Lírica y Elegía en la Literatura Latina: Autores y Características
Lírica y Elegía en la Literatura Latina
La elegía está estrechamente asociada a la lírica, hasta el punto de incluirse dentro de esta. Por su especialización en temas amorosos y en la forma métrica, se presenta en otro apartado.
Lírica
Se denomina lírica porque los poemas eran cantados con el acompañamiento de la lira. Los temas son muy variados y la métrica también varía, aunque el enfoque es siempre personal y subjetivo. Los poemas se suelen denominar oda o carmen.
Las primeras manifestaciones en latín son el Himno de los Salios y el Himno de los hermanos Arvales. También hay referencias, aunque no se conserva nada, a un himno en honor a Juno Regina y unos himnos de banquete y de victoria.
Se introdujo en Roma en el siglo II a.C. y los primeros poetas líricos de nombre conocido son de finales de siglo, dentro del círculo de Quinto Lutacio Cátulo, aunque no se conserva su obra.
La siguiente generación de poetas (primera mitad del siglo I a.C.), son llamados poetae novi, como les llamó Cicerón con desprecio. Sus composiciones son breves, con perfección técnica y belleza formal. Presentan la marca del influjo alejandrino. Arte por el arte.
Catulo (siglo I a.C.)
Gayo Valerio Catulo (siglo I a.C.), natural de Verona, donde conoció a los poetae novi e intimó con ellos. Así, se introdujo en la nobleza más refinada y sus cenáculos literarios.
Fue destacable su relación con Clodia, a la que cantó en sus poemas bajo el nombre de Lesbia. Su obra nos ha llegado bajo el título de Catulli Veronensis Liber, en los que emplea métrica variable (yambos, hexámetros y dísticos elegíacos).
Catulo recoge una doble tradición griega: se inspira en los líricos arcaicos (Safo) y en los alejandrinos (Calímaco y Filodemo).
Sus poemas pueden clasificarse, dependiendo de los motivos de inspiración, en:
- Poemas mitológicos eruditos: extensos, de elaboración alejandrina.
- Poemas satíricos y epigramas: en los que critica a sus enemigos y la sociedad.
- Poemas líricos puros: que tratan con expresión sincera de sus sentimientos.
Estos dos últimos grupos tienen carácter autobiográfico.
Horacio (siglo I a.C.)
Horacio, hijo de un liberto, estudió en Roma y marchó a Atenas para estudiar filosofía. Trabó amistad con Virgilio, que lo introdujo en el círculo de Mecenas, y pudo conocer a Augusto. Gran defensor de su libertad personal. De su obra se conservan los Epodos, cuatro libros de Odas, dos libros de las Sátiras, el Arte Poética y el Carmen Saeculare. Todos ellos poseen una extraordinaria perfección formal: concibe cada poema como una estructura arquitectónica, es decir, cada verso se presenta independiente y ensamblado con el siguiente. Se inspira sobre todo en Safo y en la lírica coral de Píndaro.
En cuanto a los temas de sus Odas, encontramos reflexiones filosóficas, temas patrióticos, mitológicos, amor academicista, etc. En sus poemas inserta tópicos literarios como el carpe diem, el beatus ille y el aurea mediocritas. Presentándolos en forma de situaciones y reflexiones, teñidas de epicureísmo.
Elegía
Se considera subgénero por su carácter íntimo y personal. Se compone en dísticos elegíacos. En Roma, se cultivó de una manera sentimental y subjetiva. Los sentimientos personales son casi siempre desgraciados, por lo que siempre se ve dolor y sufrimiento en los poemas. Los poetas utilizaban casi siempre los mismos tópicos:
- Seudónimo para la amada. Catulo: Lesbia; Tibulo: Delia y Némesis; Propercio: Cintia; Ovidio: Corina.
- Encantamientos para lograr el amor.
- Peritus amoris: el poeta se presenta como un experto en penas del amor que pretende ayudar a los demás.
- Paraklausithyron: lamento ante la puerta cerrada de la amada.
- Militia amoris (relación amor-milicia) y carpe diem (disfrutar del presente).
- Beatus ille (vida campestre), paupertas (vida humilde) y aurea mediocritas (contentarse con todo).
Catulo (siglo I a.C.)
Escribía a Clodia, mujer que conoció en Roma, de gran belleza y pocos escrúpulos. La pone bajo el seudónimo de Lesbia. Entre sus epigramas en dísticos elegíacos, los hay de tema fúnebre y satírico, pero también de tema subjetivo y erótico.
Tibulo (siglo I a.C.)
Se conservan dos libros del llamado Corpus Tibullianum, cada uno dedicado a una amada: el primero a Delia, de la que se sintió esclavo; y el segundo a Némesis, por quien experimentó mucha pasión. Los temas que cultiva son la paz, el beatus ille y la predilección por lo bucólico. Se trata de un poeta sincero que escribe con claridad y sencillez.
Propercio (siglo I a.C.)
Escribió cuatro libros de Elegías, los tres primeros para su amada Cintia, expresando su pena con un gran patetismo, y el cuarto de temas religiosos y patrióticos, por el programa de recuperación de valores tradicionales que llevó a cabo Augusto. Su poesía imita a los poetas alejandrinos en el barroquismo de sus poemas.
Ovidio (siglo I a.C. – siglo I d.C.)
Su obra se compone por Amores y Heroidas, de su juventud; y Tristia y Epistulae ex Ponto, escritas en su destierro en la Dacia.
Amores es una colección de poemas en las que canta a su amada Corina. Expresa sentimientos más convencionales que de su experiencia personal. Heroidas se compone de quince epístolas poéticas en dísticos elegíacos. Se trata de cartas dirigidas por heroínas legendarias a sus amados (Penélope a Ulises, Dido a Eneas, etc.). El amor que trata es académico. Tristia es una recopilación de cartas. Por deseo del autor, no aparece el destinatario. Epistulae ex Ponto son cuatro libros de cartas dirigidas a su mujer y amigos, para pedirles que le ayuden a salir del destierro.