Las pensiones: tipos e historia
RECURSOS ECONÓMICOS PARA UNA VIDA DIGNA: LAS PENSIONES
El aseguramiento de una situación económica estable y el mantenimiento de la capacidad adquisitiva de las personas mayores aparece como uno de los objetivos centrales de la política social dirigida a este grupo de población.
Las pensiones tratan de suplir rentas de trabajo o de compensar las situaciones de necesidad que se presentan a las personas por razón de jubilación, vejez, incapacidad o fallecimiento.
Ser pensionista da derecho a asistencia sanitaria y farmacéutica par el pensionista y sus familiares, y al disfrute de SSSS complementarios de la Seguridad Social como residencias para mayores, hogares y club, programa de vacaciones etc.
Pensiones contributivas.
//Tratan de compensar la pérdida de rentas tras la jubilación. Es necesario haber cotizado durante un periodo mínimo de 15 años (dos de los cuales deben encontrarse dentro de los 8 inmediatamente anteriores al momento de la solicitud) y haber cumplido 65 años.
Pensiones no contributivas.
//Por jubilación e invalidez para los ciudadanos que carezcan de recursos suficientes y que no hayan cotizado o lo hayan hecho de forma insuficiente. Establece como requisitos para la percepción de las mismas, haber cumplido 65 años, carecer de rentas o ingresos suficientes y residir en territorio nacional al menos 10 años en el periodo que media entre los 16 y la fecha en que solicita la pensión. Dos de estos han de ser consecutivos e inmediatamente anteriores a la solicitud. La cuantía de la pensión se fijará anualmente en la Ley de PGE. Su pago se fracciona en 14 pagas correspondientes a 12 mensualidades y 2 pagas extra. //Las pensiones de jubilación constituyen un importante capítulo dentro del gasto social del país.
El Pacto de Toledo.
//Se generó en 1995 y recomendó flexibilizar la edad de jubilación, tanto la anticipada como la normal, contemplando la posibilidad de que las cotizaciones, en la normal, sociales de estas personas sean menores en función de la propia jornada de trabajo y la pensión que se deje de percibir. Mantenimiento del poder adquisitivo de las pensiones a través de la vinculación al IPC o fórmulas similares. Respaldo a los sistemas complementarios de ahorro y previsión social de carácter privado, regulando dichos sistemas y actualizando los incentivos fiscales a la creación de los mismos. //Nuestro sistema de pensiones también contempla formas de jubilación anticipada a los 61 y 64 años de edad con caracteres especiales para mutualistas y la posibilidad de compaginar trabajo y jubilación a partir de los 60 años a través de la jubilación parcial. //También a los 65 años a través de la jubilación flexible (entre 25% y 85% de una jornada laboral) con una reducción proporcional de aquella prestación.
Desarrollo de las personas mayores sin alejarse del entorno cotidiano permaneciendo, siempre que sea posible, en su hogar. Existen casos particulares de ancianos que por su situación socio-familiar, su grado de discapacidad física o psíquica, su edad o su situación económica, requieren de la asistencia de una serie de centros y residencias que mejoren su calidad de vida.
Los hogares y clubes creados por instituciones públicas o privadas funcionan como centros de día. Se ofrece información acerca de la oferta del sistema de ssss y asistenciales, prevención sanitaria y rehabilitación menor, podología, actividades socio-culturales, etc. igualmente, cuentan con lugares comunes de encuentro (cafetería, biblioteca, etc) en lo s que establecer relaciones de igualdad que promuevan la integración comunitaria de los mayores, objetivo principal de este tipo de centros.
Los requisitos para poder acceder a los servicios son distintos dependiendo del carácter de la institución que los promueve. En la mayor parte el requisito general es tener 60 años cumplidos.
También podrán disfrutar de los servicios del centro el cónyuge o la persona que conviva maritalmente con el socio, aunque no haya cumplido los 60 años.
Encontramos residencias en las que los mayores vivirán bien de forma temporal o permanente. Las estancias temporales serán de dos tipos:
Estancias diurnas en hogares y residencias dirigidas a personas que no pueden valerse por sí mismas para la mejora de su comunicación y relaciones sociales, así como programas individualizados de rehabilitación y terapia ocupacional. Son atendidos durante 7-8 horas diarias.
Estancias temporales en residencias: un mes aproximado de duración, generalmente en vacaciones. Este servicio también posibilita una mejor preparación del anciano discapacitado para su estancia permanente en una residencia.
No obstante, diversas circunstancias pueden aconsejar que el anciano pase a vivir de forma permanente en la residencia.
Existen distintos tipos de residencias para personas mayores. Las residencias para Válidos están destinadas que pueden desarrollar por sí mismas las actividades de la vida cotidiana. Podrán disponer de Unidades Asistidas para la adecuada atención de los usuarios que puedan experimentar un empeoramiento de sus condiciones físicas y psíquicas.
Las residencias Asistidas atienden a personas que necesitan de la asistencia de terceros. En dichas residencias se cuentan con personal médico y asistencial especializado, así como con instalaciones y equipos adecuados para facilitar la atención a estas personas.
Cada vez son más frecuentes las residencias mixtas que cuentan con posibilidad de atender a ambos grupos de personas.
También existen Residencias mixtas o polivalentes.
Desarrollo de las personas mayores sin alejarse del entorno cotidiano permaneciendo, siempre que sea posible, en su hogar. Existen casos particulares de ancianos que por su situación socio-familiar, su grado de discapacidad física o psíquica, su edad o su situación económica, requieren de la asistencia de una serie de centros y residencias que mejoren su calidad de vida.
Los hogares y clubes creados por instituciones públicas o privadas funcionan como centros de día. Se ofrece información acerca de la oferta del sistema de ssss y asistenciales, prevención sanitaria y rehabilitación menor, podología, actividades socio-culturales, etc. igualmente, cuentan con lugares comunes de encuentro (cafetería, biblioteca, etc) en lo s que establecer relaciones de igualdad que promuevan la integración comunitaria de los mayores, objetivo principal de este tipo de centros.
Los requisitos para poder acceder a los servicios son distintos dependiendo del carácter de la institución que los promueve. En la mayor parte el requisito general es tener 60 años cumplidos.
También podrán disfrutar de los servicios del centro el cónyuge o la persona que conviva maritalmente con el socio, aunque no haya cumplido los 60 años.
Encontramos residencias en las que los mayores vivirán bien de forma temporal o permanente. Las estancias temporales serán de dos tipos:
Estancias diurnas en hogares y residencias dirigidas a personas que no pueden valerse por sí mismas para la mejora de su comunicación y relaciones sociales, así como programas individualizados de rehabilitación y terapia ocupacional. Son atendidos durante 7-8 horas diarias.
Estancias temporales en residencias: un mes aproximado de duración, generalmente en vacaciones. Este servicio también posibilita una mejor preparación del anciano discapacitado para su estancia permanente en una residencia.
No obstante, diversas circunstancias pueden aconsejar que el anciano pase a vivir de forma permanente en la residencia.
Existen distintos tipos de residencias para personas mayores. Las residencias para Válidos están destinadas que pueden desarrollar por sí mismas las actividades de la vida cotidiana. Podrán disponer de Unidades Asistidas para la adecuada atención de los usuarios que puedan experimentar un empeoramiento de sus condiciones físicas y psíquicas.
Las residencias Asistidas atienden a personas que necesitan de la asistencia de terceros. En dichas residencias se cuentan con personal médico y asistencial especializado, así como con instalaciones y equipos adecuados para facilitar la atención a estas personas.
Cada vez son más frecuentes las residencias mixtas que cuentan con posibilidad de atender a ambos grupos de personas.
También existen Residencias mixtas o polivalentes.