Análisis de la Pirámide de Población del País Vasco y España (2015-2017)
Introducción
Este análisis examina la pirámide de población del País Vasco y España en los años 2015 y 2017, respectivamente. A través de la interpretación de sus elementos, se busca comprender la dinámica y estructura de la población en ambos territorios.
Estructura de la Pirámide
La pirámide se compone de dos gráficos de barras horizontales, divididos en cohortes de cinco años, que representan el número de hombres (izquierda) y mujeres (derecha). La base estrecha de la pirámide indica una población envejecida y una baja natalidad. A partir de los 40 años (País Vasco) / 35 años (España), se observa un descenso en el número de personas, coincidiendo con el final del “baby boom” a finales de los años 70.
Natalidad y Migración
Se aprecia un ligero aumento en el grupo de edad de 5 a 9 años en ambos sexos, atribuido al incremento de la natalidad, principalmente impulsado por la inmigración de finales del siglo XX y principios del XXI.
Envejecimiento y Esperanza de Vida
La parte superior ancha de la pirámide revela una población envejecida con una alta esperanza de vida. Este hecho se relaciona con el alto nivel de desarrollo, la buena infraestructura sanitaria, el acceso universal a la misma y la ausencia de problemas como la desnutrición o enfermedades erradicadas.
Entrantes y Salientes
- Entrantes (Disminución de la población): La cohorte 20-24 (País Vasco) / 15-19 (España) muestra una caída de la natalidad a finales de los años 90. La cohorte 75-79 refleja la “generación vacía”, resultado del descenso de la natalidad durante la Guerra Civil y la posguerra.
- Salientes (Crecimiento de la población): La cohorte 5-9 muestra un repunte de la natalidad. Las cohortes 35-39, 40-44 y 45-49 concentran las cifras más altas de población, fruto del “baby boom”.
Relación Hombres-Mujeres
Nacen más varones que mujeres, un fenómeno natural. Sin embargo, la esperanza de vida es mayor en las mujeres debido a factores biológicos y socioculturales. Las cifras de hombres y mujeres se igualan a partir de los 40 años, y a partir de los 50 años, el número de mujeres supera al de hombres. La fecundidad es baja, considerando el número de mujeres en edad de procrear en relación con la población infantil.
Proyecciones Futuras
La proporción de jóvenes, adultos y ancianos confirma una población envejecida con un alto porcentaje de personas mayores de 65 años. De mantenerse las tendencias actuales, se proyecta un estancamiento del crecimiento poblacional a medio plazo y una pérdida de población a largo plazo. La población activa se mantiene gracias a la incorporación de la mujer al mercado laboral y, desde los años 90, a la inmigración.
Conclusión
La pirámide de población presenta una forma de urna, característica de una pirámide regresiva. Refleja una sociedad con un progresivo envejecimiento, propia de un país desarrollado, con baja natalidad y mortalidad. El bajo número de niños no asegura el relevo generacional, por lo que se considera necesario implementar políticas migratorias y de natalidad para abordar este problema a futuro.