El pensamiento de Descartes

La duda metódica

Para comprender la filosofía cartesiana, debemos partir de la duda metódica. Descartes cuestiona todo conocimiento preconcebido, confiando únicamente en la razón. Esta duda es:

  • Universal y radical: Cuestiona todas las certezas.
  • Metódica y constructiva: Forma parte de un método para alcanzar la certeza.
  • Teorética: Se limita al ámbito de la reflexión filosófica.

A partir de la duda, Descartes busca la certeza, construyendo los cimientos del saber: la metafísica.

La sustancia pensante: Cogito, ergo sum

El punto de partida es la primera verdad evidente: “Pienso, luego existo” (Cogito, ergo sum). Esta es una intuición que afirma la existencia del sujeto pensante. Todo lo percibido o pensado permanece dudoso hasta ser probado a partir de esta verdad.

El cogito garantiza la existencia subjetiva, pero no la objetiva de las ideas. Descartes clasifica las ideas en:

  • Adventicias: Proceden de la experiencia externa.
  • Facticias: Se deducen de otras ideas.
  • Innatas: Ideas claras y distintas, no construidas por la mente ni la experiencia.

La investigación se centra en las ideas innatas.

La sustancia infinita: Dios

Entre las ideas innatas, Descartes encuentra la idea de infinito. Su existencia se prueba mediante dos argumentos:

  • Argumento de la objetividad de las ideas: La idea de un ser infinito requiere una causa infinita.
  • Argumento ontológico (similar al de San Anselmo): La perfección divina incluye la existencia.

La sustancia extensa: El mundo

La existencia del mundo exterior está garantizada por la veracidad de Dios. Si el mundo no existiera, Dios sería un genio engañador. Dios garantiza las cualidades objetivas del mundo, que son claras y distintas. Descartes geometriza los cuerpos, reduciendo todo a materia y movimiento. Dios es la causa primera del movimiento y conserva el universo de forma invariable.

Comunicación de las sustancias

El dualismo cartesiano

Descartes concluye en la existencia de tres sustancias (res):

  • Sustancia pensante (res cogitans): El yo o el alma, cuyo atributo es pensar.
  • Sustancia infinita (res infinita): Dios, cuyo atributo es la perfección.
  • Sustancia extensa (res extensa): La materia, cuyo atributo es la extensión.

El ser humano posee dos sustancias separadas: cuerpo y alma. Descartes postula la glándula pineal como punto de comunicación entre ambas, aunque reconoce la falta de una idea clara y distinta al respecto. Esta separación origina el dualismo cartesiano.