- Movimientos de vanguardia: La gran importancia concedida a la imagen y a la metáfora proceden del creacionismo y del ultraísmo. Hubo también una tendencia hacia la poesía pura. Más relevante fue la influencia del surrealismo.
- Poesía impura: En 1934 llegó Pablo Neruda a España y pronto funda la revista Caballo verde para la poesía, en cuyo primer número publica un manifiesto en favor de una poesía “impura”.
- La Guerra Civil: Supuso la disgregación del grupo: Lorca fue asesinado. Unos miembros partieron hacia el exilio. Otros se quedaron en España. Cada uno siguió entonces su propio camino poético.
- Clasificación de los autores: Rafael Alberti, García Lorca, Vicente Aleixandre, Luis Cernuda, Pedro Salinas, Jorge Guillén, Gerardo Diego, Dámaso Alonso.
Pedro Salinas
Forma con Jorge Guillén el núcleo más intelectual de la Generación del 27. Ambos fueron catedráticos de universidad en España y en prestigiosas universidades de EE. UU. Salinas destaca como poeta del amor. Su estilo viene marcado por la sencilla apariencia que oculta un laborioso proceso de meditación y depuración del sentimiento.
Federico García Lorca
La calidad de su producción literaria, así como las dramáticas circunstancias de su muerte al comienzo de la Guerra Civil, han convertido a Lorca en el escritor español contemporáneo más conocido fuera de nuestras fronteras. En sus versos se mezclan elementos populares andaluces, el uso de la metáfora y la experiencia surrealista. La vertiente neopopular se manifestó con clamoroso éxito en Romancero gitano. En Poeta en Nueva York, el irracionalismo surrealista contribuye a crear una imagen inquietante del mundo moderno. Su Llanto por la muerte de Ignacio Sánchez Mejías es quizá la más impresionante elegía de la literatura española.
Miguel Hernández
Joven pastor de Orihuela, autodidacta, cuya irreprimible vocación poética lo llevó en 1931 a Madrid, donde fue apadrinado por los miembros de la Generación del 27. Con ellos compartió el gusto por lo popular, el uso de las formas clásicas, la admiración hacia Góngora. La creciente preocupación social culminó con su activa participación con el ejército republicano durante la Guerra Civil. Como muestra de su talento, un soneto de El rayo que no cesa y la impresionante Elegía a Ramón Sijé.
Luis Cernuda
- Autor: Luis Cernuda es probablemente, de todos los miembros de la Generación del 27, el más cercano a la sensibilidad poética actual. Y ello es así porque en los versos del poeta sevillano encontramos rasgos que se corresponden con las preocupaciones del hombre contemporáneo: la protesta social, la rebeldía frente a las convenciones burguesas, la reivindicación de la libertad y la dignidad del individuo; la dificultad para vivir plenamente el amor, originada por su nunca disimulada condición de homosexual; la nostalgia de su infancia y juventud en Sevilla; la angustia por el paso del tiempo y la inevitable llegada de la muerte.
Ramón del Valle-Inclán
- A su primera fase corresponde la de las Sonatas, cuatro novelas que se presentan como las memorias galantes del Marqués de Bradomín, que suponen la culminación de la prosa modernista en España.
- Al ciclo de las Comedias bárbaras pertenece la trilogía La guerra carlista, donde se percibe ya un mayor interés del autor por cuestiones políticas: en este caso, la exaltación del mundo religioso tradicional de los carlistas frente al progreso liberalizador representado por las tropas isabelinas.
- A los dominios del esperpento pertenece la cumbre de su creación literaria: Tirano Banderas, grotesca aproximación a una república hispanoamericana gobernada por un tirano.
Miguel de Unamuno
- Ideas: Buena parte de las preocupaciones del autor aparecen en esta historia de un sacerdote de un pueblo zamorano que ha perdido sus convicciones religiosas, pero finge mantenerlas para preservar la tranquilidad de sus parroquianos, llegando a alcanzar fama de santo. La fuerza del conflicto central, la duda existencial, el silencio de Dios o la pérdida de la fe, favorece la vigencia del libro, en el que aparece también una amorosa y muy actual atención al paisaje, dispuesto con gran sencillez compositiva.