Segunda Parte: La Circulación Oceánica y sus Fuerzas Generadoras

La circulación oceánica es impulsada principalmente por la fuerza de rozamiento del viento. Le sigue el gradiente de presión, originado por diferencias horizontales en la altura del agua (convergencia, divergencia, obstrucciones al desplazamiento, etc.), que impulsa el agua desde áreas de alta presión a bajas. Finalmente, la fuerza de Coriolis, resultado de la rotación terrestre, afecta a cualquier partícula en movimiento no (más…)