El término “modelo”, según lo define Ander Egg en su “Diccionario de Trabajo Social”, se considera como: “una construcción simplificada y esquemática de la realidad que surge de una teoría, y como tal puede ser contrastada empíricamente por la práctica”.

La intervención es la actividad del trabajador social de provocar cambios, es decir, el “qué hacer”, pero también el “cómo hacer”, por lo que es una acción guiada por conocimientos, valores y habilidades del educador social hacia la consecución de las metas. Desde esta perspectiva, estaríamos hablando de modelos de intervención socioeducativa como una intervención voluntaria y organizada con vistas a modificar el medio social, mejorar situaciones y transformar cuestiones socioeducativas.

Modelos de Intervención

Dentro de estos modelos se encuentran:

Modelo de Crisis

Este modelo, adaptado al trabajo social, se basa en los estudios de Linderman y Caplan. Los fenómenos que pueden provocar crisis son:

  • Accidentes o catástrofes (crisis situacionales).
  • Jubilación o crisis generacionales (origen social y cultural).
  • Fenómenos que afectan al desarrollo y estabilidad del individuo.
  • Fenómenos medioambientales (fracaso escolar-laboral, psíquico).

Pero existen otras dos condiciones: la percepción individual que se tiene y la incapacidad para resolver estas crisis.

Por tanto, la intervención se refiere a la acción que realiza el profesional en la vida de una persona o familia para aliviar el impacto y ayudar a movilizar los recursos para retornar a la situación de equilibrio. Los fenómenos emocionales que acompañan a la crisis son depresión, miedo, ira y ansiedad. La acción del educador debe ir dirigida a tranquilizar, pero también a ayudarle a hablar de sus problemas.

Las principales tareas del educador, por tanto, van dirigidas a:

  • Comprensión de la persona en situación de crisis.
  • Identificación de los síntomas.
  • Identificación de los factores precipitantes.
  • Identificación de los recursos.
  • Discusión sobre las medidas que se van a tomar.

El apoyo es la técnica más común, definida por Judith Nelson como “el intento para ayudar a que se sientan mejor, más fuertes o más confortables”, con cuatro clases de apoyo: protección, aceptación, validación y educación. Sin dependencia del usuario del educador.

Modelo Psicosocial o Diagnóstico

La teoría psicoanalítica sobre la que se apoya este modelo sirve a los educadores para el análisis y comprensión de las personas y sus situaciones. Los educadores desarrollan su trabajo mediante el uso de las relaciones personales, así pues, la entrevista es la base de la relación de ayuda, es el medio por el que se interrelacionan. En esta técnica hay que usar la empatía, para tener en cuenta los temores, ansiedades de los usuarios y explorar su mundo, etc.

Para ello, la metodología empieza por el estudio o exploración, mediante el cual el educador conoce a la persona, el entorno y el problema. Le sigue el diagnóstico, por el que el educador social realiza un proceso de mediación e interpretación, que ayuda a identificar situaciones, problemas y factores causales en el usuario o grupo. A continuación, se desarrolla un plan de acción estableciendo los objetivos y tareas a corto y largo plazo, así como el diseño de estrategias para modificar la situación. El tratamiento puede ser social o psicológico, y las técnicas son: orientación, comprensión, exploración, reflexión, etc. Finalmente, la terminación y evaluación, se acaba la relación o por la solución del problema o por la derivación a otros servicios.

Modelo de Modificación de Conducta

Consiste en modificar las respuestas del usuario ante los factores que influyen en su medio, sin cambiarlo deliberadamente, y en modificar los factores que imperan en el ambiente con el fin del cambio conductual. El tratamiento consiste en lograr el mantenimiento o modificación de la conducta. Los objetivos del educador son el cambio de conducta, instruirlo y hacer programas que modifiquen o mantengan la conducta a tratar. Para ello se sigue el siguiente procedimiento: los estímulos que generen respuestas problema son ignorados y se refuerzan los positivos. Los estímulos discriminatorios pueden utilizarse para reducir la posibilidad de que se ejecuten respuestas problemas y para incrementarlas. Se basa en que la respuesta instrumental condicionada tenga lugar en el futuro. Las técnicas que se utilizan en este modelo son: reforzamiento positivo, extinción de la atención, reforzamiento diferencial (mezcla de las anteriores), formación de respuesta, reforzamiento negativo.

Modelo Sistémico

Parte de la intervención con la familia como sistema que afecta al usuario, y ésta está afectada por cada miembro, de manera que todo lo que suceda a cada miembro afecta a su totalidad. El foco de atención se centra en el tipo de relaciones que se dan entre los miembros.

La metodología sistémica consiste en el contacto entre familia y educador, y esto nos proporciona información sobre ésta. La información se usa para la intervención. Las técnicas que se usan son las entrevistas como una primera fase, donde se presentan el educador y la familia, después viene la fase de definición del problema, la fase de interacción donde se evalúan las relaciones en la familia y la definición de los cambios deseados. El educador debe de proporcionar hipótesis de respuesta a los problemas o causas, debe de concluir las relaciones y debe de ser neutral.

Modelo Ecológico

Basa su teoría en la interrelación que se establece entre el individuo y los sistemas ambientales en los que se desenvuelve. La intervención debe dirigirse al contexto de los individuos, donde reside la génesis de la mayoría de sus problemas, en definitiva, a la red de relaciones en que se desenvuelve, modificándolas y potenciando sus posibilidades constructivas. En definitiva, se trata de utilizar los recursos comunitarios como elemento positivo de cambio, promoviendo la socialización, la participación social y la ayuda mutua. Se trata de crear recursos de apoyo y crecimiento, programar sistemas de apoyo comunitario y potenciar las redes de apoyo informal.

Modelo de Desarrollo Comunitario (Marco Marchioni)

Aclarar primero todos los elementos que el educador tendrá que conocer, esto es la fase preliminar de estudio. Esta fase prosigue durante todo el desarrollo del trabajo. En segundo lugar, está la fase de escucha, se trata de buscar nuevos métodos de comunicación que permitan un nuevo diálogo entre comunidad y profesional. Una vez escuchadas, se pasa a plantear las primeras iniciativas. Ya puestas en marcha, el educador pasa a ser parte observadora dejando a la comunidad las decisiones. A través de estas decisiones se llega a un plan global de desarrollo comunitario. Finalmente, las actividades desarrolladas se amplían a zonas más amplias.

A las plantas las endereza el cultivo; a los hombres, la educación. – Jean J. Barthélemy

Educar no es dar carrera para vivir, sino templar el alma para las dificultades de la vida. – Pitágoras

El educador mediocre habla. El buen educador explica. El educador superior demuestra. El gran educador inspira. – William Arthur Ward