El Nuevo Periodismo: La Revolución Narrativa de los 60

Los Orígenes en la Contracultura

En la década de 1950, el periodismo tradicional se encontraba estancado, lo que impulsó la búsqueda de nuevas formas de narrar, incluso radicales. Estados Unidos se convirtió en un laboratorio de estilos y productos periodísticos innovadores. Se abordaban temas previamente censurados, como la desobediencia civil y el consumo de drogas. La generación Beat, un grupo de escritores de la Universidad de Columbia, liderados por Jack Kerouac (autor de En el camino), abrió el camino.

En los años 60, el movimiento hippie y contracultural tuvo su auge, culminando en la Revolución de 1968. El término contracultura (del inglés counterculture) buscaba equilibrar la cultura occidental. De ahí surgieron conceptos como contrainformación (información alternativa) y underground (movimiento estético y cultural). Estos movimientos implicaban un compromiso político de izquierda y antisistema.

En Estados Unidos, surgieron alrededor de 3.000 publicaciones contraculturales. Destacaron periódicos como The East Village Other (costa este) y Berkeley Barb (costa oeste), con más de 60.000 ejemplares. Una encuesta entre los suscriptores de Berkeley Barb reveló que el 98% había consumido marihuana y el 77% LSD. Parodiando el lema de The New York Times (“Nosotros publicamos las noticias que merecen ser impresas”), estas publicaciones lo cambiaban por “desmerecen”.

Otras publicaciones, aunque minoritarias, influyeron en la generación, como el fanzine musical Punk (Nueva York, 1966), que dio nombre al género musical. También surgieron revistas como Rolling Stone (1967), que alcanzó una tirada de 1,2 millones de ejemplares en 1997. Esta prensa incorporó neologismos como acid (LSD), bread (dinero), cool (majo, divertido), rap (hablar con libertad), pig (policía) y pot (marihuana).

El Nuevo Periodismo: Definición y Características

El Nuevo Periodismo es una corriente periodística que surgió en los años 60 en Estados Unidos. Su principal característica es la incorporación de técnicas literarias de la novela realista a la narrativa periodística.

Según Gómez y Marín: “Se pasó de un reportero exterior a uno que adquiere gran relevancia, se integra en el relato y, a veces, se convierte en protagonista de la historia”. El periodista deja de ser un observador para convertirse en copartícipe o protagonista, dando lugar al periodismo gonzo.

Tom Wolfe considera a Jimmy Breslin, columnista del Herald Tribune de Nueva York, como el pionero del Nuevo Periodismo. Breslin buscaba las historias en persona y las narraba con técnicas literarias. Estas historias se publicaban en revistas como Esquire, The New Yorker y Playboy.

Características del Nuevo Periodismo:

  • Estilo literario: Utiliza el estilo de la novela para una lectura más atractiva. Tom Wolfe lo definió como “dimensión estética” (1973).
  • Narrativa: Convierte los reportajes en pequeños relatos, incluso con diálogos de ficción, manteniendo la objetividad.
  • Transgresión de géneros: No se limita a un solo género periodístico.
  • Investigación: Prioriza la presencia en el lugar de los hechos, la documentación exhaustiva y la inmersión en el ambiente.

El Nuevo Periodismo fomentaba la convivencia con los sujetos de la historia para captar diálogos, gestos, detalles del ambiente y la “vida subjetiva o emocional”. Gay Talese lo explicaba así: “Necesito quedarme con alguien el tiempo suficiente para observar cómo su vida cambia”.

Precedentes y Pioneros

Algunos precedentes del Nuevo Periodismo son Hemingway (mezcla de ficción y reportaje), Orwell (Sin blanca en París y Londres), Ramón J. Sender (Viaje a la aldea del crimen), Chaves Nogales (A sangre y fuego) y Josep Pla.

En los años 60, periodistas valientes se adentraron en diversos ambientes, incluso en sociedades cerradas. Algunos ejemplos destacados por Wolfe son:

  1. Hunter S. Thompson (Los Ángeles del Infierno)
  2. Gay Talese (Honrarás a tu padre)
  3. John Hersey (Hiroshima)
  4. John Sack (crónica de la Guerra de Vietnam)
  5. Terry Southern (reportajes sobre la cultura de la droga)
  6. John Howard Griffin (experiencia sobre la segregación racial)
  7. Jerry Thompson (infiltrado en el Ku Klux Klan)
  8. Robert Christgau (dietas macrobióticas)
  9. Robert Sabbag (Ciego de nieve)
  10. Truman Capote (A sangre fría, Desayuno con diamantes)
  11. Oriana Fallaci (Hollywood y la Guerra de Vietnam)
  12. Ryszard Kapuscinski (La guerra del fútbol, Un día más con vida)
  13. Günter Wallraff (Cabeza de turco)

John Hersey, aunque reconocido por su calidad narrativa, se mantuvo fiel al periodismo tradicional y se opuso a la mezcla de ficción y periodismo. Consideraba que esta confusión “allanaba el camino de la mentira pública”.