Hume y Descartes: Dos Perspectivas Epistemológicas

La Causa y la Experiencia en Hume

Causa

La causa es un concepto falso, sin correlato real alguno, que el ser humano se inventa y utiliza para creer que conoce la realidad. Hume elabora una aguda crítica al razonamiento causal que en su opinión no es ni una cuestión de hecho ni una relación de ideas, sino una universalización infundada de la acumulación de experiencias particulares. El hábito nos llega a formar la creencia de que el futuro repetirá el pasado, pero no podemos afirmar con certeza que sea así. Por si fuera poco, el concepto de causa es una abstracción inobservable en cualquier experiencia empírica. Nos basamos tan solo en la costumbre para establecer todo tipo de razonamientos causales.

Experiencia

En Hume, experiencia sería sinónimo de percepción. Lo importante en este caso es el papel que desempeña en el conocimiento humano, que para Hume comienza en la experiencia, termina en la experiencia y sólo es válido cuando puede referirse a una experiencia empírica. De esta forma termina convertido en uno de los conceptos más importantes del empirismo de Hume.

El Subjetivismo y las Ideas en Descartes

Subjetivismo

El subjetivismo es la tendencia a fundamentar la realidad en el sujeto, quitando así valor al mundo objetivo. Descartes es uno de los autores que inician este subjetivismo, al fundamentar en el yo el conocimiento verdadero. Aunque luego vuelva a enlazar con el mundo a través de la demostración de la existencia de Dios, en realidad estamos ante un autor subjetivista, pues sólo la verdad del cogito puede dar una respuesta adecuada a la hipótesis del genio maligno. Además, el propio Descartes nos da una pista sobre el valor que concede a la subjetividad al apuntar en la regla de la evidencia que la verdad reside en las ideas (contenidos mentales) y no en las cosas. De hecho, este subjetivismo cartesiano bordeará constantemente el solipsismo: si no aceptamos su demostración de la existencia de Dios, nos tendríamos que conformar con el “pienso luego existo” como única verdad absolutamente indudable.

Idea

La idea es un contenido mental simple. La palabra idea adquiere por tanto en Descartes un nuevo significado, alejado del idealismo de Platón. Idea es para Descartes cualquier contenido de mi mente, por lo que una vez más volvemos a alejarnos de la realidad para refugiarnos dentro del sujeto de conocimiento. En consecuencia, la verdad para Descartes será una propiedad de las ideas, y no de las cosas, por lo que esta subjetivación del concepto de idea nos está alejando del mundo objetivo, con el que después será muy complicado volver a conectar.