El Giro Copernicano en la Filosofía de Kant

La Revolución en la Teoría del Conocimiento

Immanuel Kant denominó “giro copernicano” al cambio radical que propuso en su concepción del proceso del conocimiento. Según Kant, el conocimiento es una interacción entre el sujeto y el mundo, un proceso en el que el ser humano capta el mundo, percibe la realidad y la explica. Sin embargo, conocer no implica captar el objeto tal como es en sí mismo, ya que este nos resulta inaccesible. Percibimos la realidad a través de los sentidos, filtrada por las categorías del espacio y el tiempo. Además, interpretamos y explicamos la realidad al relacionar lo que percibimos mediante la causalidad, una categoría que reside en nosotros y no en las cosas mismas.

El conocimiento, por lo tanto, es una intersección entre el sujeto y el objeto, donde el objeto queda afectado por el espacio, el tiempo y nuestras estructuras mentales. Kant comparó su enfoque con el giro copernicano de Nicolás Copérnico, quien revolucionó la astronomía al proponer que la Tierra gira alrededor del Sol, y no al revés. De manera similar, Kant argumentó que no es posible conocer las cosas tal como son en sí mismas, porque inevitablemente influimos en ellas al conocerlas, moldeándolas según nuestras estructuras mentales.

En la “Crítica de la Razón Pura“, Kant describe su filosofía como un “giro copernicano” en el ámbito de la epistemología.

Imperativos Categóricos e Hipotéticos en la Ética Kantiana

La Distinción entre Actuar por Deber y por Interés

Kant utilizó el término “imperativo” para referirse a los tipos de actos y los motivos que los impulsan. Los clasificó en imperativos categóricos e hipotéticos.

  • Imperativos hipotéticos: Son aquellos que el individuo realiza por interés y conveniencia personal.
  • Imperativos categóricos: Son aquellos que el individuo realiza por deber, no por interés propio.

Para Kant, el imperativo categórico era el correcto, ya que se basa en la conciencia y la buena voluntad. Consideraba que este es el tipo de imperativo que un buen ciudadano debería seguir, ya que beneficia al resto de los individuos. En contraste, el imperativo hipotético era visto como egoísta y contrario al deber moral.

La Libertad Jurídica y el Contrato Social

Fundamentos del Estado Civil y la Convivencia

Para comprender la libertad jurídica en el pensamiento de Kant, es necesario partir de la libertad moral. Kant consideraba la libertad moral como algo inherente al ser humano, una ley moral interna que nos dicta lo que debemos hacer y establece una obligación. Kant postuló la libertad como un principio fundamental de la razón. La libertad jurídica, por otro lado, es una característica esencial del ciudadano en un Estado. Se refiere a la libertad legal de no obedecer ninguna ley a la que no hayamos dado nuestro consentimiento previo.

El contrato social, según Kant, es un acuerdo mediante el cual las personas deciden crear el Estado civil para salir del estado de naturaleza, un estado hipotético previo a la sociedad organizada. Para Kant, la primera obligación moral del ser humano fue buscar la paz, la justicia y la libertad, que solo son posibles en un Estado civil. Esta idea también fue desarrollada por filósofos como Hobbes y Rousseau.

El Derecho Cosmopolita y la Paz Perpetua

Hacia una Comunidad Humana Universal

El derecho cosmopolita es un conjunto de leyes que deben regular las relaciones entre los Estados y los ciudadanos de otros Estados, considerándolos como miembros de una comunidad humana mundial. Según Kant, el derecho cosmopolita debe limitarse a las condiciones de la hospitalidad universal. Esto significa que toda persona tiene derecho a visitar cualquier lugar del mundo sin ser maltratada por ser extranjera. Kant sostenía que podemos oponernos a que un extranjero tome posesión de nuestro territorio, pero nunca a que lo visite. La Tierra, en este sentido, pertenece a todos, y esta es la base de la ciudadanía universal. Este derecho es un requisito fundamental para lograr la paz perpetua.

La Ilusión Trascendental y los Límites del Conocimiento

Las Ideas de la Razón Pura: Mundo, Alma y Dios

La razón, según Kant, sirve para universalizar y unificar el saber humano. Las ideas con las que opera la razón son ideas que engloban toda la experiencia posible:

  • Mundo: La totalidad de la experiencia externa.
  • Alma: La totalidad de la experiencia interna.
  • Dios: La unificación de ambas experiencias.

Estas ideas de la razón pura expresan el ideal de encontrar principios cada vez más generales que unifiquen el saber humano. Sin embargo, estas ideas no tienen una base empírica, son puros entes pensantes, y no tienen valor en el mundo de los fenómenos. Kant denominó a este fenómeno “ilusión trascendental“.

Racionalismo y Empirismo: Dos Perspectivas Epistemológicas

El Debate sobre el Origen del Conocimiento

El racionalismo y el empirismo son dos posturas epistemológicas que abordan el problema del conocimiento del mundo. Ambas reconocen que conocemos el mundo a través de los sentidos y la razón, pero difieren en el énfasis que otorgan a cada uno.

Los empiristas sostienen que no existen las ideas innatas y que la verdad depende de la experiencia, siendo por lo tanto subjetiva y variable. Kant, por otro lado, cree que el conocimiento comienza con los sentidos, pero también deduce que el conocimiento es universal y subjetivo.

En el ámbito de la moral, el empirismo se basa en los sentimientos, que son subjetivos y particulares, lo que lleva a la conclusión de que las normas morales también lo son. Kant, en cambio, fundamenta las normas morales en el ejercicio de la razón, considerándolas universales.