Hume y la Ilustración

Contexto Histórico

David Hume, nacido en Inglaterra, fue una figura central en la Ilustración, un influyente movimiento intelectual y cultural del siglo XVIII. Este período presenció grandes revoluciones burguesas en Inglaterra y Francia. Inglaterra lideró el estudio de las ciencias naturales y cuestionó la religión, destacando:

  • La proclamación universal de los derechos humanos.
  • El crecimiento de la burguesía impulsado por la industrialización.
  • Avances tecnológicos significativos.

Marco Filosófico

La ciencia moderna, iniciada por Galileo, y la filosofía moderna, con Descartes y Hobbes, surgieron en este contexto. El racionalismo y el empirismo, herederos del Renacimiento, defendían la razón como herramienta fundamental. Dos corrientes filosóficas principales emergieron:

El Racionalismo

Descartes, con su famoso “pienso, luego existo”, marcó un giro al priorizar la razón sobre la experiencia sensorial. La existencia del sujeto pensante se convirtió en la base del conocimiento.

El Empirismo

Este movimiento, en contraste, enfatizó la experiencia como fuente del conocimiento. El método experimental se consideró crucial. El empirismo defendía que el origen y la validez del conocimiento dependían de la experiencia.

La Filosofía de Hume

Actitud Empirista

Hume, en línea con la tradición anglosajona, adoptó una postura empirista. La experiencia era el origen y límite del conocimiento, oponiéndose al racionalismo. Esta postura se sustentaba en:

  • La tradición lógica y experimental de las universidades inglesas.
  • El clima de crítica social e ideológica de la época.

Teoría del Conocimiento

Hume buscaba el avance del conocimiento a través de la ciencia de la naturaleza humana, la única válida para el hombre. Su análisis se centraba en la validez del conocimiento. Para construir esta ciencia, Hume criticó la metafísica tradicional, atacando conceptos como:

  • Sustancia: No tenemos experiencia directa de ella.
  • Esencia: Solo existe al percibir objetos.
  • Ideas: Son abstractas y solo son verdaderas si se corresponden con impresiones sensoriales.
  • Ideas innatas: No existen.

Al rechazar las ideas abstractas, Hume cuestionó la relación causa-efecto, base de la metafísica. Solo observamos una conexión entre eventos, no una causalidad necesaria.

Filosofía Moral

Hume buscaba integrar la moral en la ciencia de la naturaleza humana. La tradición occidental atribuía a la razón la capacidad de juicio moral. Hume lo rechazó, argumentando que:

  • La moral no pertenece al entendimiento, ya que este no motiva acciones.
  • La razón conecta ideas o hechos, pero no conduce a la acción.
  • Los juicios morales dependen del sentimiento, no de la razón.

Conclusión

Para Hume, la moral reside en el sentimiento, no en la razón. La razón es “esclava de las pasiones”, que son particulares y no universales. Las verdades religiosas no son demostrables racionalmente. Hume rechazó tanto el espiritualismo como el materialismo. La inferencia solo es válida entre impresiones, no entre ideas. La existencia de Dios es indemostrable, ya que no podemos percibirlo ni afirmar o negar su existencia. Es una cuestión de fe. Hume argumentó que no podemos ir más allá de nuestras impresiones, limitando nuestro conocimiento.