El Renacimiento Italiano del Siglo XVI: Arquitectura, Escultura y Pintura

CINQUECENTO (S. XVI)

Florencia es un centro importante ya que confluyen Miguel Ángel, Leonardo y Rafael. También fue importante la república de Venecia donde destaca Tiziano. En el siglo XVI se alcanza el pleno Renacimiento. A esta etapa la sucede el Manierismo hasta finales.

Arquitectura Italiana del Siglo XVI

Destacan Bramante, Miguel Ángel y Vignola en Roma; y Sansovino y Palladio en Venecia.

Bramante

Trabajó en Milán donde coincide con Leonardo. Llevó a cabo el templo de San Pietro in Montorio (tholos clásico), que se levanta sobre un podium, tiene dos pórticos: inferior con pórtico dórico-romano con basa y fuste lisos, y arquitrabe, friso y cornisa. El segundo cuerpo tiene hornacinas que le dan efecto plástico. Rematada por una linterna opaca. Tras esto, Julio II le encarga un proyecto de nueva basílica que supliese la de Constantino, pero murió y Miguel Ángel se encargó de ello.

Miguel Ángel

Para potenciar la cúpula refuerza los pilares. Sigue el modelo de Brunelleschi de doble cúpula. Tiene valor plástico reflejado en el tambor. Destacan las columnas binadas, el entablamento refranqueado (entra y sale), y sobre éste, un ático decorado con guirnaldas. Entre las columnas binadas hay ventanales que crean efecto de sombra con frontones alternos triangulares y curvos. La planta es de cruz griega. En Roma intervino en la plaza del Capitolio. En Florencia, la Biblioteca Laurenciana de los Médici. Destaca por su vestíbulo y una gran escalera que se abre cual abanico. Escalones convexos. Columnas binadas en las paredes apoyadas sobre volutas. Hay ventanales ciegos. Se llega al manierismo, periodo que pone en duda la armonía y el equilibrio clásico.

Vignola

Trabaja en Roma. Es autor de un tratado de arquitectura. Su actividad está plasmada en el “Gesú”, concluida por Giacomo. La fachada sigue el modelo de Alberti de Santa María Novella. Planta de cruz latina de una nave, capillas laterales y cúpula semiesférica sobre tambor apoyada sobre pechinas en el crucero.

Sansovino

Se forma en Roma y se establece en Venecia, donde aporta el estilo clásico. Autor de la Biblioteca de San Marcos, en frente del Palacio Ducal.

Palladio

Trabaja en Venecia y Terra Firma (Vicenza), donde lleva a cabo el Teatro Olímpico, realizado según los principios de Vitruvio. También la Villa Capra, palacio concebido en una villa, con planta central y 4 fachadas iguales, que tienen como referente el Panteón de Agripa, sobre podium. Autor de 4 libros de arquitectura. En Venecia destaca la iglesia de Il Redentore, que usa un orden gigante, pilastras y columnas adosadas. Gran frontón. Portada de templo clásico.

Escultura del Siglo XVI

Destaca por encima de todos Miguel Ángel. Se sentía escultor. Evoluciona de forma muy clara. De una primera etapa clásica hasta una etapa donde desaparece el interés por la belleza formal. No tiene que ver la Piedad del Vaticano de sus comienzos con la de Rondanini del final de su obra. En esta transformación influyen aspectos históricos y tramas personales. También son importantes las esculturas clásicas como el Laocoonte.

Por cronología destacamos:

La Piedad del Vaticano

Composición en pirámide donde se resuelve la asociación de dos figuras.

El David

Su obra más importante. Joven en tensión. Dominio preciso de la escultura clásica. El contrapposto, estudio de la anatomía completos. Un problema es que el peso recae sobre la pierna derecha y es reforzada con un tronco.

Miguel Ángel regresa a Roma para trabajar en un monumento funerario para el Papa Julio II, aunque solo realizó algunas piezas.

Los Esclavos y el Moisés

Tras el encargo de la Capilla Sixtina, Miguel Ángel realizó en Florencia la Capilla de los Médici, donde se encuentran enterrados Lorenzo y Julián de Médici, representados de forma idealizada. Sobre las tumbas hay 4 figuras: mito del eterno retorno, el amanecer, el día, la tarde y la noche. A partir de aquí, esculpió piedades, como la de Rondanini, sin terminar, en la que el interés es la fuerza expresiva. Miguel Ángel asentó las bases de la escultura manierista, que incluye escultores como Cellini, autor del Salero y de Perseo con la cabeza de Medusa; y Gianbologna, autor del Rapto de la Sabina.

Pintura del Siglo XVI

Se habla del periodo de los genios: Leonardo, Miguel Ángel, Rafael y Tiziano. En el Cinquecento, se alcanza el pleno Renacimiento. Destaca la actividad de Leonardo, Miguel Ángel y Rafael impulsados por los papas y, por otro lado, la personalidad de la pintura que se desarrolló en Venecia. La pintura se clasifica en dos grupos: el primero basado en el diseño y soporte del dibujo, y el segundo, corriente del color.

Leonardo da Vinci

Es el primero que supo sintetizar los logros del siglo anterior. Trabajaba con el claroscuro. Se interesa por la perspectiva aérea, usa el sfumato. Se traslada a Milán donde trabaja para Ludovico el Moro. Allí realiza dos obras importantes, La Virgen de las Rocas (composición en pirámide), y La Última Cena, deteriorada por una nueva técnica fallida. Posteriormente regresa a Florencia, donde lleva a cabo la famosa Gioconda. Retrato hecho a escala 1:1, representada la esposa de Giocondo, sentada, hombros en escorzo entre dos columnas de un ventanal. Hay paisaje pero no real, usado como referente espacial, y una fuente de luz. Usa la técnica del esfumato. Sirvió como modelo universal del retrato. Después, realiza la Virgen, Santa Ana y el Niño, dentro de una pirámide. Importante el paisaje no real y fuente de luz.

Miguel Ángel

Sus pinturas son poderosas y vitales, que destacan por los gestos y actitudes difíciles y escorzos. Dominio claro de la anatomía. En Florencia compite con Leonardo en el Salón de los 500. Realiza el Tondo Doni, composición piramidal, que armoniza el mundo cristiano y pagano. Miguel Ángel destaca por su trabajo en la Capilla Sixtina. Primero trabajó en una bóveda en la etapa clásica. En la década de los 30 lleva a cabo el testero. Miguel Ángel narra la historia de la humanidad desde la creación hasta la caída del hombre. El conjunto se completa con los profetas y sibilas. En las lunetas están los antepasados de Cristo. En el Juicio Final se representa a Cristo como juez, a María asustada. Hay una diferencia entre los que suben y los que caen.

Rafael

Se divide en dos etapas, la primera florentina, donde se encuentran Leonardo y Miguel Ángel. Las influencias de Leonardo están presentes en el interés por composiciones equilibradas, también por el efecto aéreo del paisaje, lo cual es un referente espacial. En La Bella Jardinera se revela un gran equilibrio del paisaje urbano y natural. Decoró las estancias del Vaticano, la más famosa es la Signatura, donde destacan dos lunetos frente a frente: La Disputa del Sacramento que representa la cultura cristiana, frente a La Escuela de Atenas, que representa el saber clásico. En la segunda representa a los filósofos y a científicos. Se introducen elementos de actualidad como la cabeza de Leonardo o él mismo. Destaca Giulio Romano. Los ayudantes contribuyen al desarrollo del manierismo. Son muy importantes los retratos que hizo en Roma. Destacamos el de Baltasar de Castiglione, que sigue el modelo de la Gioconda.

Pintura Veneciana

Esta pintura tiene una personalidad muy marcada, se la considera como una escuela propia. En los orígenes destacamos a Mantegna y a Antonio de Messina. En el tránsito del siglo XV al XVI asienta las bases de la pintura veneciana. A mediados del siglo XVI, añadimos a Tintoretto y a Veronés. Aspectos propios: pintura tonal, sin dibujo previo, se introduce el lienzo puesto que la tabla se podría por la humedad; toma importancia el retrato, y hay desnudos femeninos.

Tiziano

Tiene gran influencia posterior en Rubens, Rembrandt, Velázquez. Domina todos los géneros. Se formó con Giovanni Bellini y pasó al taller de Giorgione (más moderno). Destacamos “El concierto campestre”, también las pinturas que hizo para la iglesia de Santa María Gloriosa dei Frari. Sus pinturas son religiosas concebidas con una gran monumentalidad. Destaca la Ascensión de la Virgen. De esta misma época es el conjunto de pinturas mitológicas para el duque de Ferrara. Destacan las pinturas de Adri