Intervención Directa

Las intervenciones directas son aquellas que se dirigen al asistido en una relación frente a frente. El asistido está presente y es actor, tanto como el trabajador social. Poco importa que el asistido sea una persona, una familia o un grupo.

Clarificar – Apoyar

Se trata, para el trabajador social, de actuar utilizándose a sí mismo como instrumento en el intercambio con el asistido. Tiene como objetivo permitir al asistido analizar los diversos aspectos de su situación, restaurar o afirmar su confianza en sí mismo, su autoestima, y comprender mejor su propio funcionamiento en su relación con otros. El trabajador social usa su relación con el asistido como un medio privilegiado, como una palanca de las potencialidades latentes en el asistido.

a) La Clarificación:

Es comprender de qué se trata; la naturaleza del problema, el contenido de la solicitud, la situación del asistido, las repercusiones sociales y afectivas del problema que el asistido afronta. Es necesaria para comprender de qué se trata, pero también la utiliza para que el asistido llegue a una mejor comprensión de sí mismo. La clarificación consiste en incitar al asistido para que se exprese sobre su situación y sus problemas y permite ordenar los diferentes elementos de la situación para exponerla con claridad, sacando a la luz las relaciones dinámicas y contradictorias entre los diversos elementos enfrentados. Las intervenciones de clarificación deben entonces renovarse siempre. No alcanza con que un trabajador social haya trabajado con 25 familias diferentes sobre problemas de divorcio para conocer todo sobre ese tipo de situación.

El Apoyo:

Tiene por objetivo fortificar al asistido, disminuir los efectos paralizantes de su ansiedad y liberar en él las fuerzas susceptibles de movilizarlo para modificar su situación. Esta intervención de apoyo trata de aliviar al asistido disminuyendo la ansiedad, el temor, la culpabilidad que pueden menoscabar su capacidad para encarar su situación presente. Generalmente esta intervención pone énfasis en los problemas de la realidad actual y no en las causas lejanas e incluso inconscientes de su comportamiento o situación. Las intervenciones de apoyo tendientes a restituirle al asistido una mayor confianza en sí y una imagen más positiva de sí mismo no deben confundirse con propósitos tranquilizadores que convierten en trivial la situación.

La Comprensión de Sí:

Tiene por objetivo permitir al asistido discernir y comprender su propio comportamiento afectivo y de relación, y volcar los efectos de su comportamiento sobre los demás. La comprensión de sí es un proceso dinámico que no se detiene jamás, que siempre debe completarse. Esta intervención se utiliza frecuentemente en trabajo social con grupos y también en las entrevistas conjuntas con varios miembros de un grupo familiar.

Informar – Educar

Las intervenciones que agrupamos bajo este rubro son aquellas en las que el trabajador social utiliza prioritariamente sus conocimientos y su saber para responder a las necesidades del asistido. Esta forma de intervención adquiere mayor importancia por la complejidad de la legislación social.

La Asistencia Material:

La finalidad de esta intervención consiste en paliar momentáneamente una situación financiera precaria, o bien beneficiar al asistido con los servicios excepcionales reservados a las personas y familias en dificultades. La principal característica de la asistencia material es que no forma parte de los derechos del usuario asociado a tal o cual organismo, sino que está reservada, en principio, a las personas y familias que atraviesan un periodo de carencia material excepcional. La asistencia material ubica al trabajador social en un papel de mediador entre el asistido y los organismos que acuerdan ayudas o servicios excepcionales.

La Educación:

Algunas profesiones sociales educativas utilizan un soporte o una técnica específica que transmiten; encontramos así las puericultoras, trabajadoras familiares, consejeras en economía social y familiar, animadores socioculturales, etc. Las intervenciones educativas en trabajo social se nutren también de estos dos ejes que acabamos de mencionar: adquisición de conocimientos y de aptitudes y socialización o adquisición de comportamientos y de aptitudes y socialización.

Transmisión de un Saber y de un Saber Hacer:

Los profesionales sociales encargados de capacitar a los adultos para asumir roles sociales se dirigen particularmente a las mujeres en su rol de amas de casa y madres, de este modo puericultoras, enfermeras. Estas intervenciones educativas se encargan de transmitir un saber utilizando la palabra, la escritura u otros medios tales como el audiovisual.

Persuadir – Influir

En trabajo social, diferentes formas de intervención utilizadas corrientemente tienden a ejercer en forma consciente y querida influencia sobre los asistidos a fin de llevarlos a modificar su situación o a hacer.

La Persuasión:

Trata de influir en el asistido en un grado más alto que los dos precedentes. Se trata de convencer al asistido de unirse a las propuestas del trabajador social. Se usará entonces su poder de convicción, podrá apelar al razonamiento lógico, exponer los argumentos favorables a sus propuestas.