1.1.4.3. El Control

Estas intervenciones son aquellas que tienen por objetivo disuadir al asistido y las que buscan rastrear rápidamente las dificultades.

Las intervenciones de control cuyo objetivo es la disuasión se ejercen en la mayoría de los casos por mandato legal. La autoridad que ejerce el Trabajo Social (TS) se funda entonces en la ley y ésta legitima sus intervenciones de control.

Estas intervenciones de control que tienen como objetivo la disuasión plantean el problema de la normalización: lograr la adhesión del asistido a las normas sociales que exigen de él un cierto tipo de comportamiento.

Estas intervenciones plantean además el problema del derecho a ser diferente, a la marginalidad; el derecho que tiene el asistido a llevar la vida que le parece mejor, aún en oposición total a las normas sociales dominantes.

Las intervenciones de control están también destinadas a la localización precoz de los problemas sociales y de las dificultades de las personas o los grupos. La localización precoz exige que el TS se adelante al pedido del asistido, que se ponga en contacto con él y le proponga sus servicios. Entonces, esta localización requiere ejercer un control sobre la población de que se trata.

1.1.5. Poner en Relación – Crear Nuevas Oportunidades

Bajo este rubro, incluimos las diversas intervenciones del TS que tienen como objetivo ampliar el horizonte relacional de los asistidos, ampliar sus marcos de vida y de referencias, y permitirles el acceso a nuevas experiencias que los enriquezcan y les produzcan satisfacción.

En estas intervenciones, el rol del TS es facilitar y, por lo tanto, se dedica a estimular y motivar al asistido para que experimente nuevas formas de vida social. Para ello, el TS puede utilizar, en forma concomitante, otras formas de intervención: apoyo, información, educación, etc.

En este marco pueden utilizarse tres formas de intervención:

  1. Poner en relación
  2. Apertura y descubrimiento
  3. Utilización, creación y participación en las estructuras del medio.

1.1.5.1. Poner en Relación

Se trata de facilitar al asistido la ampliación de su marco relacional, de permitirle un aprendizaje progresivo de la comunicación (o lo que es lo mismo, mejorar el sistema de comunicación) con otras personas y otras instituciones.

La relación que se establece con el TS constituye ya una primera apertura y puede utilizarse como trampolín para producir otras cosas. En primer lugar, relaciones con sus pares. En los límites de las relaciones igualitarias se pueden tejer lazos afectivos y comunicaciones significativas.

La relación con el TS puede utilizarse también para facilitar las relaciones del asistido con las instituciones y equipamientos del barrio, de la ciudad, etc.

Para ello es recomendable que el usuario participe en pequeños grupos, llevados por el profesional o no.

1.1.5.2. Apertura y Descubrimiento

Estas intervenciones están destinadas a estimular al asistido para que explore, en sí mismo y en su entorno, otras posibilidades; para que descubra en él y en su medio social otras fuerzas, otras personas y grupos, otras experiencias hasta entonces insospechadas o desconocidas.

En sí mismo, puede descubrir aptitudes latentes hasta entonces insospechadas (artísticas, intelectuales…).

En su medio social, se trata de explorar con el fin de descubrir lo que hay en cuanto a personas, instalaciones, instituciones, grupos, etc.

Con respecto a esta exploración y/o descubrimiento, el TS puede informar al usuario acerca de lo que existe, puede estimularlo a tomar contactos, acompañarlo y eventualmente facilitarle sus gestiones ante grupos y equipamientos. Se trata de estimular en el asistido el deseo de descubrir y de conocer su entorno.

Lo esencial es favorecer en el usuario una apertura y una visión distintas sobre sí mismo y su entorno. El paso siguiente vendrá después, el de atreverse: atreverse a utilizar lo que existe, participar activamente en esta vida social recién descubierta y, más aún, participar en la creación de otros grupos, de otras estructuras, de otras posibilidades nuevas.

1.1.5.3. Utilización y Creación de Estructuras del Medio y Participación en Ellas

Se trata aquí de estimular al asistido a participar de su medio social activamente, a ser parte destacada de la vida social y a utilizar las instalaciones que están a su disposición.

En este marco, la organización de los momentos libres adquiere una significación importante.

En el marco de estos grupos de acción colectiva, los participantes pueden satisfacer sus necesidades de participación social, hacerse aceptar y reconocer por sus pares y llevar a cabo una acción constructiva para sí y para los demás. En consecuencia, la participación en los grupos sociales refuerza y revaloriza la imagen de sí, permite la eclosión de las aptitudes y dinamismos de los individuos, refuerza su participación constructiva y eficaz en los grupos sociales más diversos.