La Autocracia Zarista

El zarismo era una autocracia, es decir, el zar estaba investido de un poder absoluto, gobernaba por decreto y no estaba sujeto a ninguna constitución ni tenía que responder ante el parlamento. Una fiel burocracia y un poderoso ejército aseguraban el control del imperio, mientras que la Iglesia Ortodoxa constituía uno de los grandes pilares del régimen.

– La agricultura

Era la principal actividad económica y la tierra estaba en manos de unos pocos terratenientes, que pertenecían (más…)