Evaluación del Dolor y Trastornos Quirúrgicos en la Infancia

Es fundamental evaluar el dolor, su relación con el movimiento o la administración de alimentos, así como la frecuencia y duración del mismo. También es importante considerar la eliminación digestiva, los vómitos, las diarreas, el dolor abdominal, la retención de alimentos, el tipo de retención urinaria y alteraciones similares en los últimos días. Se debe conocer el tipo de fármacos administrados y las alergias conocidas. En niños pequeños, es especialmente difícil localizar el dolor, y solo los mayores de 6 años aportan información precisa. Los niños más pequeños suelen indicar la zona periumbilical para referirse a su dolor.

Hernia Inguinal

La hernia inguinal es la salida del contenido abdominal a través de un orificio anatómicamente débil de la pared abdominal. La causa se relaciona con el aumento de la presión dentro de la cavidad abdominal, por la que se desliza el contenido intestinal hacia la bolsa del testículo en los varones. En niñas, este conducto acompaña al ligamento redondo y, a través de este, se fija al útero.

Las hernias inguinales, atendiendo a su origen, pueden ser congénitas, en las que el conducto peritoneo-vaginal, que debe cerrarse próximo al nacimiento, se mantiene abierto e impide la formación del cordón fibroso o ligamento vaginal, o adquiridas, producidas por el debilitamiento del piso inguinal posterior. La hernia inguinal es un trastorno frecuente en lactantes y niños, y generalmente necesita de una intervención quirúrgica para su resolución. En los primeros, por la persistencia del proceso embrionario que sigue al descenso del testículo hacia el saco escrotal, lo que da lugar a algunas anomalías inguinales, como la hernia escrotal y el hidrocele. Este trastorno es frecuente en los niños pretérmino, algo menos en los neonatos a término, con una mayor incidencia en los varones y tiene una clara predisposición familiar. Habitualmente se manifiesta en el lado derecho y solo es bilateral en el 10% de los casos. La hernia se puede encarcelar, lo que significa un serio problema, pues requiere una intervención quirúrgica urgente.

Tratamiento de la Hernia Inguinal

El tratamiento consiste en la reparación quirúrgica electiva y efectuada a la mayor brevedad posible. Los lactantes toleran bien esta intervención y es habitual que el niño sea dado de alta en las primeras 24 horas. En el domicilio, el cuidado más importante consiste en mantener la herida seca, sobre todo en los niños con corta edad que usan pañales. La herida debe mantenerse sin apósito.

Criptorquidia

La criptorquidia es una alteración frecuente que aparece en el 2-3% de los lactantes y hasta en el 30% de los recién nacidos pretérmino. El trastorno se relaciona con cambios morfológicos en el testículo afectado, caracterizados por una pérdida de volumen y depleción progresiva de las células germinales. En algunos casos, esta alteración se resuelve espontáneamente hacia el primer año de edad. Si el testículo es intraabdominal y no palpable, la ecografía posibilita conocer la presencia y lugar de ubicación, para dar lugar a una reparación progresiva.

Hipospadias

La hipospadia es un trastorno del desarrollo ureteral, por el que el meato urinario aparece en una situación anormal; tiene carácter congénito. El orificio ureteral se localiza en cualquier lugar del pene, desde el glande hasta el escroto, incluso en el periné. La hipospadia es una de las alteraciones más frecuentes del aparato genitourinario del varón, con una incidencia de 5-10 casos por cada 1000 recién nacidos. Este trastorno se desarrolla entre la 13ª y la 15ª semanas de gestación y se manifiesta como defecto de la unión o fusión de los pliegues ureterales, por lo que aparece un pene hipospádico.

Causas de la Hipospadia

Las causas de la hipospadia tienen que ver con fallos de la estimulación androgénica durante el periodo de diferenciación sexual del varón; también se relacionan con factores genéticos, pues son frecuentes los casos de hipospadias en otros miembros de la misma familia. Esta afectación también se vincula a las infecciones padecidas durante el embarazo por madres que tomaron fármacos anticonvulsionantes. Una anomalía asociada suele ser la criptorquidia. Los niños con hipospadias padecen dificultades urinarias, pues no pueden miccionar como los demás y, según su localización, pueden verse obligados a miccionar sentados. En adolescentes, la erección suele ser normal, pero si existe la incurvación puede dificultar el acto sexual.

Fimosis

Entenderemos por fimosis la dificultad o imposibilidad para la retracción de la piel prepucial, esto es, de la piel que recubre el extremo del pene o glande. No debe confundirse con la presencia de adherencias balanoprepuciales (entre la piel del prepucio y glande del pene) que son muy frecuentes en niños y que son independientes de la presencia o ausencia de fimosis. Estas adherencias deben ir liberándose.