La Literatura Española del Siglo XX: Novecentismo, Vanguardias y Generación del 27
Novela Novecentista (Generación del 14)
Sus miembros procuraron renovar las técnicas novelísticas y poéticas de su tiempo: el lirismo, la ironía, el humor, el intelectualismo o la deshumanización.
Gabriel Miró
Cuida la expresión y muestra un estilo exquisito. Resulta excepcional su captación de sensaciones. Domina absolutamente el lenguaje y en sus obras la belleza formal resulta más importante que la acción. Obras destacadas: Nuestro Padre San Daniel, El obispo leproso.
Ramón Pérez de Ayala
Representa la novela intelectual. Usa el perspectivismo, lo que implica la bifurcación de la realidad. Posee un estilo denso, irónico, capaz de reflejar lo culto y lo popular. Su mejor obra es Belarmino y Apolonio (1921).
Ramón Gómez de la Serna
De carácter excéntrico, es el creador de la greguería, frase breve que encierra una metáfora insólita.
Vanguardias
Los vanguardistas no desean ningún tipo de reconocimiento y prefieren la marginalidad social. Proponen nuevas formas de entender la cultura y la creación estética:
- Surgen filosofías que rechazan la existencia de Dios y afirman la dimensión soberana del hombre (Nietzsche).
- Nacen movimientos rupturistas que rechazan todo lo anterior. Desde 1905 se suceden las vanguardias que proponen concepciones creativas renovadas.
- El motor de estas es el afán de originalidad, que representa un intenso deseo de mostrar al lector algo sorprendente.
Características comunes de los movimientos vanguardistas:
- Intención de romper con todo lo anterior.
- La promulgación de manifiestos.
- Incitación al escándalo.
- El sentido lúdico del arte.
Futurismo
El primer manifiesto data de 1909. Su autor es Filippo Tommaso Marinetti. Plantea la pasión por la velocidad y el progreso. Potencia la revolución, en tanto que nada frena al poeta. Se suprimen los signos de puntuación, se altera el orden lineal, se modifica la sintaxis y se eliminan los adjetivos. Se usan letras de distintos tipos, tamaños, colores… Pedro Salinas y Rafael Alberti mostrarán rasgos futuristas en algunas obras.
Expresionismo
Se origina en Alemania y destaca por su fuerte crítica y denuncia social. Los expresionistas dan valor a la imaginación y al sueño. En poesía los temas fundamentales se basan en la visión crítica de la sociedad y los sentimientos de horror, sufrimiento y solidaridad, nacidos tras la I Guerra Mundial. En teatro destaca Bertold Brecht, autor de obras de denuncia antiburguesas. En la década de 1920 se fundió con el Dadaísmo y más tarde con el Surrealismo. En España el autor más influido fue Valle-Inclán, con su esperpento.
Cubismo
Se intentan representar diversos aspectos de una realidad. En poesía se abandona la puntuación y la métrica es irregular. El poema se convierte en una sucesión de anotaciones sin enlace visible, confundiéndose tiempos. Destacan los caligramas de Apollinaire, y en lengua española los del mexicano Juan José Tablada.
Dadaísmo
Surge hacia 1914 por la obra del rumano Tristan Tzara. Se considera que hay que destruir todo lo anterior y empezar de cero. Gustaba de la provocación y el escándalo, hasta el punto de que muchos poemas imitan el balbuceo de un bebé.
Surrealismo
Pretende crear un arte nuevo que avance, y para ello se servirán del mundo de los sueños, influencia de Sigmund Freud. Sus máximos exponentes (André Breton y Louis Aragon) proponen la escritura automática. Partiendo del mundo onírico, el autor da su interpretación de la realidad. En cuanto a la estructura formal de los poemas, se tiende a emplear el versículo y se emplean enumeraciones caóticas. En literatura sobresalen algunas obras de Alberti, García Lorca y Aleixandre.
Vanguardias en España
Creacionismo
Su creador es Vicente Huidobro y Gerardo Diego será su máximo exponente español. Se intenta crear un lenguaje nuevo, constituido por metáforas sorprendentes, juegos fónicos y eliminación de lo accesorio. Ese lenguaje rompe con la norma, ya que las palabras abandonan su función representativa para alcanzar una significación más profunda.
Ultraísmo
Versión española de las vanguardias. Sus principales figuras son Gómez de la Serna, Guillermo de Torre y Rafael Cansinos-Assens. Se da cabida a todo lo nuevo, se concede especial importancia a la metáfora y se aboga por la supresión de la anécdota. Se evita lo sentimental y se defiende un arte fuertemente deshumanizado.
Generación del 27
- Nacen entre 1891 (Salinas) y 1905 (Altolaguirre).
- La mayoría son universitarios, algunos llegan a ser profesores. Casi todos pasaron por la Residencia de Estudiantes, heredera de la Institución Libre de Enseñanza.
- Les une la celebración del tricentenario de la muerte de Góngora en 1927, se oponen a los que no reconocían su talento.
- No hubo líder (hablándose de Juan Ramón Jiménez como tal).
- Son muy respetuosos con la tradición literaria española.
- No tienen un estilo único y en todos hay un deseo de renovar el lenguaje poético.