Origen e Historia del Idioma Francés

Durante siglos, el idioma hablado en la región de la Galia fue un latín influenciado por las lenguas germánicas. Es difícil precisar el momento exacto en que esta mezcla de dialectos latinos se transformó en francés o provenzal, pero se ubica entre los siglos VI y IX d.C. En esta época, se encuentran los primeros registros de una lengua diferente del latín y del germánico, hablada en el territorio de la actual Francia.

El documento más fundamental que sirve como registro del nacimiento del idioma francés es “Los Juramentos de Estrasburgo”. En este documento, los nietos de Carlomagno juran fidelidad tras la división después de la muerte de Luis el Piadoso. Este juramento fue escrito en latín, germánico y en una lengua que podríamos denominar “protofrancés”, para que cada parte entendiera las cláusulas. Es el primer registro escrito de esta lengua romance.

Tiempo después, comienzan a aparecer las primeras obras literarias escritas por clérigos y personas cultas en esta nueva lengua, que se consolidó y se apartó del latín, aunque con influencias germánicas (como la nasalización), a partir del siglo XI. Entre estas obras destacan “El Cantar de Roldán” y “La Secuencia de Santa Eulalia”.

En el siglo XII, surgieron dos variaciones de esta lengua: una al norte y otra al sur del Río Loira. Estas lenguas se denominaron de Oïl y de Oc, por la diferencia en la evolución del vocablo “sí”, dando pie a variedad de dialectos. En el siglo XIII, la lengua de Oc perdió su hegemonía, y la lengua de Oïl continuó su evolución en la alta edad media.

Esta evolución se presentó desde que la sede de la Corte se trasladó a París trescientos años antes. El dialecto de la lengua de Oïl hablado en París, denominado “dialecto de Î’lle de France”, desplazó a los demás hasta convertirse en el idioma francés actual. La Guerra de los Cien Años y la Revolución Francesa fueron detonantes importantes de su evolución.

Actualmente, el francés es el segundo idioma más hablado en la Unión Europea, detrás del alemán y por encima del inglés. Es una de las lenguas de trabajo de la ONU y una de las dos lenguas oficiales en entidades como la OTAN, la OMC y el Comité Olímpico Internacional.

En resumen, el francés es un idioma con una carga histórica impresionante, lleno de exponentes en las artes que lo han enriquecido, colocándolo como una de las lenguas más respetadas a nivel global. Los textos literarios de escritores como Molière, Victor Hugo, François Baudelaire, Jean Jacques Rousseau o Voltaire son solo algunas de sus pruebas más importantes. El francés es una lengua que sirve de puente para aprender otros idiomas como el italiano y el portugués, y ha proporcionado al inglés más del 50% de su vocabulario.

Además, algunas de las universidades más importantes del mundo se encuentran en países francoparlantes, lo que lo convierte en una gran opción para crecer en el mundo académico.

¿Qué es la Francofonía?

La palabra francofonía apareció por primera vez hacia 1880, cuando el geógrafo francés Onésime Reclus la utilizó para designar el conjunto de personas y países que hablaban francés. Se habla de francofonía con “f” minúscula para designar a los hablantes de francés y de Francofonía con “F” mayúscula para hablar del dispositivo institucional que organiza las relaciones entre los países francófonos.

La francofonía es, en primer lugar, un conjunto de hombres y mujeres que comparten una lengua común: el francés. Según la última relación del Observatoire de la langue française, publicado en 2014, se estima que hay 274 millones de hablantes en los cinco continentes.

La Francofonía Institucional

Desde 1970, con la creación de la agencia de cooperación cultural y técnica (ACCT) que se transformó en la Organisation internationale de la Francophonie (OIF), los francófonos pueden apoyarse en un dispositivo institucional que promueve la lengua francesa y las relaciones de cooperación entre los 80 estados y gobiernos miembros u observadores de la OIF.

Este dispositivo está reglamentado por la Charte de la Francophonie.