El Sistema Filosófico Marxista: Análisis y Crítica del Capitalismo
El Sistema Filosófico Marxista
El objetivo prioritario del sistema filosófico marxista es la transformación del mundo como una forma de acercar la filosofía a las preocupaciones de los hombres y sacarla de los reductos académicos. Marx es consciente de que no se puede transformar el mundo si no se conoce, si no se sabe su organización. El parte de la crítica a las interpretaciones que hasta ese momento se habían hecho del mundo y que tenían una mayor influencia en él.
La Superación del Pensamiento Especulativo
Marx reconoce el valor del pensamiento de Hegel y asume la concepción dialéctica de la realidad. Para él, la dialéctica es el único método válido para comprender el desarrollo histórico y social; la negación, la oposición, es el motor y el principio del cambio histórico. Acepta que el discurrir de la historia es racionalmente necesario, que la historia tiene unas leyes que hay que descubrir para entenderla y explicarla. Los dos están de acuerdo en la necesidad de colaboración de los sujetos para realizar los destinos humanos. La diferencia entre los dos es la concepción del destino de la humanidad.
Crítica a la Economía Política y al Socialismo Utópico
Para Marx, el error fundamental de la teoría económica es no haber contemplado el origen del enriquecimiento capitalista. Este origen está en la plusvalía que el obrero genera en el proceso productivo. Para él, el fracaso reiterado de estos movimientos reside en que desconocen las condiciones de la realidad que intentan transformar.
Materialismo Histórico
Marx necesitaba una nueva teoría: construida a partir de los intereses de los hombres en su lucha contra la explotación. Esta nueva teoría será el materialismo histórico como nueva concepción de la historia basada en las realizaciones concretas de los hombres, en su acción en la naturaleza y con otros hombres, y en las condiciones materiales en las que discurre la existencia de los individuos.
Niveles de la Estructura Social
El estudio de las organizaciones sociales descubre la existencia de tres niveles:
- En el nivel económico se llevan a cabo las actividades para la producción de bienes materiales necesarios para vivir.
- El nivel jurídico-político establece los mecanismos de poder y las normas por las que se rige una comunidad, que se representan en el Estado y el derecho.
- En el nivel ideológico están presentes las ideas que cada sociedad tiene sobre sí misma y sobre el mundo. La función de la ideología es dar cohesión a la estructura social y perpetuar el sistema de dominación de una clase sobre otra. Esto es así porque la ideología dominante pretende extender su visión del mundo al resto de los grupos sociales para mantener así su poder y dominio.
De los tres niveles apuntados, el nivel económico constituye la base o infraestructura de la sociedad, mientras que los otros dos forman la superestructura. Esto significa que en la base económica se encuentra la explicación de lo que ocurre en los otros dos niveles.
Nivel Económico: Modos de Producción
La vida material del ser humano se lleva a cabo a través de la acción, de la actuación sobre la naturaleza para transformarla en bienes que nos sirvan para vivir. Esta actividad, el trabajo, es el elemento que define al ser humano. Marx consideró que la forma de trabajar, de producir, es determinante para explicar la situación política y la ideológica. El ser humano se transforma y la recrea mediante la realización de productos materiales, científicos, artísticos, etc. En este proceso de producción no se hace a sí mismo, pues desarrolla las capacidades que tiene, sus potencialidades como humano.
Elementos del Proceso de Trabajo
La producción de bienes se lleva a cabo en un proceso de trabajo por el que se transforma la naturaleza en objetos de consumo y en las relaciones de producción que son las que se establecen entre los propietarios de los medios de producción y los trabajadores directos. El elemento fundamental del proceso de trabajo son las fuerzas productivas, que son todos los medios necesarios para el desarrollo del trabajo, como la tecnología, la ciencia o las capacidades humanas.
El Modo de Producción Capitalista
Marx descubrió, al analizar las relaciones y las condiciones de la producción de este sistema, que bajo esa igualdad y libertad aparentes se escondía una desigualdad real entre el trabajo y el capitalista. La desigualdad y la explotación se producen porque el trabajador se ve obligado a vender su fuerza de trabajo en el mercado. Por esta venta recibe un precio. La plusvalía explica la siguiente relación de producción capitalista: el obrero recibe la cantidad de dinero suficiente para reproducir y conservar sus condiciones de vida como obrero, pero su fuerza de trabajo produce más de lo que recibe como salario; esto es, el tiempo empleado por el trabajador produce una parte que es la que recibe como salario y otra parte que no cobra y que queda como ganancia del capitalista como plusvalor. Es en la plusvalía donde residen la clave de la explotación capitalista y el origen de que en este modo de producción el proletario esté alienado, porque así el progreso de la civilización no enriquece al obrero y aumenta el poder que domina el trabajo. La consecuencia directa de la existencia de la plusvalía es la alienación, que no es el espíritu ni del hombre genérico sino del proletario. La entiende en dos sentidos: en primer lugar, el trabajador está alienado del producto de su trabajo; el resultado es el objeto producido, el resultado de su esfuerzo y actividad personal, pero al no pertenecerle, pues es propiedad del capital. En segundo lugar, el proletario está alienado respecto de la propia actividad productiva; en ella, el obrero es una mera mercancía que tiene un valor en el mercado, no se pertenece a sí mismo sino al capitalista.
La única posibilidad de transformar la situación de explotación que se produce en el capitalismo es eliminar lo que la origina, a saber, la plusvalía, y esta solo puede ser suprimida con la abolición de la propiedad privada de los medios de producción. El comunismo se define por esa eliminación de la propiedad privada. El paso a la sociedad comunista no es un paso automático, sino que exige la organización consciente del proletariado que ha tomado conciencia de su explotación y que decide subvertir el orden establecido.