B. LOS ESPACIOS ESCÉNICOS NO CONVENCIONALES

El espacio escénico, entendido como espacio de representación, determina sustancialmente la puesta en escena de los espectáculos y eventos. El edificio teatral condiciona mucho las posibilidades de realización de los mismos al ofrecer una localización permanente y una disposición fija del público. Los nuevos lenguajes escénicos, los avances en materia de equipamiento escenotécnico y la búsqueda de nuevos emplazamientos para la realización de eventos cada vez más complejos y espectaculares, han ampliado el concepto de espacio escénico en función de dos elementos clave: la localización del mismo y la ubicación del público.

Los espacios adaptados

Como sala teatral: naves industriales, pabellones deportivos usados como teatros. Se reproducen los diferentes espacios funcionales vistos con anterioridad y exigen del regidor un esfuerzo de organización y control mayor debido a sus grandes dimensiones y al uso de equipamiento técnico de carácter eventual.

El espacio encontrado cerrado

O al aire libre: son aquellos espacios que se utilizan para el hecho escénico sin ser modificados ni dotados técnicamente. De edificios abandonados a complejos industriales en desuso pasando por viviendas, restaurantes, coches, habitaciones de hotel, rotondas, calles, islas, etc.

Los espacios parateatrales

Son aquellos espacios no organizados como un teatro y en ellos se representan espectáculos de carácter efímero.
El factor de ta ubicación del público permite distinguir entre tres espacios de representación diferentes:
  • Forma de ‘H’: el escenario queda expuesto desde dos laterales enfrentados
  • En U también llamada ‘a tres bandas’, sitúa al público en tres de los cuatro lados del rectángulo
  • O o ‘arena’ o circular, que ofrece grandes dificultades técnicas para la puesta en escena al carecer de zonas aforadas

E. LA ILUMINACIÓN: VALOR FUNCIONAL Y EXPRESIVO EN ESPECTÁCULOS Y EVENTOS

La iluminación consiste en la manipulación del fenómeno físico de la luz, la radiación electromagnética, que hace visibles los objetos y espacios afectados por la misma. La luz es capaz de modificar la forma en que percibimos lo que nos rodea, afectando a nuestra percepción espacial, emocional y sensorial. La iluminación, junto a la escenografía y el vestuario, es la responsable del aspecto visual de un espectáculo y evento y se caracteriza por aunar todas las propuestas de diseño y dotarlas de un significado completo. Además, aporta elementos específicos del lenguaje teatral como son la creación de atmósferas, la generación y modificación de espacios virtuales y el reconocimiento del tiempo en el relato dramático.
El diseño de iluminación es el resultado de las elecciones conceptuales decididas por el diseñador, en colaboración con el director de escena, en las que intervienen elementos de carácter estético, discursivo e ideológico. Se trata de encontrar, por medio de la luz, la imagen que el director ha pensado para su montaje. Esta imagen se revelará a partir de las cinco funciones básicas de la iluminación escénica:
  • Visibilidad selectiva: mostrar al espectador aquello que se desea que vea
  • Revelación de la forma: la luz hace aparecer las formas y descubre el carácter tridimensional de los elementos de la escena.
  • Composición del espacio: crea ambientes, descubre texturas y colores, fondos y brillos.
  • Creación de estados de ánimo
  • Aportación de información

C. LA DIRECCIÓN DE ESCENA

La dirección de escena supone la translación del texto dramático al escenario y de ella se encarga el director de escena, máximo responsable del resultado final obtenido e intermediario entre la obra dramática y el público. La dirección de escena se plantea los siguientes objetivos:
  • Explicar y conservar la coherencia en la conducta de los personajes
  • Plasmar en un espacio tridimensional habitado por actores las ideas principales que transitan por el texto
  • Ordenar y cohesionar todos los elementos de la producción
Los materiales con los que cuenta el director de escena, exceptuando al propio texto dramático y a diferencia de otras formas de expresión artística, son seres humanos: el dramaturgo (si la obra es contemporánea), los diseñadores, los actores y los técnicos.

D. LA ESCENOGRAFÍA Y LA UTILERÍA: FUNCIONES EN EL ESPECTÁCULO

Aspectos visuales que se incorporan en la puesta en escena, decorados y al diseño del espacio escénico. La utilería, por su parte, hace referencia al conjunto de objetos y enseres que aparecen en escena. Son los accesorios que complementan el vestuario y la escenografía, pero que no tienen ‘carácter arquitectónico’. El escenógrafo es el responsable de la conceptualización y ejecución escenográfica, pero su resultado es siempre el fruto de la interdisciplinariedad y de las premisas o propuestas elaboradas por el director de escena y el resto del equipo artístico, especialmente el iluminador.
Las funciones de la escenografía son las de narrar, representar, comunicar o producir una experiencia sensorial, intelectual, emocional y/o racional en el espectador.

El iluminador plasma su trabajo en el llamado diseño de iluminación, recogido en un plano que incorpora la posición de los proyectores en el escenario y sala, así como los canales empleados, los filtros o gelatinas utilizados. También pueden incluirse representaciones virtuales de su contenido elaboradas con programas informáticos, hojas de enfoque y hojas de posiciones de focos robotizados o móviles que detallan la dirección de cada uno de los proyectores y su situación detallada.

F. LOS ELEMENTOS AUDIOVISUALES

Al igual que la escenografía, la iluminación y el vestuario, la música y el sonido juegan un importante papel en la puesta en escena de los espectáculos.

La música en los espectáculos teatrales y de danza puede interpretarse en directo, o bien, puede estar pregrabada. La música, los efectos de sonido, pregrabados o ejecutados en directo por los intérpretes o por el propio regidor, y el procesamiento y configuración de sus fuentes pueden asumir diferentes y numerosas funciones de carácter narrativo, expresivo. El vídeo es un elemento que se ha incorporado al discurso escénico con mucha fuerza. La potencia de esta herramienta permite, incluso, la sustitución de decorados corpóreos o de intérpretes de carne y hueso por elementos virtuales de gran fuerza expresiva. Su capacidad para crear formas y ambientes y la posibilidad de incorporar música y sonidos permiten un abanico de prestaciones que equiparan sus funciones a las de la escenografía y la iluminación.

G. VESTUARIO Y CARACTERIZACIÓN

El vestuario de escena no es la ropa que se ponen los intérpretes ni un disfraz, sino que explica las cualidades y la personalidad del personaje y el contexto en el que éste se ubica. Junto al maquillaje y la caracterización (peluquería y postizos) compone la imagen del personaje y se convierte en un código visual en estrecha relación con la escenografía y el vestuario. El diseño de vestuario debe tener en cuenta diferentes factores: el estudio del contexto histórico, las relaciones afectivas de los personajes, las características psicológicas de los mismos y el mensaje que se articula a través de ellos.

A. LAS UNIDADES DE PRODUCCIÓN

UNIDADES DE PRODUCCIÓN PÚBLICAS

Las unidades de producción públicas (estatales, autonómicas o municipales) se rigen por el derecho público y pueden adoptar diferentes formas de funcionamiento u organización:
  • Centros de creación. Se caracterizan fundamentalmente por estar destinados a la producción y exhibición de espectáculos y por no contar con elencos estables. Normalmente disponen de uno o varios equipamientos escénicos como sedes estables. Centro Dramático Nacional (CDN) sedes: Teatro Valle-lnclán
  • Compañías. Se caracterizan por disponer de elencos estables en el tiempo y por realizar, además de producciones, actividades de formación y/o pedagógicas. Pueden o no disponer de sede estable. Compañía Nacional de Danza (CND)
  • Teatros o equipamientos escénicos públicos. Sería el caso del Teatre Nacional de Catalunya (TNC), radicado en Barcelona y de titularidad autonómica.
Los elevados presupuestos que manejan estas organizaciones posibilitan la producción de grandes espectáculos en los que intervienen elencos muy numerosos y el mantenimiento de amplias plantillas con extensos organigramas que permiten una especialización en las tareas de sus integrantes.

UNIDADES DE PRODUCCIÓN PRIVADAS

Las unidades de producción privadas adoptan formas empresariales reguladas por el derecho privado, fundamentalmente sociedades limitadas y sociedades anónimas. Dos perfiles: compañías y productoras.
  • Compañías. Son las empresas dedicadas a la producción y exhibición de espectáculos caracterizadas por contar con equipos artísticos más o menos estables y más o menos amplios en función de su tamaño. Como mínimo, cuenten con un director artístico, un productor, un director técnico y un colectivo de intérpretes. También es habitual que los integrantes desempeñen tareas muy variadas y se hagan cargo de aspectos como la gestión económica o la distribución de sus propios espectáculos. Pueden o no disfrutar de sedes estables.
  • Productoras. Las productoras se caracterizan por ser empresas más complejas y estructuradas. Se dedican a la producción y exhibición de sus propios espectáculos.
No suelen contar con directores artísticos pero sí con directores generales. Están especializadas en géneros determinados (musicales) y, a diferencia de las compañías, tienen una vocación más comercial que artística.