El Medio Interno y sus Componentes: Sangre, Plasma y Células Sanguíneas
El Medio Interno y sus Componentes
1. Concepto de Medio Interno
Todas nuestras células están bañadas por diversos líquidos orgánicos, de los que toman alimentos y oxígeno, y a los que vierten sus residuos metabólicos. Este ambiente líquido constituye el medio de vida de las células y se conoce como medio interno. En el ser humano, los líquidos que forman el medio interno son:
- Los que circulan por el interior de los vasos conductores, como la sangre y la linfa.
- Los que ocupan cavidades cerradas por membranas, como el líquido cefalorraquídeo, el líquido pleural y el líquido sinovial.
- El líquido intersticial, que baña a las células y rellena las intersecciones celulares.
2. La Sangre
El volumen de sangre (volemia) varía según el peso del cuerpo; en el hombre representa un 8%. La sangre está formada por un líquido amarillento, el plasma sanguíneo, en el que se encuentran tres tipos diferentes de células:
- Glóbulos rojos (eritrocitos o hematíes): contienen la hemoglobina.
- Glóbulos blancos (leucocitos): hay varias clases y todos ellos con función defensiva.
- Plaquetas (trombocitos): intervienen en la coagulación de la sangre.
Aproximadamente el 55% del volumen sanguíneo corresponde al plasma y el 45% a las células sanguíneas.
2.1 Funciones de la Sangre
- Transportadora de sustancias como oxígeno, nutrientes, hormonas, vitaminas, enzimas y productos de desecho de las células.
- Termorreguladora: amortigua las variaciones de temperatura que se producen en el organismo.
- Amortiguadora del pH: contiene sustancias que mantienen el pH estable; los residuos metabólicos suelen ser sustancias de carácter ácido.
- Defensiva: transporta leucocitos y anticuerpos que nos defienden de microorganismos patógenos y de toxinas causantes de enfermedades.
- Antihemorrágica: posee la capacidad de formar coágulos y reducir así la pérdida de sangre en las heridas.
La sangre circula por el interior de los vasos sanguíneos, que se ramifican hasta convertirse en capilares sanguíneos, a través de los cuales se filtra parte del plasma y algún leucocito, dando lugar al líquido intersticial.
3. Plasma Sanguíneo
Es una solución de color amarillento, con un 92% de agua y una amplia variedad de sustancias disueltas, tanto orgánicas como inorgánicas. En el plasma sanguíneo, la glucosa se mantiene a una concentración más o menos constante gracias a la insulina. La concentración de sales minerales en la sangre es de 9g/l.
3.1 Funciones de las Sales Minerales
- Regulación de la presión osmótica.
- Contracción muscular.
- Mantenimiento del pH.
3.2 Proteínas Plasmáticas
Las proteínas plasmáticas más importantes son:
- Albúminas: actúan como transportadoras de moléculas insolubles, ayudan a retener el agua del plasma dentro de los vasos sanguíneos y son una reserva de aminoácidos.
- Globulinas: participan en mecanismos de defensa específicos.
- Fibrinógeno: desempeña un papel fundamental en el proceso de coagulación de la sangre. El plasma desprovisto de fibrinógeno se denomina suero sanguíneo.
4. Eritrocitos, Hematíes o Glóbulos Rojos
Los glóbulos rojos son células sanguíneas con forma de disco bicóncavo. Son elásticos y deformables, lo que les permite circular por los capilares más finos. Su función principal, gracias a la hemoglobina, es el transporte de oxígeno. Se originan en la médula ósea roja y durante el proceso de maduración pierden el núcleo, por lo que su periodo vital es de 4 meses.
El número de hematíes en condiciones normales es de 4.8 millones por mm3 en el hombre y de 3.6 millones en la mujer.
4.1 Hemoglobina
La hemoglobina es una proteína de color rojo oscuro. No solo transporta oxígeno, sino también CO2 desde los tejidos a los pulmones. El 25% del CO2 se transporta formando la “carbaminohemoglobina”, el 10% va disuelto en el plasma y el 65% se transporta en forma de HCO3–.
5. Glóbulos Blancos o Leucocitos
Son células con núcleo que puede ser esférico o alargado, y con 2 a 5 lóbulos. Los leucocitos, mediante pseudópodos, se pueden desplazar, y su función es defensiva frente a infecciones gracias a la fagocitosis o a la fabricación de anticuerpos.
Aunque se denominan glóbulos blancos, en realidad son incoloros. Para verlos con el microscopio hay que teñirlos. Hay dos grupos:
- Granulocitos: que comprenden los neutrófilos, eosinófilos y basófilos.
- Agranulocitos: que comprenden los linfocitos y los monocitos.
6. Plaquetas o Trombocitos
No son verdaderas células, sino fragmentos de citoplasma carentes de núcleo, procedentes de la fragmentación de unas grandes células presentes en la médula ósea roja denominadas megacariocitos. Las plaquetas poseen en la superficie diferentes proteínas que favorecen su aglutinación.
La heparina es una sustancia anticoagulante producida por los basófilos.