Filosofía Moderna: Corrientes, Evolución y Crítica de Nietzsche
Filosofía Moderna: Orígenes y Principales Corrientes
La filosofía moderna surgió como resultado de transformaciones políticas, culturales y económicas ocurridas durante el Renacimiento. Entre los orígenes de la modernidad podemos destacar:
- Humanismo: Supuso la vuelta a los autores clásicos, griegos y romanos, por el deseo de encontrar un modelo cultural distinto al medieval. Del teocentrismo medieval se pasa al antropocentrismo naturalista.
- Reforma Protestante: Intentó recuperar el espíritu originario del cristianismo y llevó a la división de la Iglesia.
- Revolución Científica: Creó una nueva imagen del universo e impulsó la reflexión sobre el conocimiento. La experimentación y el empleo del lenguaje matemático son los pilares del método científico.
Principales Corrientes Filosóficas Modernas
La filosofía moderna se centró en dos posturas contrapuestas:
- Racionalismo: Corriente filosófica inaugurada por Descartes. Características:
- La realidad tiene un orden necesario que puede ser conocido.
- El ideal es la ciencia deductiva.
- Los principios fundamentales del conocimiento no proceden de la experiencia, sino que el entendimiento los posee en sí mismo.
- La razón humana tiene ideas innatas, que no provienen de la experiencia.
- Las matemáticas son importantes en la ciencia.
- Empirismo: Corriente filosófica británica de Locke y Hume. Características:
- Rechazo del innatismo.
- Crítica de las doctrinas metafísicas.
- Consideración de la física como modelo de la ciencia.
Nietzsche y la Crítica a la Tradición Filosófica Occidental
Contextualización
Nietzsche, filósofo de la segunda mitad del siglo XIX, llevó a cabo una crítica radical sobre la tradición filosófica occidental. Para él, la historia del pensamiento occidental es el error más largo que ha cometido el hombre, creando una serie de valores ascéticos que eran totalmente falsos y vacíos. Nietzsche diagnostica la enfermedad y propone un remedio a través de la venida del superhombre.
Tema
Nietzsche describe la transformación desde el hombre metafísico, que cree en ciertos valores que se demostrarán vacíos, aunque conoce la situación de incertidumbre en la que se encuentra, hasta llegar al superhombre que puede crear valores nuevos, activos y positivos.
Ideas Principales
- El hombre del pensamiento metafísico se asimila a un camello, que carga en su espíritu toda una serie de cosas inútiles para la vida, burlándose de la sabiduría y proclamando el ascetismo y la verdad absoluta.
- El hombre del nihilismo se asimila al león que quiere plantar cara y deshacerse de los últimos resquicios de resentimiento, ascetismo y decadencia, luchando con el “dragón”, con la ética kantiana y cristiana, con el “tú debes”, y cambiarlo por el “yo quiero”, en un intento por aferrarse a la vida y devolverle su valor.
- Pero el último hombre no puede todavía crear nuevos valores, no puede entender la vida como voluntad de poder y eterno retorno, y por ello se necesita una última transformación, la del león en niño. Se necesita olvidar todo lo anterior para empezar de nuevo, y tomar las cosas por primera vez, para interpretarlas por primera vez sin prejuicios.
Relación de las Ideas
Nietzsche nos explica cómo el espíritu humano sufre ciertas transformaciones. Comienza explicándonos tales transformaciones: la primera tiene lugar cuando el camello se convierte en león. Pero se da cuenta de su error y se transforma en león. Pero se necesita una última transformación, se necesita que el león se convierta en niño.
Explicación de las Ideas
Nietzsche considera que la historia del pensamiento occidental es un gran error. Pretende liberar al hombre de sus ideas metafísicas y convertirlo en un hombre libre que ame la vida por encima de todo. Y para representar tal liberación nos plantea las tres transformaciones que debe experimentar el espíritu humano. El hombre metafísico y cristiano cree en los valores impuestos por la metafísica occidental y por el cristianismo. Para Nietzsche, tal hombre está equivocado, ya que no hay ni mundo verdadero, ni una verdad absoluta, ni Dios, ni vida después de la muerte, y ahí es cuando el camello se transforma en león. Surge la última transformación, la del león en niño, la del “último hombre” en superhombre.
Vitalismo: La Vida como Fundamento
El vitalismo es toda filosofía que entiende como más fundamental la vida que la razón. Los conceptos más importantes alrededor de los que gira son: temporalidad, historia, irracionalidad, subjetividad, perspectiva, valor de lo individual, cambio, enfermedad y muerte.
Es habitual señalar dos formas de entender la vida:
- La vida en el sentido biológico: Este concepto subraya el papel del cuerpo, lo irracional, la naturaleza, la fuerza y la lucha por la subsistencia.
- La vida en el sentido biográfico e histórico: Podemos referirnos a la vida como conjunto de experiencias humanas dadas en el tiempo, tanto en su dimensión personal o biográfica como en su dimensión social o histórica.
Nihilismo y Metafísica: La Muerte de Dios y sus Consecuencias
Dios venía agonizando desde que comenzó a gestarse el imperio de la Razón en el Renacimiento y la Revolución Científica, pero fue la Ilustración la que precipitó su fallecimiento. La conmoción teórico-política-vital producida por la Revolución Francesa acortó hasta el mínimo su agonía. Murió Dios, pero su hueco quedó repleto de sólidas instituciones que seguían dispensando Orden y Providencia. Dios era el sentido del mundo, el garante de las instituciones políticas, el respaldo de la autoridad, el insobornable sancionador —premio y castigo— de la moral, creador, mantenedor, rescatador de la dignidad del hombre, que sin embargo frente a Él no era nada; pero Dios era también, y quizá principalmente, el significado de nuestro lenguaje, la posibilidad de un conocimiento organizado, las leyes de la naturaleza y las de la lógica, conservador de la estabilidad en la existencia de las cosas y de la identidad personal —almas con memoria y responsabilidad— de las personas. Todas estas funciones deberían haberse resquebrajado con la muerte de Dios: ¡el mundo tenía que haberse derrumbado! ¡la vida tendría que haberse hecho inimaginable! Pero apenas hubo algunas limitadas convulsiones. Las instituciones tomaron el relevo de su antiguo Dispensador de Sentido y continuaron funcionando solas sin su respaldo: el Poder, la Gramática, la Lógica, la Física, la Moral, el Derecho, las Cosas, las Personas, todo continuó marchando tras la desaparición de Dios. La Ilustración sustituyó a Dios por la Razón.