IMPLICANCIA CLÍNICA:

a) Aparecen en forma de pápulas perladas que contienen vasos sanguíneos subepidérmicos dilatados y prominentes (telangiectasias).

b) Las lesiones de larga evolución pueden ulcerarse y, al cabo de muchos años, pueden ser sumamente agresivas y producir una importante infiltración local con afectación del hueso.

ÓRGANO: PIEL

DIAGNÓSTICO: MELANOMA MALIGNO

DESCRIPCIÓN:

El hallazgo fundamental se encuentra a nivel de la dermis, donde muestra depósitos de melanina y proliferación de las células neoplásicas malignas, muchas de las cuales son de forma alargada con núcleo de aspecto vesicular, cromatina irregular y nucléolo prominente que infiltra el tejido conectivo. El pigmento de melanina en algunas zonas es de aspecto grumoso.

COMENTARIO:

Es una neoplasia maligna de células que elaboran melanina. Clínicamente se manifiestan como un nódulo negro parduzco que puede estar rodeado de eritema, dependiente de la reacción inflamatoria que suele provocar. A veces se ulcera; en ocasiones se aprecian pequeños satélites de 1 a 2 cm alejados de la lesión primaria. Sin embargo, se ha señalado que en casos raros, la lesión tiene aspectos generalmente benignos y no se modifica durante años. Los melanomas malignos suelen dar metástasis tempranas en zonas adyacentes a la piel, ganglios linfáticos regionales y, a veces, por vía hematógena.

El diagnóstico histológico del melanoma maligno no suele entrañar grandes dificultades. El melanoma suele extenderse en distancia variable desde la unión dermoepidérmica hacia la dermis. Por lo regular, hay imágenes mitóticas en cantidad moderada, anaplasia e infiltración inflamatoria; pueden presentarse células gigantes tumorales multinucleadas. En algunos tumores, las células no tienen pigmento y son muy anaplásicas, por lo cual es muy difícil diferenciarlas de otro tumor anaplásico de crecimiento rápido. Los colorantes para la tirosinasa activada u oxidada de dioxifenilalanina (DOPA) suelen dar reacciones positivas en el melanoma; las funciones suelen ser satisfactorias solo si se emplea tejido relativamente reciente sin fijar. Los colorantes especiales tienen una utilidad máxima en las lesiones no pigmentadas, cuando no se sospecha clínicamente el melanoma. Los marcadores tumorales para melanoma histoquímicamente son positivos. La invasión de vasos linfáticos o sanguíneos es signo de pronóstico grave.

ÓRGANO: CUELLO UTERINO

DIAGNÓSTICO: CARCINOMA IN SITU CON EXTENSIÓN GLANDULAR

DESCRIPCIÓN:

En el corte se observa cuello uterino; el epitelio muestra franca hiperplasia y células malignas con escaso citoplasma y núcleos grandes, compactos e hipercromáticos, con pérdida de la polaridad nuclear. Hay también compromiso neoplásico de las glándulas endocervicales, pero siempre respetando la membrana basal.

COMENTARIO:

Ocurre en cualquier edad, desde los principios del tercer decenio hasta la edad avanzada. Las lesiones in situ alcanzan el máximo de frecuencia a los 20 o 30 años de edad. Es más frecuente en la raza negra, alcanza el doble de frecuencia en las casadas y es muy poco frecuente en vírgenes. Los factores que participan en el cáncer son:

  • 1.- Parto y el traumatismo concomitante en el mismo.
  • 2.- Edad de la paciente en su primer coito y frecuencia del coito.
  • 3.- Número de compañeros sexuales e higiene personal del cónyuge en relación particular con circuncisión.

Estudios de biopsias seriadas han comprobado claramente que las lesiones in situ resultan de alteraciones epiteliales sucesivas que pudieran anotarse de esta manera: hiperplasia de células basales, displasia o metaplasia atípica que, por último, se convierte en neoplasia inconfundible.

Estos cambios suelen comenzar en la unión entre el epitelio escamoso y el cilíndrico; y a menudo se asocia a cervicitis y endocervicitis crónica circundante. Los cambios celulares atípicos en el cuello del útero se clasifican en tres grupos: displasia benigna, displasia atípica y carcinoma incipiente. La displasia benigna es lesión reversible con importancia preneoplásica discutible. La displasia atípica significa alteración potencialmente maligna; en cambio, el carcinoma incipiente puede considerarse como una alteración maligna irreversible. A diferencia de las observaciones anteriores, se efectuó un estudio que significó que el carcinoma in situ a menudo es reversible y en algunos pacientes persiste sin progresar, pero esto adolece de falta de valoración histológica adecuada. La opinión aceptada en general se resume: el carcinoma in situ es lesión del epitelio cervical que indudablemente es precursor de cáncer invasor del cuello uterino.

El carcinoma in situ es muy frágil y precariamente establecido, por lo cual puede ser eliminado fácilmente en diversos procedimientos menores. Su evolución natural puede ser traumatismo de índole obstétrico.

Puede ocurrir desaparición espontánea del carcinoma in situ, pero es un fenómeno sumamente raro. El carcinoma in situ puede persistir sin progresar durante muchos años.

ÓRGANO: PROSTATA

DIAGNÓSTICO: CARCINOMA DE PROSTATA

DESCRIPCIÓN:

Los adenocarcinomas de próstata tienden a expandirse periféricamente más que centralmente. Los carcinomas son apreciados mejor por palpación que por visualización. La mayoría de las lesiones son adenocarcinomas que producen unos patrones glandulares bien definidos y fáciles de demostrar; las glándulas están revestidas por una sola capa homogénea de epitelio cúbico o cilíndrico de escasa altura. Con frecuencia falta la capa basal externa formada por las células típicas de las glándulas normales o hiperplásicas. En algunos casos, las glándulas son algo mayores y tienen un aspecto papilar o cribiforme; los núcleos son grandes, están vacuolados y contienen uno o más nucléolos grandes. El tamaño de los núcleos varía algo, pero en general no hay pleomorfismo; las imágenes de mitosis son raras.

COMENTARIO:

Los factores de riesgo incluyen edad, raza, historia familiar, niveles de hormonas y medio ambiente. La patogénesis no es precisamente conocida, pero debe tener en cuenta influencias genéticas, cambios hormonales endógenos y exposición a sustancias ambientales.