La Edad Media en la Península Ibérica

La caída del Imperio romano supuso un enorme retroceso en la vida diaria. En la península, durante la Alta Edad Media, tienen lugar las invasiones bárbaras, el asentamiento de los visigodos y su cristianización. La sociedad medieval es feudal, organizada en relaciones personales de vasallaje y dividida en tres estados: el pueblo llano (los vasallos), los nobles y el clero. Los religiosos constituían el tercer estamento y vivían en monasterios, donde se escribía en latín. A partir de los siglos XII y XIII, la sociedad empieza a cambiar. Surgen las primeras ciudades y, con ellas, los artesanos y comerciantes. Se crea así en Palencia la primera universidad española. Un rasgo particular de la sociedad y cultura es la convivencia de tres religiones: cristianos, musulmanes y judíos. La tolerancia de estas tres culturas ha dejado huella en las ciudades (juderías, morerías y barrios cristianos), como es el caso de los mozárabes y los mudéjares.

Primeras Manifestaciones Líricas

Las Jarchas

La lengua romance más antigua (siglo XI) se encuentra en las jarchas, breves poemas escritos en mozárabe, insertos al final de las moaxajas, de tradición oral.

La Lírica Tradicional

La vida, los trabajos de campo, la fiesta… son temas de poemas anónimos que se cantaban, bailaban y transmitían de padres a hijos de forma oral. A partir del siglo XV, fueron recogidos en cancioneros. Los temas principales son el trabajo, la naturaleza y el amor. La medida de los versos es irregular, predominando los octosílabos o heptasílabos. La rima es asonante, con abundancia de estribillos y paralelismos.

Las Cantigas

Escritas en gallego-portugués, las cantigas de amigo son poemas populares donde una voz femenina se queja a otras mujeres o lamenta la ausencia de su marido. Las cantigas de amor imitan la poesía de los trovadores provenzales, poetas cultos. Las cantigas de escarnio o de maldecir son poemas satíricos cortesanos.

Mester de Juglaría

Los juglares se ganaban la vida yendo de villa en villa, entreteniendo a la población. Recitaban poemas, contaban historias, hacían malabares y llevaban noticias.

El Cantar de Mio Cid

El Cantar de Mio Cid es un poema épico cuya composición se sitúa hacia 1207. La copia conservada es de un manuscrito del siglo XIV, firmada por el copista Per Abbat, con 3730 versos. El tema principal es la recuperación del honor del héroe. Destaca el partidismo del narrador y los rasgos característicos de la literatura épica oral: el estilo directo, la dramatización, las repeticiones, las apelaciones y los epítetos épicos. En cuanto a la métrica, está formado por tiradas de versos con rima asonante, cuyo número de sílabas suele presentar cesura.

Estructura y Argumento

  • El Cantar del Destierro: narra la salida del Cid de Vivar y la despedida de su mujer e hijas.
  • El Cantar de las Bodas: Alfonso VI pide al Cid que case a sus hijas con los infantes de Carrión.
  • El Cantar de la Afrenta de Corpes.

Mester de Clerecía

En la Edad Media, había pocas personas cultas. A estas personas con educación que sabían latín se les conocía como clérigos, aunque no fueran monjes.

A partir del siglo XIII, los clérigos, conscientes de que la mayoría de las personas no entendían el latín, decidieron escribir en castellano para instruir y transmitir sus conocimientos a la gente común. Llamamos Mester de Clerecía a la forma de escribir y al conjunto de obras que los clérigos crearon entre los siglos XIII y XIV.

Características del Mester de Clerecía

  • Utilizan un lenguaje culto y cuidado.
  • Escriben en verso.
  • La finalidad de sus obras es didáctica, es decir, buscan enseñar.
  • Los temas son casi siempre religiosos e inspirados en la tradición griega y romana.
  • Sienten un profundo respeto por los libros en los que se inspiran.
  • Utilizan exclusivamente la estrofa llamada cuaderna vía.
Cuaderna Vía

Estrofa formada por cuatro versos de 14 sílabas (alejandrinos) con la misma rima consonante.

Poetas del Mester de Clerecía

Gonzalo de Berceo

Es el primer poeta castellano cuyo nombre conocemos. Nació a finales del siglo XII en Berceo (La Rioja) y se educó en los monasterios de San Millán de la Cogolla (La Rioja) y Santo Domingo de Silos (Burgos), donde trabajó como administrador y notario del abad. Estudió en la Universidad de Palencia y se cree que murió en 1264. Su obra más importante es Milagros de Nuestra Señora, que consta de veinticinco poemas que narran milagros de la Virgen. Sus versos son espontáneos, sencillos, ingenuos y encantadores.

Juan Ruiz, Arcipreste de Hita

El Arcipreste de Hita vivió durante el siglo XIV. Probablemente nació en Alcalá de Henares, fue arcipreste del pueblo de Hita (Guadalajara) y parece que estuvo en prisión por motivos desconocidos. Por lo que se deduce de sus escritos, debió ser un hombre alegre, amante de la buena vida y muy culto. Su única obra conservada es el Libro de Buen Amor, formado por un conjunto de poemas con temas variados. Narra en primera persona sus amores, reales o fingidos, y entre ellos intercala otros asuntos: poemas líricos dedicados a la Virgen, cantos a serranas, coplas de estudiante, cuentos, fábulas… Predomina la cuaderna vía, pero también utiliza otros tipos de versificación. El autor afirma que escribió el libro para que las personas eviten el “loco amor”, aunque se atribuye aventuras amorosas con todo tipo de mujeres. La vivacidad narrativa, la malicia, la gracia y el dominio perfecto del idioma hacen de esta obra una de las más apasionantes de la Edad Media.

Prosa Medieval

En el siglo XIV, la producción en prosa se incrementa notablemente en Castilla, con nuevas traducciones árabes y crónicas históricas. La prosa se enriquece con la aparición de nuevos géneros narrativos: los libros de caballerías, los libros de aventuras, el auge del género histórico y la obra de Don Juan Manuel. Continúa la labor iniciada por Alfonso X el Sabio, con traducciones, ampliaciones y glosas de obras árabes, latinas y griegas.

Libros de Caballerías

Literatura idealista, también llamada materia de Bretaña, protagonizada por caballeros bretones, cercanos a la corte del rey Arturo y sus caballeros de la Tabla Redonda. En Francia, destacó Chrétien de Troyes en el siglo XII, quien consagró el género con obras como El caballero de la carreta (Lanzarote del Lago). El protagonista es el caballero andante, el héroe esforzado que influirá en Don Quijote. Entre los principales libros de caballerías españoles destaca Amadís de Gaula.

Don Juan Manuel

Es el primer autor literario en castellano que muestra plena conciencia de su condición de escritor. Su prosa sigue más los modelos latinos que los orientales. Se caracteriza por una expresión sobria y concisa, buscando claridad y realismo acordes con la intención didáctico-moral de su obra. Utiliza una prosa sencilla para captar el interés del lector y ofrecer enseñanzas comprensibles como modelo para la vida cotidiana.

El Conde Lucanor

Se trata de la obra más original de don Juan Manuel. Escrito entre 1334 y 1335, consta de dos prólogos y cinco partes. La primera parte, la más extensa y conocida, está formada por una colección de 51 cuentos o ejemplos. Las cuatro últimas secciones del libro recogen en sentencias de origen culto un parecido contenido moral al de los cuentos

ESTRUCTURA

La estructura de cada cuento suele ser muy similar, manteniéndose fijas las siguientes partes: el marco narrativo, el ejemplo y los versos finales.

En el marco narrativo, que precede y sigue a cada ejemplo, un narrador general presenta al joven con Lucanor y a su consejero, Patronio, conversando. El conde, ante un problema que se le plantea, pide consejo a Patronio, y este le responde con un relato, el ejemplo, apólogo o fábula que contiene la solución al problema planteado al conde.

Una vez finalizado el relato, Patronio aplica la enseñanza contenida en el ejemplo al problema del conde dándole un consejo sobre su problema.

En este momento aparece el narrador general, quien nos advierte que al conde le pareció bien el consejo de Patronio.

El cuento termina con dos viessos o versos finales pareados que resumen el contenido moral del cuento en el que se insertan y que sirven de moraleja.

FIGURAS RETORICAS                 

Hipérbole

Se trata de una exageración generalmente acompañada de un símil. La hipérbole es un recurso muy frecuente en poemas satíricos pero también en poemas amorosos o laudatorios. Esta figura refleja como ninguna el subjetivismo de la poesía.

Pleonasmo

Consiste en añadir un término redundante y obvio, que sirve para aseverar la afirmación y recalcar una misma idea. La diferencia entre el pleonasmo y la redundancia involuntaria radica en la intencionalidad del autor y, por otro lado, los resultados.

Paradoja

Es una del figuras más complejas y sutiles. Consiste en una afirmación a simple vista absurda que dice algo razonable y cierto en un grado inmediato de abstracción. Se produce un conflicto entre lo dicho y lo no dicho, pero también dicho, entre lo explícito y lo implícito.

  El que ha ofendido a otro nunca le perdona (Quevedo)

Antítesis

Consiste en contraponer dos palabras, imágenes o conceptos que se contradicen. Este juego de contrastes dan mayor fuerza y relieve a las imágenes contrapuestas en un paso brusco del frío al calor.

Oxímoron

Esta figura es una mezcla de la paradoja y la antítesis. Consiste en una antítesis paradójica. Como dijimos, la antítesis son dos conceptos que se contradicen. En el oxímoron la contradicción toma un matiz positivo, un resultado paradójico: “clamoroso silencio”, “dulce tormento”.

Hoy es siempre todavía (Antonio Machado)

Prosopopeya

Consiste en una personificación, convirtiendo a seres inanimados en animados y a los animales en personas. Esta figura tan aparentemente trivial es una de las más antiguas de la literatura y es la base de las fábulas. De este modo los paisajes sienten y los animales poseen las virtudes y defectos humanos.

Lítote

Se trata de una negación atenuadora. Un eufemismo que consiste en que, negando la virtud, se afirma el defecto. Es decir: “esto no está muy bien” significa que “esto está mal”.

Perífrasis

También llamado circunloquio consiste en eludir decir directamente lo que se desea decir dando un “rodeo” evitando las palabras “clave”.

LOS TOPICOS LITERARIOS

AMOR POST MORTEM (Amor más allá de la muerte): Carácter eterno del amor, sentimiento que perdura después de la muerte física. BEATUS ILLE (Dichoso aquel):Elogio de la vida campesina, rural, frente al ajetreo urbano y cortesano.  CARPE DIEM (Goza de este día): Invitación al goce de los años de juventud (= día) y al aprovechamiento del momento, antes de que el inevitable paso del tiempo nos conduzca a la vejez y a la muerte.Vid. Collige, virgo rosas y Fugit irreparabile tempus LOCUS AMOENUS (Lugar agradable): Carácter mítico del paisaje ideal, descrito bucólicamente a través de sus diversos componentes (prado, arroyo, árbol…) y relacionado, casi siempre, con el sentimiento amoroso.UBI SUNT (¿Dónde están?): Carácter desconocido del más allá, de la otra orilla de la muerte, materializado en interrogaciones retóricas acerca del destino o paradero de grandes hombres que han muerto.VITA-FLUMEN (La vida como río):Carácter fluyente de la existencia humana, equiparada a un río que avanza, sin detenerse, hasta fundirse en el mar, su muerte.

GENEROS LITERARIOS

Se denomina género literario a cada una de las clases en que se dividen los textos literarios, escritos por los autores con una finalidad determinada. Cada género literario comprende, a su vez, otros subgéneros literarios.

Cada género tiene sus rasgos característicos:

Género lírico: Se usa para expresar sentimientos y para ello, emplea generalmente el verso.

Género narrativo: Se utiliza para presentar historias realizadas por personajes que pueden intervenir mediante el diálogo. El narrador cuenta la historia y para ello puede utilizar distintas formas de elocución, esto es, la narración, la descripción, la exposición o la argumentación.

Género dramático: Es aquél destinado a ser representado ante unos espectadores. Los personajes intervienen sin la mediación de ningún narrador, siguiendo las indicaciones sobre vestuario, gestos, movimientos, etc. que contienen las acotaciones del texto teatral.

EL TEATRO

Llamamos teatro a aquellas obras literarias que son escritas para su representación por unos actores en un escenario. Sus rasgos más característicos son el uso del diálogo y que no aparece la figura del narrador.

OBRAS MAYORES

TRAGEDIA

Obra dramática de asunto elevado en la que intervienen personajes enfrentados a fuerzas invencibles (el destino, la culpa…).

DRAMA

Texto dramático de conflictos menos trascendentes que los de la tragedia. En el siglo XVII, recibió el nombre de tragicomedia.

COMEDIA

Texto teatral que representa el lado festivo y alegre de la realidad, con acciones de la vida cotidiana y desenlace feliz.

GENEROS LITERARIOS

Se denomina género literario a cada una de las clases en que se dividen los textos literarios, escritos por los autores con una finalidad determinada. Cada género literario comprende, a su vez, otros subgéneros literarios.

La estructura

Los elementos de la narración se organizan para forma un todo interrelacionado. De manera general, distinguiremos tres partes en una narración:

Planteamiento: Es la parte inicial del relato donde se proporciona la información necesaria para que se desencadene la acción posterior.

Nudo: Es el momento de mayor complejidad de la historia y donde se continúa lo iniciado en el planteamiento.

Desenlace: Es el episodio final en el que se resuelve o finalizan los conflictos. A veces el final puede quedar abierto.