Descubre el Método Montessori: Educación Innovadora para Niños
María Montessori y su Legado Educativo
¿Quién fue María Montessori?
María Montessori fue la primera mujer médico en Italia y una pionera en el campo de la educación. A principios del siglo XX, desarrolló su innovadora pedagogía, centrada en el amor y el respeto por los niños. En 1907, fundó la primera “Casa dei Bambini” en Roma, un hito que marcó el inicio de su revolucionario método educativo.
El pilar fundamental de su pedagogía era el respeto al niño y sus capacidades, fomentando la independencia según sus etapas de desarrollo. Para ello, creó materiales específicos que ayudaban a conseguir estos objetivos.
Principios Pedagógicos del Método Montessori
La educación, según Montessori, va más allá de formular cuestiones; es acompañar al niño en su proceso de autorrealización. La maestra se considera una guía, una facilitadora del aprendizaje.
Los tres pilares del método Montessori son:
- La mente absorbente del niño
- El ambiente preparado
- El rol del adulto
La Mente Absorbente del Niño
La mente absorbente es la capacidad innata del niño de recibir, procesar y almacenar en las células cerebrales, sin ningún esfuerzo, todo lo que proviene del ambiente que lo rodea.
María Montessori comparó la mente de un niño con una esponja. El niño absorbe todo, ya sea que el agua esté limpia o sucia. A diferencia de una esponja, esta información no se puede exprimir, por lo que el niño absorberá todo lo que haya a su alrededor, sea bueno o malo. La cantidad de información absorbida dependerá del enriquecimiento del ambiente en el que se mueve el niño.
Los Periodos Sensibles
Los periodos sensibles son las predisposiciones internas del niño a atender a diferentes aspectos del entorno, teniendo en cuenta lo que considera necesario para su desarrollo y correspondientes a cada etapa de crecimiento.
Existen varios tipos de periodos sensibles:
- Periodo sensible del orden (0-6 años): El orden exterior brinda seguridad y facilita la construcción del orden interior. Es crucial establecer rutinas y hábitos cotidianos que promuevan la autonomía y la estabilidad emocional en los niños.
- Periodo sensible del movimiento (0-5 años): El desarrollo del movimiento es esencial. Los niños necesitan un espacio seguro y estimulante que les permita explorar por sí mismos. La estimulación adecuada respeta su ritmo natural y fomenta su crecimiento.
- Periodo sensible del lenguaje (0-7 años): El lenguaje se desarrolla rápidamente, desde la imitación hasta su perfeccionamiento. Interacciones como hablar, cantar, dar instrucciones o señalar estimulan su capacidad lingüística y potencian su desarrollo comunicativo.
- Periodo sensible de las sensaciones (0-6 años): Los niños experimentan y refinan sus percepciones sensoriales agrupando, diferenciando y nombrando sensaciones. Actividades cotidianas que incluyan juegos de discriminación y asociación ayudan en este proceso.
- Periodo sensible de los objetos pequeños (1-7 años): El interés natural por objetos pequeños fomenta la curiosidad y la concentración. Aunque debe haber precaución para evitar accidentes, se pueden utilizar estas preferencias para estimular su aprendizaje.
- Periodo sensible de la vida social (desde el útero hasta los 6 años): Desde temprana edad, los niños desarrollan su tendencia a socializar, inicialmente por supervivencia y luego para explorar su individualidad y relaciones con los demás.
Cada periodo sensible tiene un inicio y un fin; una vez que pasa, no regresa. La observación permite identificar las necesidades de desarrollo del niño en cada etapa y potenciar su aprendizaje. Al aprovechar los periodos sensibles, se pueden desarrollar habilidades artísticas, científicas y sociales que marcarán su futuro como adultos creativos y talentosos.
Los periodos sensibles pueden aclarar muchos “caprichos” infantiles y podemos ver si verdaderamente es un capricho o si el niño se encuentra en un periodo sensible que debemos nutrir.
Libertad y Límites en la Filosofía Montessori
“Libertad y límites son dos caras de una misma moneda, no puedes tener una sin la otra”.
El método Montessori se caracteriza por un absoluto respeto hacia la infancia e insiste en fomentar la libertad del niño. Se basa en un “Ciclo de trabajo en tres periodos”:
- “Puedes elegir cualquier material que ya se te haya presentado y que esté disponible (si lo usa otro niño, debes esperar)”.
- “Puedes trabajar con el material elegido todo el tiempo que quieras, siempre que le des un uso adecuado y respetuoso”.
- “Cuando termines, debes devolver el material a su lugar tal y como lo encontraste para que se pueda volver a utilizar”.
Hay pocas normas, pero muy claras. Además, los límites están integrados dentro de la libertad y se intentan expresar siempre en positivo.
La falta de límites puede generar mucha desconfianza y problemas de inseguridad. Un niño necesita saber dónde termina su libertad o dónde empieza el riesgo para su integridad física o psíquica. Existen 3 límites claros:
- No te haces daño a ti mismo.
- No me haces daño a mí.
- No haces daño a los demás.
El Ambiente Preparado de 0 a 3 Años
¿Qué es un ambiente preparado? Es uno de los tres pilares del método. Se trata de un espacio adaptado a las necesidades e intereses del niño o la niña, que favorece su autonomía y potencia el desarrollo óptimo en todas sus facetas.
- Etapa de 0-6 meses: El ambiente preparado del neonato es el cuerpo de su madre (o padre). Podrá observar desde nuestros brazos. Es importante hablarle y cantarle. Ofrecer materiales como sonajeros, libros de peluche, etc.
- Etapa 6-12 meses: Se caracteriza por la conquista del movimiento. Se necesita un entorno seguro y amplio para explorar, desarrollando la motricidad gruesa. Materiales recomendados: cajas de permanencia, puzles sencillos, la cesta del tesoro.
- Etapa 12-18 meses: El niño está inmerso en un periodo sensible para el movimiento (trepar, escalar, caminar, correr, etc.) y empieza a querer usar sus manos. Materiales: puzles sencillos con pomo, primeras construcciones, tuercas y tornillos, etc.
- Etapa 18-24/36 meses: Nuestra función podría resumirse en enseñarles, acompañarlos, observarlos y escucharlos.
La Importancia de la Observación
Para María Montessori, la observación consiste en “atestiguar” el desarrollo del infante. Es una técnica que se adquiere con la práctica y debe ser positiva, constructiva y respetuosa en todo momento.
¿Qué debo observar?
- Libertad
- Orden
- Actividad
- Ambiente
La Educadora o Guía Montessori
La guía es una gran observadora de los intereses y necesidades individuales de cada niño. Su trabajo diario está guiado por sus observaciones más que por un programa preparado con anterioridad.
Una guía Montessori planifica y presenta los materiales a los niños y niñas. También observa el ambiente para dar un seguimiento del trabajo. Otra tarea fundamental es preparar el ambiente.
Asistente Montessori: Características y Funciones
Un asistente no tiene la misma responsabilidad que un guía y su papel es de apoyo y asistencia dentro del ambiente. También ayuda en las rutinas de alimentación e higiene, y comparte sus observaciones con la guía para contribuir a las actividades diarias.
La diferencia principal entre guía y asistente Montessori radica en que el guía es el responsable del ambiente y la presentación de materiales, mientras que el asistente proporciona apoyo y ayuda al guía.
Entendiendo los Ambientes Montessori: Nido, Comunidad Infantil y Casa de Niños
Ambiente Nido Montessori (4 a 18 meses)
El ambiente Nido Montessori está preparado para infantes desde los 4 hasta los 18 meses de edad. Debe ser un espacio de vida acogedor, familiar, íntimo y seguro.
Características principales:
- Ofrecer estabilidad y continuidad: Fundamentales para el desarrollo psíquico.
- Respetar el ritmo del niño: Brindar experiencias significativas que lo impulsen a explorar.
- Favorecer la independencia: A través del libre movimiento, con actividades que no dependan exclusivamente de la guía adulta, permitiendo al niño descubrir sus habilidades.
- Proporcionar seguridad y aceptación: Ser una extensión del hogar que tranquiliza mediante relaciones constantes con el espacio y los adultos.
- Diseño a la medida del niño: Con zonas organizadas y materiales que respondan a sus necesidades e intereses exploratorios.
- Cuidar el aspecto estético y la armonía: Colores, mobiliario, decoración y luz, ya que en esta etapa los niños son muy sensibles a los estímulos del entorno.
Áreas del ambiente Nido:
- Entrada
- Área de higiene
- Área de comida
- Área de descanso
- Jardín
Áreas de trabajo:
- Área de lenguaje
- Área de movimiento
- Área sensorial y cognitiva
Ambiente de Comunidad Infantil Montessori (18 meses a 3 años)
El ambiente de Comunidad Infantil Montessori es el aula de la independencia y del orden. Acoge a niños y niñas de entre 18 meses y 3 años. Esta etapa se caracteriza por el momento del “yo solo” y del “yo puedo”.
Vida práctica es el corazón del aula, un área donde se aprende a vivir, a crear independencia y autonomía. El material es limitado en cantidad para fomentar el respeto, la pausa y la interacción entre compañeros.
La naturaleza es un elemento clave del entorno preparado. Elementos esenciales:
- Movilidad: Mucho espacio para la libertad de movimiento.
- Habilidades motoras finas.
- Orden.
- Exquisita selección de materiales.
- Colores neutros y materiales cálidos.
- Seres vivos: Plantas y animales para familiarizarse con la naturaleza.
- Música.
- Lenguaje y comunicación.
Ambiente de Casa de Niños (3 a 6 años)
El ambiente de Casa de Niños está diseñado para niños de 3 a 6 años. Permite desarrollar la autonomía, la voluntad, la disciplina interna, la libre elección y, en general, aprehender el conocimiento de manera alegre y fluida. Está equipado con materiales similares a un hogar, y el trabajo se divide en cuatro áreas principales:
- Vida Práctica: Actividades dirigidas al cuidado de sí mismos, de los demás y del ambiente físico.
- Sensorial: Los niños de esta edad aprenden a través de sus sentidos.
- Lenguaje: Los niños enriquecen el lenguaje ya adquirido, aprenden a escribir y leer.
- Matemáticas: Los materiales manipulativos Montessori ayudan a los niños a aprender y entender conceptos matemáticos.