Composición del Suelo

Arenas

Compuesta por fragmentos muy pequeños de la roca madre. Principales minerales: filosilicatos, tectosilicatos y tectosil.(óxidos).
Interés:

  1. Determinar la naturaleza del material original.
  2. Determinar discontinuidades litológicas o suelos enterrados.
  3. Conocer el grado de meteorización o edad relativa de los suelos.
  4. Estimar la fertilidad potencial del suelo.

Ácidos Húmicos

  1. Solubles en álcalis, precipitan al acidular y no son solubles en alcohol.
  2. Pm elevado (5.000-100.000).
  3. Estructura molecular compleja.
  4. Contiene más C y menos H y O que los ácidos fúlvicos.
  5. Forman complejos arcillo-húmicos.

Tipos:
Pardos:

  • Color claro.
  • Pm: >5.000.
  • Poco polimerizados.
  • Relativamente lábiles.
  • Débilmente ligados a las arcillas.
  • Floculan muy lentamente con Ca+2.

Grises:

  • Color oscuro.
  • Pm: 50.000-100.000.
  • Muy polimerizados.
  • Muy estables. No biodegradables.
  • Ligados íntimamente a la arcilla.
  • Floculan rápidamente con Ca+2.

Ácidos Fúlvicos

Fracción soluble en soluciones alcalinas no precipitables con ClH.
– Color amarillo anaranjado, compuestos de alto peso molecular con un contenido en C inferior al 50%, y alto contenido en O e H (respecto a los ácidos húmicos) solubles en agua, alcohol y lejías alcalinas.
– Sustancias de carácter más ácido respecto a los ácidos húmicos, lo que le confiere gran capacidad de alteración de minerales (podsolización).
– Por su composición y estructura son menos evolucionados que los ácidos húmicos.
– Grupos funcionales similares a los ácidos húmicos, pero menos polimerizados. Mayor contenido en grupos carboxilos.
– Contienen N, por tanto en su hidrólisis con ClH pasan a la disolución distintos aminoácidos.
– Forma complejos pseudosolubles con Al y Fe. Facilita el transporte de estos elementos a través del perfil del suelo, dando lugar, en ocasiones, a la formación de un horizonte espódico.

Ácidos Himatomelánicos

Representan la parte soluble en alcohol de un precipitado de ácidos húmicos en medio ácido.
– Son formas simples de los ácidos húmicos, menos estables.
– Se consideran como una mezcla compleja de sustancias derivadas de ácidos húmicos más o menos oxidados.
– Contienen los mismos grupos funcionales, pero su contenido en C es siempre más elevado (>60%).

Huminas

Sustancias no extraíbles del humus en el tratamiento de soluciones alcalinas.
Contienen compuestos orgánicos variados, con una composición próxima a la materia orgánica fresca, que han formado uniones con la arcilla.
– Contribuyen a la formación de estructuras edáficas estables.
– Constituyen reserva importante de N, P y S en el suelo que lentamente se mineraliza y puede ser utilizada por las plantas.

Influencia de la Topografía en la Formación del Suelo

La topografía actúa como factor de formación o, por el contrario, como factor de destrucción del suelo.
Los elementos del relieve y sus efectos sobre el suelo son:

  1. Inclinación o pendiente de la ladera: radiación solar recibida, velocidad de escorrentía, erosión, depósito de materiales.
  2. Longitud de la ladera: escorrentía, erosión.
  3. Orientación de la ladera: efecto solana-umbría (topoclima), radiación recibida, temperatura del suelo, exposición al viento, exposición a la lluvia, humedad del suelo, infiltración, vegetación, contenido de materia orgánica, morfología y diferenciación del perfil.
  4. Posición fisiográfica: erosión, depósito, características de los materiales depositados, condiciones de drenaje, profundidad y estacionalidad de la capa freática, morfología y diferenciación del perfil, profundidad del suelo, contenido de sales solubles, formación de horizontes cementados.

Topografía como Factor de Edafogénesis

  1. Acción indirecta: La posición topográfica y su orientación actúa modificando el microclima y vegetación a la vez que afecta a la capa freática.
  2. Acción directa: puesto que lleva consigo los efectos de erosión, escorrentía, lavado lateral u oblicuo.

Influencia del Tiempo en la Edafogénesis

Cuando los materiales litológicos afloran en superficie quedan sometidos a la acción de los agentes atmosféricos y biológicos, en unas determinadas condiciones topográficas, dando como resultado la formación del suelo.
La dificultad está en determinar el momento a partir del cual se puede hablar de la existencia de un suelo. Desde un punto de vista naturalista, se dice que hay un suelo a partir del momento en que un material original soporta una vegetación por muy incipiente que esta sea.
Una vez que se ha iniciado la formación del suelo, la combinación de los factores de edafogénesis condiciona la intervención de unos procesos edafogenéticos cuyo resultado depende de la naturaleza, intensidad y el tiempo que dure su acción.