P.C.D.L.B

Obras: Escribió Calderón numerosas obras (aunque muchas menos que Lope de Vega): unas 120 comedias, 80 autos sacramentales y más de 20 piezas cortas. En su obra se distinguen dos etapas:

Primera etapa imitación de Lope:

Calderón adopta los esquemas de la “comedia de capa y espada”: ambiente urbano, enredos amorosos, personajes convencionales. Brilla la habilidad de Calderón para desarrollar la trama, manteniendo el interés y la intriga. Es, en suma, un teatro de pura e inteligente diversión. Dentro de esas comedias destacan: La dama duende, Casa con dos puertas mala es de guardar,etc.

Segunda etapa:

Mantiene la fórmula lopesca pero trabaja con mayor cuidado los detalles. También elabora con más atención la forma, acentuando el barroquismo, y dramatiza temas profundos. Escribe dramas de honor, donde lleva a sus máximas consecuencias el código del honor, entre las que destacan El alcalde de Zalamea, El médico de su honra, A secreto agravio, secreta venganza, etc. Destacan además dramas filosóficos como La vida es sueño, una de las cumbres de nuestro teatro universal.

Autos sacramentales:

Son piezas dramáticas en verso, con un sólo acto, que formaban parte de la fiesta litúrgica del Corpus. Tenían carácter alegórico: trataban temas del dogma católico, sobre todo la Eucaristía y los personajes representaban ideas o conceptos. Destacan: El gran teatro del mundo y El gran mercado del mundo.

L.V.

cultivó la mayor parte de los géneros literarios de su tiempo. Como dramaturgo su importancia fue extraordinaria en la creación de la comedia nueva. Su grandeza está en haber sabido dotar a la escena de un nuevo modo de expresión, uniendo la tradición literaria culta con el lenguaje coloquial. Su acierto, desligar la comedia de las ataduras de las normas clásicas, para adaptarla a su época y contactar con el público. Cumpliendo encargos para los corrales de comedias, se afirma que escribió unas 1800 comedias y 400 autos, de los que se conservan alrededor de 500. Esta ingente labor explica el título de “monstruo de naturaleza” con que le designa Cervantes o el de “Fénix de los ingenios”.

Obras:

En Lope está todo: lo religioso y lo profano; la comedia y el auto; la historia reciente y la tradición nacional. Así compuso:

Comedias de enredo

Como La dama boba o El perro del hortelano, en las que lo fundamental es el amor y el enredo

Dramas de honor campesino

En las que un labrador rico y cristiano viejo se enfrenta a un noble o a un comendador que lo ha deshonrado (Fuenteovejuna, Peribáñez y el comendador de Ocaña, El mejor alcalde el rey). En estas obras aparece el tema del abuso del poder. El vilano acude al rey pidiendo justicia y éste actúa como juez supremo siempre a favor del villano.

Dramas trágicos

Entre los que destacan El caballero de Olmedo, y el castigo sin venganza.

L.C.N

En 1609, Lope de Vega publicó el Arte nuevo de hacer comedias en este tiempo. Se trata de una serie de reflexiones de las comedias de su época y de cómo le gustaría al autor que se compusieran. Estas reflexiones van a marcar las características básicas del teatro barroco español:

1) Las obras mezclan elementos trágicos y cómicos.

2) No siempre se respeta la regla clásica de las tres unidades:

  • Unidad de lugar: exigía que la acción se desarrollara en un mismo lugar, pero en las comedias españolas es frecuente que los hechos sucedan en sitios diversos.
  • Unidad de tiempo: disponía que el argumento transcurriera como máximo durante un día, disposición que no respetaban las comedias barrocas.
  • Unidad de acción: establecía que los sucesos estuvieran todos relacionados con un caso central y único. En las comedias barrocas existe una acción principal, cuyos protagonistas son el galán y la dama, y una secundaria, protagonizada de ordinario por los criados.

3) Los personajes se repiten constantemente, lo que permite a los espectadores reconocerlos con facilidad.

Los más frecuentes son:

  • El galán: un hombre joven, guapo y valiente, que se mueve por los impulsos del amor.
  • La dama: una mujer joven, hermosa, inteligente y prudente. Usa sus virtudes para lograr sus objetivos. Es el complemento femenino del galán.
  • El caballero que es el padre, hermano, esposo o el mismo galán. Suele ser el gran defensor del honor que pierde la dama.
  • El rey tiene dos facetas: cuando es joven suele ser injusto y soberbio; cuando es viejo es prudente y necesario para la resolución del conflicto.
  • El poderoso: es un noble que tiene el papel negativo, violando derechos y personajes.
  • La criada: acompañante y confidente de la dama.
  • El gracioso: es el tipo por antonomasia de la comedia española, verdadera creación. Viene a ser el criado del galán, pero también su consejero y amigo. Realiza una trayectoria amorosa similar a la del él, emparejándose con la criada. Reúne el máximo de elementos humorísticos por lo que su conexión con el público es total: es cobarde, ama el dinero y siempre está dispuesto a los placeres mundanos.

4) Las comedias se dividen en tres actos o jornadas.

El escritor plantea el asunto en la primera jornada, lo desarrolla en la segunda y lo concluye al final de la tercera.

5) El lenguaje.

Se pretende que la lengua se ajuste a la condición de los personajes, de modo que hablen de acuerdo con su categoría social y ello permita distinguir, por ejemplo, al rey del gracioso. Esta adecuación de la lengua al personaje se denomina decoro poético.

6) Todas la comedias están compuestas en verso.

Lo que facilita su memorización. La métrica es muy variada, y está de acurdo con la situación y el personaje (por ejemplo para las relaciones se usan los romances, las redondillas para las cosas amorosas, etc.) También hay que señalar que se intercalan canciones y bailes que interrumpen la acción.

7) Los temas de las comedias barrocas son múltiples:

Religiosos, históricos, legendarios, pastoriles, caballerescos, novelescos, mitológicos, filosóficos, etc. Dos son los principales l honra y el amor que dan lugar a los dos tipos básicos de comedias, de honor y de enredo. Muchos fueron los autores de la comedia nueva que compusieron comedias durante el S. XVII. Especial importancia tiene, además de Lope de Vega y Calderón de la Barca, Tirso de Molina, autor de comedias como El vergonzoso en palacio, Marta la piadosa, Don Gil de las Calzas verdes, La prudencia en la mujer; también se le atribuyen El condenado por desconfiado y El burlador de Sevilla, obra que desarrolla el famosísimo mito de don Juan.